Capítulo 24

Futuro cuñado

- Venga para acá mocosos.- Les grito a los niños para que venga en dónde estamos sentados.
A la final si le dieron permiso a Liam para que viniera, la práctica de béisbol estuvo bien, ahora vienen personas de diferentes edades para jugar un rato, hay niños que son de sus edades o contemporáneos a las edades de los mocosos.
- Que quieres Spencer?.- Me dice mi futuro cuñado.
- Las gorras acomodarlas para que el sol no los queme y jueguen en dónde los veamos.- Les digo viendolos a los dos.
- Ya nos lo han dicho.- Me dice Aldo arreglándose la gorra.
- Igual en dónde los veamos mocosos.- Les digo serio.
- Ya podremos jugar.- Me dice el mocosito.
- Si ande en dónde los veamos.- Les digo para que ambos salgan corriendo.
Yo los miro jugando con otros niños, está salida es muy importante y quiero que todo salga bien.
- Quédate quieto, lo estamos bien y además pareces un hermano mayor protector.- Me dice Leonel sentado a mi lado.
- Es muy importante que todo salga bien.- Le digo viéndolos.
- Vamos mano todo está bien y se ve que te quieres ganar al cuñado.- Yo me río.
- La verdad si, me cae bien las pocas veces que he hablado con el me caído bien, a tenido que lidiar con la discapacidad de su hermana, se ve que la quiere y me he dado cuenta que para estar con ella me tengo que ganarme y que me acepten su familia.- Desde que hable con Andrea le estado dando vueltas a todo y me he dado cuenta que yo no tomaba en cuenta muchas cosas.
- Te los vas ganar ya lo verás solo es cuestión de tiempo, de paciencia y de amor si tienes eso lo vas a tener todo.- Me dice para darme ánimos.
- Sabes si Leilani fuera como las otras ya fuera mi novia.- Es algo que he estado pensando.
- Que quieras decir?.- El me mira interesado.
- Fácil que nos escaparnos para vernos a escondidas, nos viéramos, saliéramos, ya hasta nos fuéramos besado y fuéramos novios, ella no sale sola, sale con alguien de su familia y eso quiere decir que si la quiero ver tiene que ser con alguien, por eso es tan importante que su familia me acepte porque todo puede cambiar y no me dejen verla.- Ahora soy más conciente de su discapacidad y lo que significa.
- Te arrepientes?.- Me mira serio.
- No, por ella siento cosas que no he sentido por nadie más y no me importa esperar un poco más.- Es la verdad ya espere bastante tiempo para conocerla y ya que casi estoy de que sea mi novia como para perder todo eso.
- Paciencia y tiempo ya lo verás si es para ti se dará y si no todavía no es su tiempo.
- Tu cómo estás?.- Le pregunto últimamente hablamos puro de mi.
- Bien las cosas con Elizabeth van bien, aunque peleamos a veces pero después nos reconciliamos van las cosas muy bien entre ella y yo.- Me dice con una sonrisa.
- Estás realmente enamorado y tus padres como están?.- Este es un tema delicado para el, sobre todo su papá.
- Mi mamá ya sabes en el trabajo, en la casa y sus hijos, mi papá no sé nada de él sabes que el aparece cuando quiere, ni siquiera se acordó del cumpleaños de Aldo así aparecerá cuando quiera.- Yo lo miro.
La mamá de Leonel tiene un marido con quién tiene una hija de tres años, por lo que me dice su padrastro los trata bien, está pendiente de ellos y parece que los quiere un poco, su padrastro tiene otros tres hijos mayores que Leonel, los visitan y conviven con ellos, el papá de Leonel no le presta mucha atención ni a él ni Aldo desde que se volvió a casar y ahora menos solo aparece por temporada.
- Eres un gran hijo, el se pierde de esos momentos, tu eres un gran hermano siempre estás pendiente de Aldo y ayudas a tu mamá.- Le digo Leonel ayuda a su mamá a cuidar a sus hermanos y tuvo qué asumir cosas que tal vez no eran su responsabilidad por eso me la llevo bien con el, es muy maduro para su edad y nunca se queja.
