Capítulo 19

Consejos

Primera vez en mi vida que regresar al liceo y a las clases me emocionaba, pero no queria que terminara las vacaciones de Navidad, aunque no hice gran cosa pasar los días festivos con mi familia, dormir hasta tarde, comer las comidas que hacía mi abuela y pasar tiempo con mi familia, a Leonel lo vi muy poco aunque nos escribimos al igual que Elizabeth cada quien quería pasar tiempo con su familia, yo sabía que enfrentarme a mi primer día de clases era igual que enfrentarme a la decisión que tome, después de hablar y saludar algunos conocidos, entro en la coordinación, camino a la oficina de Andrea y la veo con Manuela tocó la puerta abierta y las dos me miran me siento nervioso.
- Buenas tardes, profesora Andrea puedo hablar con usted?.- Siento la garganta seca, Andrea comparte una mirada con Manuela.
- Que le pasará?, Romeo tiene una cara que lo dice todo y feliz año nuevo.- Manuela se levanta de la silla y me sonríe.
- Feliz año nuevo.- Le digo con una sonrisa a Manuela que pasa por mi lado.
- Vamos siéntate Castañeda.- Me dice Andrea señalándome la silla del frente, me siento.
- Quiero hablar con usted profesora Andrea?.- Le informo Andrea se arregla sus lentes y me mira.
- Que te pasa? Ahora soy profesora Andrea, donde quedo el amor de mi vida o la bruja.- Me dice con una sonrisa yo se la devuelvo, Andrea siempre me caído bien no solo se preocupa de los estudios de sus estudiantes sino también de su bienestar y eso pocos profesores lo hacen.
- Pensé que no te gustaba.- Le digo sintiendo los nervios en mi interior.
- A ver Castañeda debe ser muy importante para que estés tan nervioso y que hiciste ahora? Acabamos de empezar las clases.- Me dice con una ceja levantada y una pequeña sonrisa.
- No hice nada bruja así que quédate tranquila.- Cuando Andrea escucha como la llamé su sonrisa crece un poco.
- Ya me estás empezando asustarme pero sabía que vendrías así cuéntamelo de una vez.- Me quedo pensando sus palabras Elizabeth o Leonel le han dicho algo.
- Andrea quiero que me des un consejo y que me hables claro como siempre lo has hecho.
- Sabes que me gustan las cosas claras, pero la pregunta es cómo quiere ese consejo como tú coordinadora, profesora que alguna vez te dio clases, alguien mayor que tú o como.- Me mira yo suelto un suspiro.
- Ninguna de esas opciones, quiero me lo des como la madrina de la muchacha que me gusta y quiero algo con ella.- Le diga seriamente, los nervios los siento pero no vale la pena darle vueltas, Andrea abre los ojos sorprendida por mis palabras y después coloca una pequeña sonrisa en su cara.
- Vamos cual de mis ahijadas te gusta aunque creo que ya tengo la respuesta de eso, ambos le pegó duro.- La miro sorprendido y los nervios en mi interior.
- Le pasó algo a Leilani?.- Le pregunto Andrea sonríe y asintiendo con la cabeza.
- Mis sospechas eran ciertas y lo acabo de comprobar, ella está bien igual que tú.- Junto mis cejas.
- Que quieres decir bruja?.
- Dice que nada le pasa igual que tú, que todo está bien pero sabemos que no es así, aunque tiene su sonrisa en su cara, no quiere conversar mucho, no quiere salir, se la pasa en su cuarto o en el jardín viendo el cielo y jugando con el perro, Corina está un poco preocupa pero también hay que darle su espacio, ahora que te veo los dos están iguales, las últimas semanas de clases antes de irte de vacaciones estabas más callado y todos notaron un poco tu cambio de actitud, ahora todo cuadra.- La miro un poco nervioso ella solo me mira fijamente.
- No estás enojada conmigo?.- Le pregunto.
- No, porque tenía que estarlo, estoy preocupada por los dos, Elizabeth y Leonel no me han dicho nada pero no soy ciega, Leilani salía, no dudaba en ir a ver tus juegos de béisbol y salía un poco más, no hay que ser un genio para darse cuenta de que entre ustedes estaba pasando algo.
- No ser que decirte.- Bajo un poco la mirada Andrea me sigue viendo fijamente, cuando quiere puedo intimidar a cualquiera.
- Vamos a ver Castañeda te gusta ya me lo dejaste en claro ahora que quieres de mí.- Levanto la mirada para encontrarme con la de ella.
