Ataques

Las expediciones no han sido fáciles de ambos bandos han caído sobre todo del bando americano ¿cómo es posible que los americanos pierdan en su cancha? los de Estados Unidos conocen bien sus territorios, los mexicanos no se quedan atrás ni se digan los canadienses, entonces si los tres conocen bien sus terrenos ¿por qué los están matando tan fácilmente?

William en su zona a enfrentado a varios mágicos y gracias a su fuerte magia ha podido terminar con casi todos incluyendo niños y mujeres, poco le importa la orden del rey de salvar a los niños. Después de varios encuentros dejan mal herido al licántropo hechicero, para cuando despierta se encuentra en un lugar que no conoce más sin embargo el aroma le es familiar.

El celta trata de sentarse, pero los golpes en su cuerpo lo hacen regresar a la cama, aun así, logra poner atención al bullicio de abajo.

_ ¡A callar todo! Debemos calmarnos.

_Nos están matando y quieres que nos calmemos ¿estás loco Omar?

_No estoy loco, pero debemos pensar bien antes de actuar – se recarga en el marco de la ventana viendo los bosques de Canadá - _ ¡Chinadisima puta madre! ¿quién nos está matando?

_Pos quién, los mágicos – suelta Alejo como si nada-

_ Eso lo sé a lo que me refiero es a que nos han emboscado varias veces, han matados a lobos con mucha experiencia en combate ¿cómo por qué?

_¿Porque son fuertes?

_No lo son – interrumpe Innik- _ Saben de nuestros movimientos es lo que a mí me extraña en demasía.

_Pa’mi que hay un mitotero.

_No creo que entre nosotros iaga un chismoso.

_Rosenda es haya no aiga. Tampoco lo creo, estamos en una especie de guerra mundial todas las manadas están siendo mermadas no creo que se atrevan a jugar chueco.

_¡Ay tú! Ojo de loca no se equivoca déjame eso a mí.

_Suponiendo que su hay alguien que nos esté traicionando ¿quién y por qué?

_Sepa la bola – la mujer de unos treinta años se queda viendo a Innik- _ Ya me voy.

_¿A dónde? - pregunta casualmente Saida-

_Por ahí, por ahí.

_¿Sola?

_Lo que voy a hacer debe hacerse en soledad – le guiña un ojo-

_¡Voy contigo!

_He dicho que voy sola. Saida si hay uno o dos traidores entre nosotros voy a dar con ellos.

_No vas a encontrar traidores, todos somos hermanos.

_... Si mal no recuerdo el lobo negro siempre traiciona al lobo blanco, Caín mato a Abel así que, si creo que hay traidores, tal vez tú eres una después de todo los lobos nos disfrazamos de corderos.

_¡Voy contigo! - da un paso enfrente, pero Rosenda le corta el paso-

_Innik controla a tu beta. No sé porque tu insistencia Saida, le eres más útil a Innik en el frente que a mí en las sombras.

_¡Quiero ir! Soy buena peleando, te puedo defender.

_O matar por la espalda.

Atenas, Grecia, Villa Licaón.

La villa se mantiene con contadas personas en ella, entre las cuales están las adolescentes. La noche aún no se va por completo y el celular de la pelinegra ojos ojimiel vibra sin cesar, con toda la pereza del mundo atiende el celular para darse cuenta de que son mensajes, responde, deja el teléfono en su mesita de noche se cubre hasta la cabeza.

Son las diez de la mañana, Elena entra a la habitación de Emilia que aún está cansada por el viaje, pero sobre todo por no dejar de llorar la muerte de su madre, la pelinegra se sienta aun lado de su amiga, le acaricia los castaños cabellos, se acomoda a su lado la abraza, cierra los ojos, Emilia se queja y ella le da confort, la sonorense despierta sollozando, se acurruca en su amiga.

Será mejor levantarnos, Estrella ya anda de mal humor.

¿Tan temprano? Esa mujer necesita vacaciones.

sí, buenos, veras… es como dueña de aquí dudo que quiera dejar solo a mi papá.

Papá ya está muy verdolagón como para que le anden cuidando las talegas ¿no crees?

Antes de afirmar me puedes traducir al castellano lo que has dicho.

- Suspira- Nuestro padre ya está viejo, grande, maduro, longevo, veterano como para que le anden cuidando su aparato reproductor, en otras palabras: Ya está grande y se sabe cuidar solo.

¡Haaaa! A la próxima háblame en español por favor.

Eso hice. – sale de la cama para ir al baño directo a la regadera-

Te tengo una sorpresa – dice Elena desde la cama, un “¿Qué es?” se escucha desde la regadera- lo sabrás por la tarde.

El día pasa normal para Elena, fascinante para Emilia quien no daba crédito a sus ojos por la biblioteca que poseía, libros en todas direcciones de derecha a izquierda, arriba, abajo, tenían una habitación repleta de antigüedades, otra de oro macizo, plata, bronce, titanio, el recorrido de la villa parecía no tener fin, cuando menos se lo esperaron se llegó la tarde. Una exaltada Estrella sigue el aroma de las chicas hasta que da con ellas en el ala deportiva.

Se llegó la noche todas las luces de la villa se apagan dejándola en completa oscuridad, las chicas fueron llevadas a una sola habitación en la puerta Michael junto con Yaro haciendo guardia, en la balaustrada de la habitación Faarti vigilando. Mientras Darío y compañía salen de la propiedad a toda velocidad al sur de la ciudad rumbo a donde se encontraron los cuerpos mutilados.

La noche guardia va pacífica, el viento corre sereno, tranquilo ya fresco por el otoño Faarti sin hacer ni un ruido, el africano con los ojos abiertos de brillante color observado de un lado a otro. Ve sombra moverse así que hace unos sonidos poniendo en alerta a los demás. Dentro de la habitación Elena y Rose se ponen en alerta, Emilia se tensa.

_ Detrás de mi Emilia y no tengas miedo, soy tu hermana mayor y te voy a defender.

_Si, si – se coloca detrás de Elena, la ve cambiar y es cuando se siente más segura-

_Párteles su madre a esos putos.

Mientras tanto los lobos comandados por Jasir les hacen frente a las bestias en los jardines de la villa. La noche pasa de ser tranquila a hacerse turbulenta y de pronto aullidos, gruñidos inundan no solo los jardines la villa si no a los alrededores, los gruñidos no paraban por lo contrario se escuchaban cada vez más aterradores, se podía escuchar cómo arrancaba la carne de los cuerpos, la sangre brotar de cuerpos amigos y enemigos.