Capitulo 14

Enid salió molesta del cuarto.

Isabella se limpió las lágrimas y camino hacia la ventana.

- extrañaba ver el sol, las flores, aunque ahora todo es diferente, la casa, ¿que es eso rojo y extraño?.

Me acerqué a ella y pude ver el auto deportivo de Idara saliendo por el caminito.

- ese es un auto lo que sustituyó los carruajes - Isabella frunció el ceño.

- no vi a los caballos - sonreí y caminé hacia mi mesa de noche donde tenía libros que sabía pondrían al día a Isabella con la tecnología. 

- toma, lee esto y si alguien entra escondete no hables con nadie, no quiero que crean que están viendo un fantasma.

Ella asintió y tomó los libros,se sentó en el sillón frente a la ventana, su pesado vestido sonaba cuando se movía. 

- ¿donde vas? - me dirigió una mirada cargada de curiosidad.

- voy al cementerio - ella abrió los ojos como platos.

- ¿que irás a hacer?- se quitó el extraño sombrerito que andaba.

- quiero investigar un poco, luego te cuento.

Me acerqué al ventilador y se lo encendí no se si su temperatura era igual a la mía pero por si acaso era mejor encenderlo,en teoría ella jamás murió fue encerrada en el espejo.

Salí del cuarto sumida en mis pensamientos toda esta historia era extraña,si Isabella volvió 6 veces antes porque nunca pudo salir del espejo como ahora y lo mas extraño, ¿porque hasta ahora podía empezar a recordar detalles de su vida?.

Aldreda se había encargado en hacerle pagar caro a Isabella pero sentía que su maldición no iba a terminar tan fácil, la aparición de Roberto para mi era un obstáculo y sospechaba que Aldreda tenía algo que ver.

No conocía de magia ni nada, así que no sabia el alcanze de lo que Aldreda había hecho.

Tomé prestado el auto de mi madre y conduje por el pueblo según las indicaciones de mi padre.

El cementerio estaba en las afueras y era bastante pintoresco.

Me bajé y entre al cementerio pude notar que habían muchas tumbas de 500 años atrás, caminé despacio e iba leyendo las incripciones.

Caminé como media hora sin dar con lo que estaba buscando, me acerqué a unos árboles y pude notar que detrás de ellos habían más lápidas, los rodee y me encontré con un hombre agachado, quitando la maleza de 3 tumbas.

Me pareció conocido.

- Buenas tardes - murmuré.

El se giró y me miró sorprendido.

- Señorita Isabelle - se levantó y se sacudió las manos en su pantalón.

- Nicholas, ¿que haces aquí?- desvie la mirada y pude leer el nombre de Blazh.

- cuando tengo tiempo vengo a limpiarlas - se movió y pude darme cuenta que había dado con las tumbas que buscaba.

Me senté en la grama donde Nicholas ya había limpiado, me sentía agotada por el calor y ellas estaban debajo de árboles frondosos.

- y usted que hace sola en este cementerio? - el se agachó y las siguió limpiando.

- me gusta la historia y decidí conocer el cementerio.

El me miró un momento y volvió a limpiarlas.

- este cementerio ya no se usa,se podría decir que es el cementerio viejo aquí descansan todos los antepasados de este pueblo.

Asentí.

- ¿como murieron? - le señalé con mi dedo las tumbas que el estaba limpiando.

El se quedó callado meditando.

- fueron ahorcados - bajó la cabeza - las dos familias se llenaron de odio por sus hijos, pero los padres de Issa estaban desesperados buscando los medios para sacarla del espejo pero no pudieron hacerlo así que comenzó la persecución a Aldreda y su esposo, los catalogaron como hijos del diablo.

Me mordí los labios

- si nadie pudo hacer nada por Issa es porque su magia era poderosa, magia negra, Aldreda no era bruja blanca o como les llamen.

Nicholas se puso de pie

- en esa época lo que no comprendían lo juzgaban - hice una mueca al escuchar las mismas palabras que Enid me dijo.

- ¿será que en esa tumba este Aldreda?- Nicholas se sorprendió.

- ¿ a que se refiere? - su mirada era indecifrable 

- me sorprende que una mujer poderosa donde nadie pudo deshacer su hechizo por la magnitud de su poder, la hallan ahorcado fácilmente.

Nicholas tenía cara de pocker y estaba muy segura que en esta historia ocultaban algo.