Capítulo 11

El comienzo de algo

Leilani
Mi querida señorita, yo no he tenido la vida que aparento hoy quiero ser sincero como siempre trato de hacerlo, tu me haz dejado entrar un poco en tu mundo y siento que ahora es mi turno, mi mamá me abondono cuando yo tenía 5 años, la verdad no sé porque lo hizo, mi papá es el que se a hecho cargo de mi con ayuda de mi abuela, nunca me a faltado nada, me han dado todo lo que he necesitado, mi papá trabaja muy fuerte para que no me falte nada, se lo agradezco, lo admiro mucho, hablamos mucho siempre que el trabajo se lo permita, no tengo hermanos, soy un poco cerrado en el tema de mi mamá, nunca se a puesto en contacto conmigo, creo que si le intereso me fuera buscado con el paso del tiempo me dejó de importar mi abuela y mi papá fueron los que me creiaron, han estado ahí para mí y son los que han dado la cara por mi, me va bien en el liceo tengo buenas notas, si he tenido algún que otro problema pero nada serio si no pregúntale a tu madrina, ella seguro tiene los detalles, es verdad que he estado con alguna que otra muchacha pero nada enserio y no me gusta hablar de ello, creo que lo que pasa entre dos se tiene que quedar ahí, es mi forma de pensar, siempre me a costado un poco hablar de mis sentimientos, creo que te voy aburrir mejor lo dejamos hasta aquí, te prometo que más adelante te seguiré contando, si tienes alguna duda o quieres saber algo, dímelo para decirte, gracias por tu carta y espero que la mia no te aburra.
Atentamente tu caballero.

No puedo evitar la sonrisa al leer como firmó tu caballero, mi caballero, es algo diferente, siempre he visto esto en las películas y leído en las novelas pero vivir es otra cosa, me levanto del suelo y empiezo a caminar por el jardín de la casa, oso el perro pasa a mi lado jugando, no sé cuántas veces he leído la carta desde que me la dio ayer, debo de admitir que Spencer sabe como trata a una muchacha, es solo un juego pero sé que se puede salir de control en cualquier momento y eso me aterra, somos de mundo diferente el mío un absoluto silencio y el del un absoluto ruido. Me vuelvo a sentar agarró la carta que es en una hoja de cuaderno, mi libro, busco el lápiz y el cuaderno.

Caballero de la armadura plateada, gracias por permitirme conocerte un poco más, sabes siempre en mi vida me acostado integrarme en la sociedad no es nada fácil, antes iba a una escuela normal pero los niños me miraban mal y los profesores no tenían las atenciones que yo necesitaba, por eso mi mamá y mi papá con ayuda de mi madrina me cambiaron de escuela voy para una que es para sordo y hay estoy haciendo el liceo, no es nada fácil crecer así la verdad muchas veces ves la mirada, la lástima de las personas y piensa que no entiendes nada, esto es lo que me tocó vivir Spencer no lo puedo cambiar nací así y asi soy, mi vida es esta y tengo que aceptarla, creo que con tu carta me estás dejando entrar a tu mundo conócete un poco más y eso me gusta, creo que lo que pasó con tu madre no define quién eres, sabes si ella hizo eso sus razones tendrá pero la que te crío fue tu abuela eso es lo importante tener alguien a nuestro lado que nos apoye, yo a mi lado tengo a mi mamá, a mi papá, a Liam, a Elizabeth, a mi madrina, Regina y muchas personas a mi lado, tu tienes a tu familia y amigos, no me aburres contándome tus cosas para nada, me dejas entrar en tu mundo, conocerte y saber quién eres realmente y yo también quiero que me conozcas, en este juego de las cartas me hacen sentir como en las películas, novelas y en los libros que de los tiempos antiguos en donde no existían la tecnología pero me gusta la idea creo que la carta es más profundo y más personal, a veces se nos olvida eso, un amor como los de antes es interesante pero ya veremos, una amistad muy linda, creo que eres un muchacho con un gran corazón Spencer que a lo mejor se siente un poco solo pero quiero que sepas que si me necesites aquí voy estar aunque no te pueda escuchar tus palabras, si podré escuchar tu alma y tú corazón que es más importante.
Te mando una sonrisa tu señorita.

Suelto un suspiro mientras doblo la hoja, a hora tengo que entregarla estoy segura que esto se conviertira en un juego sin salida, tal vez Spencer necesita alguien que esté dispuesto a escucharlo y que confíe en el, esa persona puedo que sea yo o no, eso será decisión de él y de nadie más, pero las cartas son el comienzo de algo que no sé si es para bien o para mal, eso ya los veremos con el tiempo, solo el dirá y veremos qué pasa en esta historia.