El claustro de Isa.

Capitulo 27

Me separé de Andrew al escuchar que venían corriendo por las escaleras, me sorprendí al ver a Idara bajar de prisa.

- ¿nunca entenderás? - extendió la cadena del talismán, lo tomé y me lo puse en el cuello,su rostro estaba lleno de furia.

- sólo fue un momento, no entiendo porque haces tanto escándalo. 

- ¿hablaron algo importante?- Andrew frunció el ceño.

- creo que no tenemos porque comentarte lo que hablamos - ella negó.

- contestame Isabelle, ¿él ya sabe?

Miré a mi gemela y luego a Andrew.

- es importante - Idara estaba ansiosa.

- èl lo sabe - ella cerró los ojos.

- ¿le acabas de decir?- negué con la cabeza - dime que no hablaron de lo que hemos hecho.

Miré a Andrew con disculpa porque algo me decía que no debía ocultarle la verdad a Idara.

- lo siento - susurré - Andrew descubrió... - no terminé de hablar porque las puertas y ventanas de la casa se cerraron solas, mi corazón tembló, Andrew me abrazó fuerte e Idara sólo estaba atenta viendo hacia todos lados.

- sea lo que sea que hablaron, ella ya lo sabe - ambos miramos a Idara.

- ¿de qué hablas?

Idara por primera vez me miró con tristeza y podría decir que con amor.

Pero no pudo decirme nada porque Enid empezó a bajar las escaleras acompañada de Nicolas y otros hombres que yo no conocía.

- deben acompañarme.

- no iremos a ningún lado bruja maldita - Idara le gritó las palabras con furia.

- llevenlas al pasadiso, a la mazmorra que hay ahí - los hombres nos tenían sujetas, miré a Andrew que estaba paralizado.

- ¿que le has hecho?

Ella solo sonrió.

Solté un gritó al ver que otros hombres traían el espejo e Isabella venía bajando las gradas.

- nos has servido muy bien Isabelle - negué no entendía a lo que se refería - me imagino no le has dicho - sus ojos se pusieron totalmente negros aún hasta la esclerótica (parte blanca del ojo).

- ¡cállate bruja!

Ella sonrió.

- la has odiado toda la vida y ¿ahora la defiendes?

- nunca la he odiado, déjala ir - Idara dejó de luchar.

- no te dejaré hermana - le susurré.

Enid me miró y soltó una carcajada.

- así que no sabes nada, vaya quién iba a decir que esta maldita te iba a proteger.

- Enid,¿por qué nos haces esto?,pensé eras mi amiga - ella miró a Isabella con desprecio.

- nunca he sido tú amiga, mi familia a vivido también parte de la maldición por tú culpa, estúpida malcriada, Andrew ha sufrido por épocas.

Idara bajó la cabeza la miré mover los labios, decidí distraer a Enid para que no se percatara de lo que hacía mi hermana.

- ¿por qué dijiste que les he servido muy bien?

La miré a ella y a Nicolas, él me miraba con pesar, muy esposo podría ser de Enid pero para mi él era diferente.

- cállate Enid - miré a Idara y frunci el ceño no entendía que era lo que evitaba que me dijera.

- llevenlas a la mazmorra -miró a Isabella - tú destino es vivir encerrada querida.

Isabella dejo salir las lágrimas, era demasiado para ella.

- estuvieron tan cerca de lograrlo, pero pérdidas al mismo tiempo - hizo una seña y los hombres nos llevaron arrastras.

- cuando mis padres sepan lo que has hecho, serán más crueles contigo de lo que fueron los padres de Isabella con la cobarde de Aldreda - me ardió la mejilla al sentir la bofetada de Enid.

- ella no es ninguna cobarde, muy pronto estarán frente a frente con ella y espero las exterminé a las tres de una vez por todas.

Mientras me arrastraban hacia los pasadisos no evite volver a mirar hacia atrás y ver a Andrew congelado, Idara levantó su mano y Andrew se empezó a mover justo cuando la puerta escondida del pasadiso se cerraba, él no pudo ver hacia donde nos habían llevado.

Tenía que haber un modo de salir de ahí, Idara era poderosa lo demostró al liberar a Andrew pero dudaba que pudiera luchar contra Aldreda, quizás Noche nos encontraba y le pediría que me enseñará para unirme a la pelea.



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En el texto hay: fantasia, romance, amor

Editado: 10.07.2018

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