Cada día, me veía obligada a probarme diferentes vestidos y escuchar los detalles de la elaborada ceremonia que se estaba planeando. Mi corazón se llenaba de angustia al imaginar mi vida atada a un hombre al que no amaba, mientras que mi verdadero amor, Alexander, estaba siendo alejado de mí por las manipulaciones de Lord Sinclair.
Un día, mientras estaba sola en mi habitación, Alexander apareció a hurtadillas por la ventana. Mi corazón dio un salto de alegría al verlo, sabiendo que él era mi única esperanza para escapar de esta vida que no quería.
"Anne, debemos irnos juntos", me susurró con urgencia. "No podemos permitir que esta boda suceda".
Sonreí emocionada y asentí. "Tienes razón, Alexander. No puedo soportar la idea de casarme con alguien que no amo".
"Puedo escabullirme entre los invitados durante la noche del compromiso", continuó Alexander. "Será el momento perfecto para escapar sin ser visto".
Asentí, emocionada ante la idea de finalmente estar juntos y dejar atrás todas las manipulaciones y expectativas de la alta sociedad.
"Entonces, nos iremos durante la noche del compromiso", le dije con determinación. "Será nuestro momento para comenzar una nueva vida juntos, lejos de todas estas falsedades".
Alexander tomó mi mano entre las suyas y me miró con amor y esperanza. "Te prometo que te haré feliz, Anne. Lucharemos juntos contra cualquier obstáculo que se interponga en nuestro camino".
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Editado: 03.08.2023