- Quiero tu consejo, no se que hacer, me gusta enserio Leilani, quiero ir más allá, no pasó nada entre nosotros te lo juro, solo unas cartas, unas conversación en el cuaderno, no la bese te lo juro, me crees verdad?.- Estoy demasiado nervioso Andrea se ríe un poco.
- Nunca pensé verte así, estás demasiado nervioso, estás más nervioso que Leonel cuando me dijo que era novio de Elizabeth, el pobre se enredaba al hablar.- Me sonríe pero se que es para calmarme un poco.
- Todo iba bien pero después me pidió que no le escribiera más nada y que cada quien siguiera su camino.- Le informo Andrea se coloca sería.
- No me sorprende te lo digo en serio, en la terapia y las reuniones le han dicho a Corina y Enrique que Leilani es muy nerviosa, insegura, que pasa ella prefiere estar en sus cuatros paredes en donde se siente segura, le cuesta integrarse con los demás, digamos que quiere seguir en su propio mundo donde está bien y nadie la pueda lastimar, esto a la larga le puede traer problemas porque si ella no se integra a la sociedad, supera sus miedos, se adapta, se puede convertir en un serio problema, tiene que aprender un poco más a ser independiente.- Andrea me mira a cada palabra que dice.
- Pero ella me dice que está bien con su discapacidad, que es feliz a su manera y que la acepto.- Le explicó.
- Spencer la acepto y está aprendiendo a vivir con ella pero que pasa, hay personas que no saben cómo lidiar con eso, las apartan un poco, se sordo es díficil es una discapacidad que no se puede ver, muchos no cuenta con la posible de ir a una escuela y les cuesta, Leilani le costó leer y escribir pero era necesario para que se defendiera, aprendimos el lenguaje de señas para ayudarla pero no todos lo saben, como se van a comunicar con ella, es díficil tiene que enfrentar las miradas, las risas, la lástima, la ignorancia, la diferencia y todos eso le afecte pero también es necesario que se enfrente a eso y pueda ser un poco independiente.
- A veces las personas se olvidan de que una mirada y una risita nos pueden dolor en el alma, el observador te ayuda a ver cosas que los demás no se dan cuenta y no sabes cómo duele que de alguna manera te demuestren las deferencias que los separan.- Me acuerdo de lo que me escribió en una de sus cartas, me pasó las manos por el cabello esas cartas las he leído tantas veces que me las he aprendido de memoria.
- Andrea no hay manera que ella pueda escuchar un poco, aunque sea una posible y si le colocan una de esos audífonos que usan las personas sordas.- Andrea asiente con la cabeza dándome a entender que entendio.
- No, ella perdió la audición un 99%, no hay nada que se pueda hacer solo ayudarla a que sea más independiente y que sea feliz.- Me dice dándome una sonrisa triste y veo un poco el dolor en sus palabras.
- Porque Andrea?.- Le pregunto me duele saber que no puedo ayudarla y que tenga que cagar todo eso.
- Realmente no hay una razón, Corina conoció a Enrique desde siempre éramos vecinos, con el paso del tiempo fueron creciendo y se enamoran se hicieron novios a los catorce años, después de un tiempo se casaron, el empezó a trabajar en una fábrica, ella también tenía su trabajo, Corina y Enrique querían tener un hijo después de un tiempo le costó muchísimo, tanto así que mientras yo estaba terminando mi carrera me embarace ella quería un hijo y en mis planes no estaba que loca es la vida, tuve a Elizabeth ya viviendo con su papá, Corina me dijo que mientras yo terminaba mi carrera y empezaba a trabajar ella la iba a cuidar y ayudarme así fue, después cuando Elizabeth tenía como seis meses por fin se hizo el milagro y salió embarazada, Corina tuvo dos perdidas antes de su embarazo porque lo dicieron que ella dejara su trabajo y así fue, el embarazo tuvo algunas complicaciones como unas infecciones y otras cosas pero nada grave el médico dijo que todo iba bien, llegó el momento del parto se le complico un poco pero todo salió bien, cuando nació Leilani era una bebé muy linda y decidieron colocarle el nombre, sabes que significa su nombre?.- Me mira yo niego con la cabeza, Andrea me sonríe y está sumergida en los recuerdos.
