Dulce Mío

Capítulo 14.

Mentiría si dijera que no le preocupaba el hecho de saber que un potencial pretendiente estaba a tan solo unos cuantos metros de Talya, por supuesto, no quería decir que no confiara en ella, era, mejor dicho, que no confiaba en él y en las artimañas que podría usar, pues a los ojos de Adler los humanos no eran criaturas tan confiables. 

Ciertamente todo su ser pedía a gritos correr hasta el lugar de trabajo de la rubia y sacarla de allí para que el castaño no pudiese ni siquiera mirarla, aunque sorprendentemente se había logrado controlar, y solo la diosa sabía lo difícil que había sido eso, pero su sacrificio valió la pena cuando la vio salir de aquel lugar con una linda sonrisa de oreja a oreja mientras caminaba hacia él con los brazos abiertos. 

— ¿Como estuvo tu día? — Pregunto él, correspondiendo el suave abrazo que le ofrecía la rubia. 

— Primero vámonos —Fue lo único que dijo ella, en tanto casi arrastraba a Adler hasta la puerta del conductor, para después ella también subir al auto, aquello había dejado al moreno bastante sorprendido.  

Habían pasado solo cinco minutos desde que había comenzado a manejar, cuando Adler decidió volver a preguntar, ya que sabía o, mejor dicho, presentía que algo había sucedido. 

— ¿Que te ocurre? — Preguntó él, sin despegar su vista del camino. 

— Promete que no te enojarás — Dijo Talya dirigiendo su mirada hacía él, esperando una buena reacción, algo que había logrado conseguir junto a un asentamiento de cabeza, lo cual le indicaba que siguiera — Noah... — La sola mención de aquel nombre había puesto en alerta al león — A Noah le gusto — Termino por decir ella, captando inmediatamente como la expresión del moreno cambiaba, dejaba de ser suave para ser dura y temible, mientras al mismo tiempo detenía el auto. 

— En primer lugar, esa no es una razón para enojarme contigo y segundo... eso era evidente — Aquello último había salido de su boca tan forzosamente que si alguien más lo hubiese escuchado habría salido corriendo del miedo por el tono de voz usado. 

— Lo sé, pero, si era tan evidente para ti, ¿porque no sueltas el volante? — Pregunto Talya, al ver como en ambos brazos de Adler se comenzaban a marcar las venas de la fuerza que estaba ejerciendo. 

— El que lo supiera no quiere decir que el confirmarlo no me haga querer regresar a golpearlo — Adler solo giro su cabeza hacía Talya para conectar su mirada con la de ella — Aunque, yo sé que él es solo tu amigo y eso me detiene — Aseguro el moreno suavizando su expresión. 

— Él no es mi amigo... —Afirmo ella de pronto — Después de esto le dije que no podemos seguir siéndolos — A pesar de sentirse aliviado con aquello, Adler no pudo evitar sentirse culpable, ya que sentía que él estaba provocando muchos cambios en la vida cotidiana de la rubia. 

— Cielo, si es por mí, no tienes que hacerlo... — Aseguro, trasmitiendo toda su sinceridad. 

— No — Fue lo que respondió ella, mientras con ambas manos tomaba el rostro del león para acercarlo al suyo — A pesar de mis múltiples diferencias, sigo siendo descendiente de los lobos, sigo teniendo el carácter de ellos, y a pesar de no sentir tu olor como mi mate. no puedo estar cerca de nadie más que no seas tú, así que esto es más por mí que por ti — Y todo eso que se atrevió a decir y que Adler escucho con tanta atención fue sellado con un apasionado beso, el cual había sido iniciado por ella. 

— Eso me deja mucho más tranquilo — Dijo Adler cortando el beso por unos segundos antes de volver a besarla con la misma intensidad. 

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Había pasado una semana y algunos días, los cuales pata Adler habían sido los mejores de toda su vida, porque de cierta forma explicable el tiempo junto a su compañera era sumamente corto, cada cosa que hicieran, aunque fuese solo conversar era algo de lo que ni siquiera se podía quejar, porque en ningún momento a su lado lograba aburrirse. 

Estaba de más decir que su relación formal, había comenzado hacía tan solo unas semanas, que para él habían parecido muchas más, pues sentía que la conocía de toda una eternidad y lo más pronto posible deseaba que ella fuese más que su mate, el deseaba que fuese su esposa, aunque eso sonará bastante loco, ya que él se había prometido levar una relación como lo hacían los humanos. 

Pero, entre toda su nube de amor y caramelo, había una sombra que no dejaba de mantenerlo alerta, ya que a cada vez que enviaba información sobre lo pedido por Kasch sentía que se acercaba al origen de todo, y cada cosa le indicaba que cabía la posibilidad de que aquellos que se encontraban detrás de todo eso, eran muy bien conocidos por ellos, o al menos él tenía una ligera sospecha de quienes eran. 

— Señor... — Dijo uno de sus mejores investigadores, en tanto de acercaba a Adler. 

— ¿Que encontraste? — Pregunto él, con la esperanza de saber por fin quien era el dueño de ideas tan crueles como para deshacerse de inocentes. 

— ¿Conoce las iniciales J.M.? — Esas dos letras podrían ser tan comunes que no hubiesen significado nada, si no hubiera sido porque estas se encontraban en un pequeño trozo de papel junto a un corazón y solo había una persona en todo el mundo que poseía tal firma... a eso ya no se le podía seguir llamando coincidencia. 

— ¿Donde encontraron esto? — Pregunto el moreno, exaltado por saber que tal vez no estaba del todo equivocado. 

—En un lugar donde han comenzado a suceder todas las atrocidades— El león sentía que cada vez se acercaba más a la verdad y a la raíz de los males de las manadas y clanes del mundo. 

— Bien, envíalo al rey, él debe saber esto... — Comprendía que desde el centro del problema sería más fácil resolver las cosas, con toda aquella información era seguro que su hermano tomaría cartas en el asunto, además, sabía que todos en el mundo sobrenatural se estaban moviendo en ese momento, era solo cuestión de tiempo para atrapar a ciertas ratas, pero lo que Adler no sabía era que la última parte de la información jamás llegaría a manos de Kasch, así como tampoco imagino que esa noche, alguien le haría una pequeña visita “amistosa”, después de todo... ellos también habían sido amigos... 




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