Capítulo 21

Una decisión

Leilani
Suelto el aire que tengo en mis pulmones, paso las manos por mi cara, veo mis cuadernos las tareas que tengo que entregar y no he terminado ninguna me pasó de una materia a otra, desde que Elizabeth ayer me dio esa carta no sé qué hacer, pensé borrarlo de mi vida y estaba funcionando bueno realmente no, solo creía que con el tiempo todo lo que sentía por el se iba acabar pero no fue así cada día sentía algo en mi pecho, porque no me puede gustar alguien de mi clases, alguien que sea sordo igual que yo o que sé yo, porque me tuve que enamorar perdidamente de Spencer Castañeda, tenía que ser el de todos los muchachos de este pueblo el, se que estoy siendo inmadura pero hay cosas que sobrepasan a mi misma, Spencer es dos años mayor que yo, lo que significa que muy pronto se va a graduar ir a la universidad, el es de mundo y yo en cambio no.
He visto como las personas me apartan a un lado, me ignoran y como no se saben comportar a mi alrededor, por eso no me gusta salir y convivir con los demás, se que suena ridículo el psicólogo me dice que no le de importación pero no puedo veo las mirada de lástima, de compasión, las risitas y como hablan entre sí, soy sorda pero no ciega por los menos que tenga la mínima prudencia de no hacerlo delante de mí, hasta mi propia familia lo hace en navidad lo comprobé otra vez como me daba esa mirada y esa sonrisa de lástima odio eso lo odio y no saben cuánto, se que soy sorda y debo vivir así pero yo no pedí nacer así y mis padres tampoco lo pidieron, tengo una discapacidad auditiva pero eso no me hace menos persona, no tiene que tener lastima por mi porque tienen que tenerla, si no fuera por Elizabeth, Regina, Liam, mis padres y mi madrina me fuera encerrado en mi cuarto pero ellos no querían que hiciera eso en navidad y al igual que me psicologo dicen que tengo salir más y ser más independiente.
Cierro los cuadernos que tengo enfrente de mala manera y los coloco todos a un lado, Spencer se ganó mucho dentro de mi, fue de las pocas personas que no sentí esa mirada que tanto odio, el me vio de una manera diferente y me sonrió de una manera sincera lo pude notar y sentir, se tomó el tiempo de escribirne esas cartas que tanto me gusta y hacerme reír, me las he leído tanto que puedo saber cuál es cada una aunque querría evitar ese sentimiento no podía y leer sus cartas me ayudaba a la presión que sentía en mi pecho.
- Tu sonrisa ilumina todo a tu paso, en serio tienes una bonita sonrisa y no lo digo por decirlo odio eso odio que las personas digan cosas que no siente solo por ganar algo de ti, con el tiempo me dado cuenta de eso, a veces las personas hacen cosas para obtener un beneficio tuyo y conseguir algo eso no me gusta hacerlo a propósito es como usarlas, engañarla y eso no está bien, que tú sonrisa sea la que ilumine este mundo oscuro al menos para mí.- Me escribió en una de sus cartas sonrió al recordarlo.
Se le daba tan bien las palabras que no parecían forzadas y no parecían vacías si no que en verdad lo sentía o al menos lo siento así, ese es uno de mis miedos el se le da tan bien las palabras y como decirlas el me lo dijo en sus cartas yo no lo inventé, me acuerdo de cada palabra que escribió en su carta con su letra horrible.
- Las palabras son buenas y usando el tono adecuado mejor, con el tiempo me dado cuenta de eso, puedes hablar y hablar si ningún sentido pero si usas el tono adecuado, puedes obtener la atención que quieras, me dado cuenta de eso usas el tono adecuado y con las palabras adecuadas ganas muchísimo, puedes estar diciendo la mentira más grande del planeta pero si tú voz no refleja esas dudas y es sería créeme puedes hacer que muchos crean en ti aunque sean una mentira obvia.
El no podrá hacer eso conmigo nunca escuchare su voz, el no podrá utilizar eso que el dice es una gran herramienta, el algún día se puede dar cuenta de que esto, es serio a lo mejor no está tomando en cuenta toda mi discapacidad, por eso me aleje de el porque no quiero lastimarlo y no quiero lastimarme a mi, siento las lágrimas en mis ojos y respiró hondo, cierro los ojos por unos minutos y cuando siento que estoy totalmente calmada, buscó entre mis cuadernos hasta encontrarla, esta es la única calma que tengo desde que Elizabeth, me la dio ayer ya he pérdido la cuenta de cuentas veces la he leído, ver esa letra horrible y esa hoja de cuaderno hace una sonrisa en mi cara.
Para una señorita que me está alejando de su vida, espero que sonría con esa hermosa sonrisa que tienes y que ilumine todo a tu paso.- Abro la hoja completamente para leer sus palabras.