- Si la puedo ayudar lo haré, además Aldo quiere ir a todos lados conmigo y no tengo opción.- Yo me río porque se que es mentira.
- Si eres mentiroso, a mi me gustaría a ver tenido un hermano, tengo a mis primos pero son mayores que yo, así que me crié en ese lado solo, conocí lo que era un amor de hermano por ti y Aldo, con Elizabeth y Regina y ahora Leilani y Liam.- Le digo con una sonrisa.
- Hey sabes que eres como mi hermano y Aldo también te ve así, estoy seguro que te vas a ganar tanto a tu futuro cuñado que vas hacer el hermano mayor que el siempre quiso.- Yo me río.
Es hora de irnos, empiezo a caminar con Liam que come su helado lo que le queda, Aldo y Leonel se tuvieron que ir para su casa porque su mamá los llamo y Aldo está cansado de tanto correr, yo les dije que se fueran y yo lleva al mocosito solo para su casa, lo veo como arrastra los pies mientras se come lo que le queda de helado.
- Estás cansado.- Le digo viendo cómo camina como si le pesará hasta el alma.
- La verdad si corrí demasiado, solo quiero llegar a mi casa y lanzar todo para dormirme.- Me dice yo me río.
- Mocosito si yo llevo tu bolso.- Le digo señalando los bolsos que estoy cargando.
- Pero estoy cansado.
- Sigue corriendo por todo el lugar nada más pararon cuando les dijimos que vieran a comer y solo estuvieron quietos durante quince minutos y se fueron a correr de nuevo.- Corrieron y jugaron demasiado.
- Si pero me divertí creo que nunca había corrido tanto como hoy.- Me dice parándose.
- Me alegro cómo estás cansado no te voy a invitar la próxima vez.- Le digo con una sonrisa el abre los ojos.
- No Spencer no estoy cansado.- Me dice con una sonrisa, su cara me da risa toda llena de tierra, de suciedad y de sudor.
- Está bien, aunque yo soy mejor que tú jugando al béisbol.- Le digo con una sonrisa.
- No, a mi se me da bien el béisbol y también el fútbol.- Me dice volviendo arrastrar los pies.
- Lo de el fútbol te lo doy pero lo de béisbol no.- Le digo volviendo a caminar.
Así llegamos a su cara en un discusión de quién era mejor jugando béisbol, abre la puerta un señor y este es mi futuro suegro señores y señoras.
- Hola papá.- Le dice el mocosito que está todo cansado.
- Hola hijo, no te voy a preguntar cómo te fue porque tu cara y toda tu ropa me está dando la respuesta parece que te divertiste.- Le dice con una sonrisa mientras ve a si hijo de arriba a bajo.
- Si Spencer me enseñó como se batea y como lanzar la pelota.- Yo sonrío porque menciono.
- Me alegro, tú debes ser Spencer?.- Me dice mi futuro suegro viéndome.
- Si un gusto.- Le digo dandole la mano.
- Enrique.- Me dice apretando su mano para luego soltarla.
- Bueno vamos para que tomen algo.- Nos dice haciéndose a un lado.
Entramos en la cocina y nos da un vaso de jugo de limón, empiezo a tomar el jugo que me cae de maravilla, entra Corina a la cocina, cuando mira a su hijo y se lleva una mano a la boca.
- Santísimo, tú eras la pelota?.- Le dice viendo toda la ropa llena de tierra.
- No mamá.- Le responde el mocosito recostando en la pared.
- Se ve que te divertiste y que jugaste bastante.- Me imagino que debe estar pensando en toda la suciedad que tiene la ropa.
- Hola Spencer, como se portó?.- Me dice la señora Corina con una sonrisa.
- Hola, se portó bien, el y Aldo se la pasaron bien, deben estar muy cansado corriendo todo el día y nos divertimos.- Le digo con una sonrisa y es la verdad me divertí con ellos.
- Me alegro de saberlo y que no te dió muchos problemas.- Me dice viendo a su hijo.
