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—Ahora que lo pienso ha pasado una hora desde que nos fuimos, Matthew y Max no dijeron qué hora terminarían—les comenté a las chicas

—Tienes razón mejor nos vamos.

Nos cambiamos y bañamos con una velocidad increíble. De nuevo me gire y el chico seguía ahí me detuve un rato a observarlo y tenía una cámara, no llegue a visualizar bien, pero parecía que estaba tomando fotos al mar, me quede concentrada en mirar al chico mientras las demás me hablaban...

—Oye Kiara apúrate—me grito Diane

—Hay que ir por los chicos—Daphne

—Cariño, puedes enamorar luego—y por último la señora Denisse

—¡Voy! —les conteste a todas

Caminé unos cuantos pasos hasta ellas y me detuve.

—Esperen—tuve un momento de reflexión—Aguarden... ¿Qué?

—Que dejes de enamorar telepáticamente—se burló Diane

Daphne se acercó a mi poniendo su mano en mi hombro

—No les hagas caso, ya sabes cómo son— y ahí va otro intento de Daphne para devolverme el ánimo, pero como siempre no me quejo

—Todo bien, pero aceleren el paso—menciono Denisse

Llegamos

Por fin

Vimos a Matthew y Max sentados en un banco de aquel parque, tenían puestos ambos audífonos

—Supongo que estaban escuchando música mientras nos esperaban—menciono Daphne

Me escondí entre los arbustos y gatee hasta llegar a su banco y me prepare para asustarlos

Pero como siempre

Me levante y...

—¡Bu! —sentí como una mano estrello en mi cara.

Era Max

—Eso dolió—siendo mis últimas palabras caí derrotada en el pasto

Llegue a ver como Matthew giro la cabeza y vio mi derrota a punto de reír

—Como se nota que nunca podrás asustarnos—esta vez no se echó a reír como las anteriores

—Mientras yo este, claro que no va a pasar—menciono Max con su cara malhumorada y seria de siempre cerrando su libro.

—Como se nota que si debió doler—dijo Daphne siendo la única que se preocupó por mi estado ya que se metió y me ayudo a levantarme

—Muchas gracias, Daphne—dije en voz alta—la única que me ayuda

—Buenas tardes, chicos—saludo la señora Denisse y Diane

—Denisse no se supone que deberías ayudarme eres el único adulto que nos acompaña—proteste

—Oigan llegamos, ¿Podemos ir a casa? —cuando nos escucharon no dudaron en correr hacia nosotras y abrazarnos tan fuerte, tan fuerte que sentimos que nos romperían los brazos, nos dijeron pensábamos que se habían perdido que susto que nos dieron.

— jajajajaja nosotras perdernos si como no— contestamos las tres riéndonos exageradamente.

—No bromeamos es serio pensábamos que se habían perdido han tardado una hora en llegar—se notaba que estaban preocupados.

—Bueno, eso es porque ustedes no nos dijeron a qué hora venir cuando nos dimos cuenta de eso vinimos lo más rápido posible, en serio no nos dijeron nada.

—Si no nos dijeron nada de nada —afirmaron las dos chicas detrás de mí, ellos revisaron el chat y vieron que lo que decíamos era cierto

—Tienen razón mil disculpas chicas le escribimos por error a otra persona—eso no fue un error babosas ratas a futuro vamos a saber eso.

—Bueno ­pero el tema es que ya estamos acá en fin póngase sus patines y vamos a casa, okey respondieron los primos gemelos, cuando se pusieron sus patines vi como aquel chico que vie en la playa estaba sentado en un banco lo reconocí por la sudadera que llevaba pensé acercarme para lograr verle la cara, pero sentí una mano en mi hombro era uno de los primos de mis amigas y me dijo vamos a lo cual asentí y nos fuimos en ese momento me olvidé de la existencia de aquel chico.

*A la muy común mañana siguiente*

Ni bien nos levantamos asemos y cambiamos notamos en la hora de desayuno que todos estábamos cansados, tenían ojeras, parecían desnutridos, también parecían desanimados, para resumir, parecían muertos vivientes.

—Querida familia, —interrumpieron— ahora que quieres —se notaba qu no tenía ánimo de nada.

—No nada si no que si nadie habla alguien tenía que hacerlo—tenía que ser el mejor cómico.

—Veamos si dices eso después de una buena golpiza en la cara—se notaba que mama estaba enojada.

—Oye...oye...oye calma... cálmate de una vez.

—Va me calmo, aunque tiene razón hay que hablar el ambiente está muy silencioso

—Entonces de que propones que hablemos.

—¿Yo?

—Si, tú eres la que hablo ahora dinos de que quieres hablar

—Bueno... —mente en modo ¡¡¡¡RAYOS, PORQUE CEREBRO HICISTE QUE HABLE DEBI CALLAR MI BOCOTA!!!! Con una mezcla de ¿y ahora de que hablo? Y para finalizar una pizca de ¡¡¡¡¡ya se les diré eso, muy bien cerebro!!!! Su cerebro: me insultas para luego alabarme bueno en fin la hipocresía (bueno en fin la hipotenusa jajaja) — aún no hemos decidido cuando íbamos a volver a casa a nuestro país a nuestra nación

—Oye cierto tiene razón—claro cómo no se me ocurrió decir eso.

—Bueno entonces cuando piensan volver a su país

—A mí ni me preguntes, solo me invitaron y acepte nada más

—Es verdad a ella solo la invitamos, pero no es que nos pensáramos ir tan rápido así que yo creo que nos podemos quedar un tiempo más.

—Hijas, yo estoy de acuerdo con eso ya que aquí me puedo sentar y mirar mis hermosas telenovelas.

Tres aceptamos quedarnos por más tiempo.

Parece que mi conversación nos sacó de ese ambiente silencioso y sin vida, mi cerebro debe estar como: "Yo te di la idea deberías estar agradecida conmigo", gracias también a ti cerebro.

—Oigan, ¿Pero esperen por cuánto tiempo más nos quedamos?

—Estaba pensando que mi trabajo empieza el mismo día que ustedes a clases así que hasta que empiecen clases hasta ese día sería mejor quedarnos al final hay que descansar el cuerpo.

—Si, es lo mejor—respondimos todos.

—Entonces hoy es sábado así que ¿qué hacemos? —volvimos al mismo silencio incomodo de hace rato y de nuevo yo empecé—¿Qué les parece si vamos a la playa?, o qué tal si conocemos los diferentes lugares turísticos de acá ¿Que les parece?, ustedes dos conocen más este lugar al fin y al cabo viven acá—todos me miraron con cara de que te pasa mensa, hasta que hablaron y me di cuenta de que su cara no expresaba lo que yo pensaba, sino que expresaba lo de hace rato ósea cansancio