Capítulo 1

Año 2060…

La devastación del mundo era inevitable, se nos advirtió muchas veces que era lo que pasaría si no cambiábamos nuestros hábitos, no tomamos muy enserió lo que esas personas nos dijeron y ahora estamos viendo las consecuencias de todos nuestros actos, las consecuencias de como por años explotamos la Tierra y sus recursos. Muchos dicen que el fin es inevitable pero el instinto de supervivencia es más grande, lo cual hace que tratemos de evitar nuestra extinción, pero ese mismo instinto nos trae problemas.

Las personas se matan por el agua, por comida o por simplemente tener un techo donde refugiarse cada vez que hay grandes tormentas o desastres, nuestra población ha disminuido tan drásticamente que con las pocas personas que quedan se podría tratar de crear un nuevo estilo de vida donde no saturemos nuestros recursos, pero todos están intentando sobrevivir excepto yo que quiero vivir.

– Señora creo que ya es momento – hablo Marcos quien es mi mano derecha y mi más fiel compañero, todo lo que sucede en mi vida se lo confió solamente a él incluso mi plan.

– ¿Cuántos quedan? – pregunte sin dejar de ver por el vidrio del edificio de mi compañía, la que en su momento valía millones, pero ahora no vale ni un centavo como todas las compañías del mundo.

– 3 mil millones según el último informe – hablo colocándose al lado mío – si no actúa ahora los que quedan morirán

– 3 mil millones aun es mucho – hable – pero con eso basta – lo mire por primera vez desde que entro en mi oficina – ya sabes lo que tienes que hacer

– Si señora – hablo para luego irse.

Mis métodos para subsistir no eran simples, pero es algo que se debe hacer si no todos moriremos, en estos momentos los sacrificios de algunos pocos sirven para que sobrevivan muchos más.

Tal vez muchos me juzgaran por lo que estoy a punto de hacer, pero ya no quedan opciones, es esto o la extinción de nuestra raza para siempre. Todo está listo para los sobrevivientes quienes se tendrán que adaptar a su nuevo estilo de vida. Me lo agradecerán más adelante cuando todos vivan felices y sin preocuparse de la extinción de sus vidas.