- Es de Hawái significa niña celestial, con el paso del tiempo fue creciendo y empezaron a notar ciertos compartimientos, le dijeron al pediatra y después de muchos exámenes y estudios llegaron a la conclusión de que era sorda, pesaron que era leve pero con algunos tratamientos y exámenes se dieron cuenta que no, que tenía una pérdida de la audición un 99% y que no había nada que hacer, eso le dolió mucho a Corina y Enrique porque lo quería era una niña sana pero bueno no era así, fueron para terapias para ayudarlos a superar eso y ver cómo ayudar para que su vida fuera normal y tranquila, con el paso del tiempo llegó el momento de la escuela y con ella crecían los problemas, fue difícil que aprendiera a leer y a escribir, aprender el lenguaje de señas para ayudarla a comunicarse, Corina se a dedicaba a ella y Elizabeth se crió con ella solo se lleva un año de diferencia, poco a poco fue aprendiendo pero hubo días que Corina y Enrique la pasaban mal no sabía cómo llegar a ella, a veces se le olvidaba y le hablaba, muchos le tenía lástima, no sabían cómo compartase a lado de ella, la hacían a un lado, ellos se desperaban al igual que Leilani que lloraba porque no sabía lo que pasaba, se sentía mal, a veces no la entendían y la trataban mal algunas personas, era solo una niña tratando de entender este mundo, pero desde niña siempre a tenido esa sonrisa que alumbra todo, después Corina quedó embarazada de Liam no fue planeado, su atención se divido en los dos, estaba nerviosa de su embarazo porque podía nacer igual pero no fue así, ahora tenía que dedicarle atención a Liam y a Leilani, eran diferentes Liam si escuchaba y tenían que dividir su atención para que sus hijos se sientiera amados, por eso van a terapia para que los ayuden, a Leilani le recomendaron en la escuela ir a terapia, en la escuela en donde estudiaba tenían un psicólogo y la ayudaba a superar todo esto, es díficil.- La miro nunca pensé que mi señorita tuvo que pasar por tanto, ella nunca me comentó de esto, ahora sinceramente la admiro más, al igual que sus padres, hermano, Andrea y todos lo que han tratado de que sea feliz.
- Te digo esto para que entiendas que no es fácil, esa niña a tenido que lidiar con la crítica y la lástima, todo lo que no le hace bien, por eso se quiere encerrar en su burbuja pero no le hace bien, está discapacidad auditiva no se puede ver, no tiene un indicador que te haga entender y ver que una persona es discapacidad, no a tenido una vida fácil pero también siento que se tiene que enfrentar al mundo, Spencer te voy a ser sincera tú no tienes que cagar con esto, enserio no eres su familia, tú puedes simple salir por esa puerta y olvidar que existe, se acabó todo, ella hace su vida y tu haces la tuya, sigues siendo el mismo muchacho que eres hasta hora, es tu decisión, decides lo que dicides es tuya y de nadie más, eres un muchacho que tiene la vida por delante y no tiene porque cagar con esto, lo que significa estar con ella porque lo digo como una persona objetiva, no te estoy hablando como la madrina de Leilani, estar con ella y querer algo con ella es también lidiar, enfrentar y estar con su discapacidad auditiva, sus miedos, tristeza, dolor, las miradas, la lástima y todo lo demás, ahora tu decides estás listo para enfrentar esto o te olvidas de ella eres un muchacho que apenas está empezando su vida y no tiene porque complicarsela, la decisión está en ti.- Me quedo pensando en sus palabras y Andrea me mira fijamente, ella habla sinceramente y me deja a mi que decida.
Miro mis opciones olvidarme de todo y seguir con mi vida o luchar por ella y estar para apoyarla, se que se ve fácil pero no lo es son muchas cosas que tengo que tomar en un cuenta, me acuerdo de todas las veces que la miraba, las sonrisas, cuando se sonrojaba, sus miradas nunca en mi vida una mirada significaba tanto y me trasmitía tanto como la de ella, coloco una sonrisa en mi cara, Andrea me mira esperando mi respuesta, me acerco un poco más a su escritorio.
- Voy a luchas por ella, no la veo solo por su discapacidad, se que ella vale mucho más que eso, es una muchacha dulce, que tiene miedo es razonable, es fuerte porque sigue adelante y le regala al mundo una sonrisa, no me voy a dar por vencido voy hacer mi intento de estar a su lado.
Andrea me sonríe y me doy cuenta de sus palabras fueron una trampa pero no me importa es su sobrina y su ahijada después de todo lo que a pasado se que la quiere proteger, estoy seguro de lo que siento por ella y se que vale la pena.
- Veo que tomaste tu decisión ahora solo falta la de ella, si en verdad quieres algo con ella, lucha el amor sincero y bonito se construye día a día, se lucha por el corazón del otro, nadie puede decirte cuando vas a conocer el amor y cuánto va a durar, mira a mi hermana Corina y a su marido Enrique se hicieron novio cuando tenían catorce años siguen juntos y lo que parece felices, ahora yo estoy separada, te digo esto para que entiendas que se presenta de maneras tan diferentes, nadie puedo decirte a quien amar el corazón es el que decide y se debe luchar sanamente por ese amor.- Andrea me sonríe.