- Spencer es familia de?.- Me pregunta el señor Enrique.
- Familia Castañeda, hijo de Saúl y el nieto más pequeño de Aurora.- Le digo con una sonrisa y se que debe conocer a alguien de mi familia vivimos en un pueblo pequeño en dónde todos se conocen.
- Claro Castañeda conozco a algunos de tu familia, es más creo que estudie con algunas de tus tías, pero pensé que el hijo de Saúl era más pequeño.- Me dice viéndome.
- Ya ves creció ya no es tan pequeño.- Le dice Corina con una risa.
- Tu prácticas béisbol Spencer?.- Me dice el señor Enrique, interesando seguro de con quién estuvo su hijo.
- Si lo practico desde que era un niño y mi papá me llevaba a las prácticas.- Le digo recordando cómo me llevaba a cada práctica.
- Me alegro, bueno fue un gusto conocerte Spencer.- Me dice antes de salir de la cocina.
- Liam anda a bañarte que te estás quedando dormido en la pared.- Corina le dice a su hijo que despeja de la pared.
- Dale las gracias a Spencer.- Le dice Corina cuando empieza a caminar se devuelve.
- Gracias Spencer me divertí mucho.- Me dice dándome la mano.
- De nada mocosito yo también me divertí.- Le digo soltan su mano.
El sale de la cocina, arrastrando los pies, le doy el vaso a la señora Corina para irme.
- Está muy cansado el y Aldo están igual, señora Corina dónde le colocó el bolso para irme.- Le digo dandole el bolso.
- Colócalo en el comedor mientras yo busco las llaves para abrirte la puerta.- Me dice.
Yo salgo de la cocina y colocó el bolso en una de las sillas, me asomo por la ventana y veo a mi señorita, jugando con el perro con una sonrisa está en el jardín, se ve tan hermosa y yo sonrío.,
- Spencer vamos.- Me volteo un poco asustado veo a Corina que me mira dándose cuenta de lo que yo estaba viendo.
- Está bien.- Le respondo un poco nervioso.
Caminamos en silencio, yo sé que ella se dió cuenta de lo que yo estaba viendo, llegamos a la puerta en silencio y ella me mira.
- Te gusta mi hija.- Me dice más que una afirmación que pregunta.
- No se lo voy a negar si me gusta su hija.- No gano nada con ocultarlo.
- Algo me había comentado Andrea, Elizabeth y Leilani, Spencer se la hija que tengo pero quiero que entiendas que ella tiene una discapacidad que tiene que vivir con ella el resto de su vida y tu eres un muchacho que tiene la vida por delante para cagar con eso que tal vez no entiendas y no tienes porque cargar con eso.- Me doy cuenta del dolor con que dice esas palabras.
- Lo se pero yo no solo veo una discapacidad veo mucho más que ella, veo a una muchacha que es feliz, que le sonríe a la vida, que no se queja, un poco miedosa, tímida, con un gran corazón y muchas cosas más.- Le digo es la verdad, ya que vamos a tener está conversación prefiero ser sincero.
- Estoy de acuerdo con los que dices de mi hija solo quiero que entiendas que tiene una discapacidad de por vida y lo que significa estar con ella, pero yo no soy quien para decirles si pueden o no estar juntos, yo me hice novia de mi marido a los catorce años, solo te voy a decir algo si necesitas ayuda en algo no dudes en venir a preguntar o quieres saber algo, veremos qué pasa Spencer.- Me dice con una sonrisa.
- Gracias señora Corina, todavía no somos novios ni nada solo la quiero conocerla y ver qué pasa.
- Ya sabes si necesitas algo no dudes en venir y vamos a ver qué pasa, conozco a tu familia se que tienen sus valores y se en donde vives y de dónde vienes.- Me dice con un tono serio.
- Gracias señora Corina y ya me voy.- Le digo con una sonrisa.
Salgo de la casa y se que estoy en el camino correcto, estoy dejando claro mis intenciones y eso me está ayudando a que me acepten y lograr algo más con mi señorita.