Hoy era 25 de diciembre.
Hacia ya un año que Harry había decidido dejar este mundo y Maggie volvía a abrir la triste carta que el la había dejado.
Ella suspiraba y dejaba que sus lágrimas resbalaran, ella soltaba todo lo que sentía para que su pecho no doliera.
- Maggie - La ojiazul miró al rubio de su puerta y sonrío de lado.
- Feliz Navidad - El rubio depositó un beso en los labios de la chica.
- Feliz Navidad - Sonrió entre besos la ojiazul.
- Bien, hay que cenar por que tengo mucha hambre - Maggie sonrió y jaló la mano del rubio hacia el comedor.
La familia de Maggie, sus amigos y amigos de Harry estaban ahí, todos reunidos en una mesa.
- Antes de que comiencen a comer y se vayan ahogar con ella quiero que escuchen - El chico rubio tomó la mano de su novia.
<< Quiero pedir la mano de Maggie - La familia de la chica se levantó de inmediato y la ojiazul abrió los ojos exageradamente. -Quiero ser el chico que le devuelva la felicidad - El chico miró a Maggie y se arrodilló. - Déjame ser la persona con la que pases el resto de tu vida. Se que fué un año horrible pero siempre estuve ahí.
- Siempre estuviste ahí para mi.
- ¿Quieres casarte conmigo, Maggie?
Maggie miró hacía enfrente y casi se desmayaba, un chico ojiverde sostenía la mano de una chica rubia. Ambos sonreían eso hizo sonreír a Maggie también.
- Si, si me quiero casar contigo - Maggie al fin se sintió feliz.
Harry al fin sintió paz, se sintió feliz por ella, por la chica que alguna vez lo amó.
- Es bueno saber que al final consiguió el amor.
- Ya lo creo, Rick es muy buen partido. Y se ven muy felices...