- Gracias bruja pensé que me ibas a regañar o enojarte de que me guste tu ahijada.- Le digo sinceramente ese era uno de mis nervios, hablar con ella me calmo.
- No Castañeda, yo no puedo decirles a quien se debe amar o quien no, nadie te puede decir a quién debes amar y quien no, lo que se te voy a decir es que no la lastimes y no te lastimes tu, apesar de todo y de los problemas construyan algo lindo y nada tóxico para ninguno eso solo va a lastimarlos.- Andrea me da una pequeña sonrisa y me doy cuenta de que hablar con ella fue una buena idea.
- Gracias no sabes cuánto me ayudado.- Le sonrió y es la verdad hablar con ella solo me hizo darme cuenta lo importante que es Leilani en mi vida y admirarla más.
- No va hacer fácil enfrentarse a los miedos de los dos, deben luchar por lo que siente, que sus miedos y temores no les gane, encontrar la manera de que funcione para los dos, juntos superen los miedos y las diferencias que los separan.- Andrea está en su modo coordinadora del liceo y madrina de Leilani.
- Andrea te prometo que voy a dar lo mejor de mi para ganarme el corazón de tu ahijada y hacerla feliz.- Ella sonríe.
- Conociéndote estoy segura de ello Castañeda, solo te voy a decir una última cosa, se su cómplice, ese apoyo que ella sienta que va estar para ella, no la presiones, darle su espacio, estar ahi cuando te necesite y que sienta lo que sientes por ella.- El timbre del liceo suena dando comienzo de las clases.
- Andrea sabes que sigues siendo el amor de mi vida aunque tú y yo nunca tuvimos nada puede que lo tenga con tu sobrina-ahijda.- Le digo con mi sonrisa encantadora y agarrando mi bolso para irme, Andrea me mira y voltea los ojos.
- De todas las muchachas de este planeta y justamente mi sobrina y mi ahijada Castañeda, anda ya vete a clases y eres insoportable solo le pido a Dios que Leilani se feliz.- Me dice negando con la cabeza pero se que se divierte, Andrea siempre me regaña pero se ríe de mis bromas y juegos.
- Bueno ya que no pude con la tía voy a ver qué me pasa con la sobrina y también ahijada.- Me río, Andrea se coloca sería pero su sonrisa no la deja.
- Anda ya vete a clases o sino te voy a colocar un castigo.- Me levanto de la silla pero me acerco un poco más a su escritorio.
- Andrea quieres que te llame tía o madrina.- Vuelve a voltear los ojos.
- No cantes victoria solo te di un consejo pero falta a ver qué opina Leilani y sus padres.- Andrea levanta una ceja y su tono de profesora.
- Vamos a ver qué pasa.- Agarró mi bolso pero miro Andrea.
- Gracias por todo bruja enserio me ayudaste a entender muchas cosas y a verlas de manera diferente. Me da una pequeña sonrisa.
- De nada, si necesitas algo no dudes en llamarme, solo quiero lo mejor para ella, en el fondo y un poco para ti también Castañeda.- Sonrió un poco.
- Sabes que te tengo un poco de cariño bruja aunque me regañas y me castigues.- Me volteo para irme.
- Yo también te tengo un poco de cariño, aunque me llames bruja a cada rato, no espero el momento de que te gradues, ya no me traigas problemas y tus juegos.- Me volteo y la miro encima del hombro con una pequeña sonrisa divertido.
- Si todo sale bien me vas a ver fuera del liceo y me convierto en parte de tu familia, querida bruja no te vas escapar y olvidar de mí tan fácilmente.- Andrea niega con la cabeza.
- Sabes que olvida todo lo que dije olvídate de mí ahijada, no te quiero cerca de ella y está conversación no existió.- Niega con la cabeza.
- Lo siento ya hablaste y recuerdo cada palabra que me dijiste futura tia- madrina bruja.- Le digo con una sonrisa diabólica.
- Ya vete Castañeda antes de que te castigue y me arrepienta de todo lo que te dije.- Yo me encojo de hombros.
- Te voy a extrañar madrina bruja y espero que tu también.- Salgo de la coordinación dejando Andrea negando con la cabeza y riéndose.
Andrea me ayudó mucho, me di cuenta que hay cosas que no le estaba prestando atención, no tome muy en cuenta la discapacidad auditiva de Leilani y lo significa para ella, yo no la veo que eso la defina veo más allá de eso, se que ahora tengo que ganarme su confianza pero ahora tengo que hacer las cosas bien, quiero algo más con ella y debo luchar por ello.