♫ 3: ¿Realidad o Ficción?

So I'm daydreamin'

About you, you, and only you

Daydreamin’ – Ariana Grande

Junio, 2030

Soobin

—Regresábamos de América donde promocionamos nuestro sexto mini álbum "Tomorrow", fue alucinante. Sin embargo, teníamos un par de fechas más en Corea antes de hacer una pausa de la gira. Al mismo tiempo, debíamos prepararnos para el álbum japonés, entre otras cosas, así que en cuanto volvimos nos pusimos a trabajar. Lo primero en la agenda era grabar un TO-DO en Bukchon.

» Me encantaría volver a ese día todas las veces que pudiera.

« ♫ »

Junio 04, 2024. 10:30 p.m.

Dicen que el tiempo es inexistente cuando estás con la persona correcta. Para ellos, era mantener una charla casual con alguien que acababan de conocer, pero en el fondo sabían que estaban en un buen lugar. Más adelante lo descubrirían. Mientras tanto, pasaron la tarde entre miradas robadas y risas regaladas. Se sentían muy cómodos el uno con el otro, descubriendo más sobre ellos.

Aunque en su mayoría, ella fue quien llevó la conversación hablando sin parar. Cuando se trata de mantener una plática con extraños, su mente se queda en blanco. Se pone tan ansiosa que no sale ninguna palabra de ella, pero desde un inicio fue diferente con él. Pudo hablarle sin problema, incluso le contó sobre el proyecto que la llevó hasta Corea. Por supuesto, omitiendo que esperaba conocerlos a ellos. Y él se mostró interesado.

Acompañados del sonido de la lluvia chocando contra la ventana, Arianne le platicó sobre los lugares en los que estuvo por la tarde, diciéndole que no podía escoger un favorito entre todos ellos, pues cada uno tuvo su encanto. Sin embargo, quizá el mercado ganaría por la maravillosa comida. Soobin se rio, inclinando su cabeza hacia atrás, y ella volvió a sonrojarse. Era extraño lo que se provocaba en su interior con solo verlo reír.

—Entonces no son los lugares, sino la comida —comentó divertido.

—Si algún día vas estoy segura de que me comprenderás —dijo cruzando los brazos sobre su pecho.

—Te prometo que iré, seguro a los chicos también les gustará.

Ante la mención del resto de los miembros del grupo, las sonrisas de ambos desaparecieron. Esa pequeña burbuja en la que estaban se rompió al recordar la realidad y las mariposas revoloteando en el estómago de Arianne se desvanecieron.

Por un instante, su mente se llenó de una gran neblina, lo que la hizo confundir sus sentimientos reales con los que creyó que surgieron en aquel momento. Siempre fue una gran fan del romance; su madre le decía que estaba enamorada del amor y vivía por las historias con grandes romances.

Ahí se dio cuenta por primera vez de que las cosas no ocurren como en los libros o las películas. Conoció a una de sus personas favoritas, pero ¿qué más sabía sobre él que fuera auténtico? Estaba cautivada por un ideal, por el artista que se presentaba en conciertos, entrevistas o convivencias. Pese a eso, ciertamente no sabía nada de él y quizá nunca lo haría. Sin embargo, si esa era la única oportunidad que tendría, no se enfocaría en cosas que nunca los afectarían a ambos.

Para componer la incomodidad regresó al tema.

—¿Y qué hay del festival de las linternas de loto? ¿Alguna vez has ido?

—No, aunque he escuchado sobre él. Es uno de los días favoritos de muchas personas, sobre todo de los que viven en esta zona.

—Espero que mi viaje se alargue lo suficiente, me encantaría ir —dijo con un tono soñador.

Soobin estaba por responderle cuando un hombre muy familiar entró a la cafetería, buscó por el lugar con la mirada hasta que se encontró con la del chico y deprisa se acercó, frunciendo el entrecejo.

—Llevo todo el día buscándote. ¿Qué haces aquí? —No lo dejó responder, sus ojos fueron a parar hasta Arianne que se removió incómoda sobre su asiento—. ¿Tú quién eres? —Igual que con el chico no la dejó contestar, con su mano derecha apretó el puente de su nariz—. De todos no pensé que fueras tú el que nos daría problemas.

—No es lo que crees, lamento haber desaparecido, pero perdí la noción del tiempo.

—Por supuesto que lo hiciste. —Sin apartar su atención de Arianne siguió hablando—. No firmaste un contrato de confidencialidad, espero que no digas nada o igual podríamos demandar.

—Jae-won hyung. —Le llamó Soobin, sin embargo, el hombre lo ignoró.

—El señor Kim se pondrá furioso, aunque estoy seguro de que si algo pasa Ha-Minji podrá solucionarlo. De igual forma no pienso arriesgarme, ¿cuánto dinero quieres?

—¿Perdón? —soltó con indignación la chica.

—No pongas esa cara, si no es dinero buscas algo, dime que es y te lo daré.

—Yo me encargo, espérame afuera te prometo que no tardaré.

Paek Jae-won el jefe de seguridad del grupo lo pensó unos segundos, confiaba en el criterio de Soobin, así que con un asentimiento se dio media vuelta y abandonó el café. Soobin, con un suspiro se giró para mirarla.

—Lamento eso, no me di cuenta de la hora. No tengo mi celular y no pude avisarles en donde me encontraba.