Muchas veces me pregunte, que era el amor?, Que sentía estar enamorado? Y encontrar esa persona?, Ningún libro o película te prepara para eso cuando lo empezamos a sentir, con ellos nuestros miedos e inseguridades aumenta, inevitablemente pensamos en el final y que terminaremos con el corazón roto, puede que si como puede que no, pero si dejamos que nuestros miedos ganen nunca lo viviremos, como todo en la vida se corre un riesgo, en esta vida todo es probable pero de que sirve tener unos sentimientos y un corazón si no lo usamos y no sentimos nada, la diferencia de estar vivo a estar muero es el sentir, que el corazón late y respiramos, podremos estar muerto aún estando vivo, en el amor hay riesgo pero creo que como en la vida vale la pena correr ese riesgo si sentimos y vivimos eso, no importa lo que pasara mañana, si hoy lo sentimos y lo vivimos, podremos tener una historia y un amor maravilloso pero nunca lo sabemos si no vences tus miedos, recuerda que aquí estoy yo también con miedo pero mi amor por usted es más grande, ambos podremos ayudarnos a superar nuestros miedos, la decisión está en ti y solo en ti, porque que yo tengo claro lo que siento y quiero pero es de dos no de uno solo, el amor es de dos no de uno, te quiero y te mando un abrazo.
Tu caballero que quiere que seas su señorita.
No importa cuántas veces la lea siempre acelera mi corazón, sonrió como una tonta a cada palabra que leo, respiró hondo en mis manos está el poder decir todo, ese esa sensación de saber que puedes hacer las cosas bien o no, tengo la decisión final de empezar algo hermoso o no, yo tengo esa decisión y se que tengo que tomar una, solo dos sílabas si o no y cinco letras pero que detrás de ella se esconde tantas cosas, tantos sentimientos y tantos nervios, he querido mandarle un mensaje pero no puedo, apesar que tengo su número de teléfono no puedo, nunca hemos hablado por mensajes todo era por las cartas, tantas cartas que despertaron mis sentimientos y me he enamoraron.
- A veces me da miedo un poco el futuro la verdad, pero se que es parte de la vida, cuando mi madre me abondono era un niño no entendía nada pero con el paso del tiempo me dejó de importar si mi madre me dejó era su problema no el mío, ningún niño tiene la culpa de que sus padres lo dejen que culpa tendrá son solo niños inocentes, yo a ella no le importo si fuera así me fuera buscado estos años son doce años, no lo a hecho eso habla por ella, no le guardo rencor ni la odio que ganó con eso nada y me hago daño a mi mismo, nunca he sentido que me haga falta la verdad, mi papá y mi abuela son los que me criaron, están ahí para mí y eso es lo que cuenta, la persona que se gano que yo le diga que es la dueña de mi corazón y la que significa lo que es una madre es mi abuela ella lo es para mí, por eso le digo que es la dueña de mi corazón porque lo es, no dejo a este niño fue la me a criado al igual mi mi papá, ellos son las dos personas más importante en mi vida y sin ellos estaría perdido.- Cierro los ojos recordando sus palabras en mi mente.
- Me da miedo muchas cosas señorita pero es parte de la vida todos sentimos miedos, no tenemos que dejar que el miedo nos ganen, yo no sé lo que después quiera hacer con mi vida la verdad, pero se que pase lo que pase voy a luchar para ser feliz todos lo merecemos y es lo queremos a la final.- Mi sonrisa crece cuando recuerdo su letra en mi mente.
- Las personas tienen la manía de meterse en el vida ajena, aunque es interesante no lo voy a negar, Leonel y Elizabeth juntos, ya novios formales, se abrían tardando si me lo preguntas, hoy tengo demasiado tarea en serio me voy a volver loco, el juego de béisbol va bien aunque el mejor jugador es el número 15 ese soy yo, no ya hablando en serio todo está bien, quiero que vayas a mi juego el sábado para que me veas jugar, ya esta convencido Leonel y Elizabeth también van los mocosos aunque no le guste que los llamé así, que tiene de malo, me preguntó yo, quiero que vayas y quien sabe a lo mejor te dedico una carrera, como la última vez, eso es manipulación pero no me importa, solo quiero verte sonreír y ver esos ojos grises que tienes, ya quisiera yo tener esos ojos, aunque mis ojos no están mal combinan con mi cabello despeinado eso es lo que me dice mi abuela, creo te voy aburrir, no espero un no por respuesta señorita de ojos grises y sonrisa hermosa.
Cada carta nunca me aburrió al contrario, amo la forma en que puede hacer bromas y juegos en ella, lo extraño no se cuanto a pasado de que no lo veo pero lo extraño, extraño esa mirada, sus ojos miel, su piel blanca como un papel, su cabello rubio ondulado que siempre está despeinado, como su cabello se mueve de un lado a otro y los mechones caen por su cara, extraña esa sonrisa que tiene, sus labios tantas veces me encontré deseando que me besara pero me daba como pena y prefería desviar la mira, extraña en la forma que me miraba, sus ojos encontraban a los míos y podías pasarnos viéndonos el uno al otro con unas sonrisas y no cansarnos, extraño como me sentía a su lado, sentía que los cachetes me quemaban y como sentía que me colocaba roja, lo extraño tanto y en qué momento paso no tengo idea, creo de eso se trata de que no te des cuenta hasta qué punto te importa esa persona, cómo pasa de verla como un simple conocido a alguien que amas, no hay un momento en que te des cuenta que todo está cambiando solo pasa y cuando te das cuentas de que te enamoras ya ese tarde porque tus sentimientos ya están fuertemente.
Solo hay una decisión que tomar mis miedos van hacer más grande que mi amor por el, a mí caballero que me convirtió en su señorita y creó este amor, solo está en una desición y esa decisión está en mi.