El Club de Hopewell

Capítulo VI: La Buena, El Malo y la Loca

Siguiendo con su meditación recorriendo las calles de Hopewell tras salir de su castigo, aun discutían la posibilidad de entrarle o no al negocio...

—No me digas que de hecho lo estas considerando; es una locura sin sentido —Jake mencionó, al notar en los ojos de su amiga Allyson cierto interés

—Bueno, no perdemos nada con preguntar ¿no? —ella le respondió

—Me sorprende de ti Allye; generalmente espero estas cosas de Sarah, o incluso de mí si ando "volando alto" ¿pero de ti?

—¡OK, perdónenme por mostrar algo de curiosidad!

Jake, por una vez en su vida, se mostró como el ser pensante y racional, al menos para los estándares mostrados con anterioridad por su particular grupo de amigos, y en el fondo, Allyson sabía que él tenía la razón, y la última vez que confiaron en un hippie terminaron a un abogado del reformatorio juvenil.

Desechando esas historias sobre dinero y legendarios traficantes del pasado, al día siguiente, los muchachos siguieron su rutina diaria: asistir a clases, fingir que oían algo diciendo "aja" cuando les preguntaban si habían entendido, y burlarse de aquellos maestros que usaban precarios métodos para ocultar su calvicie.

La hora del receso llegó, pero en lugar de ir sobre la azotea a fumar o aventarle huevos al asilo de al lado, los tres llegaron con excusas para justificar su no presencia en su tradición escolar.

—Saben chicas, me gustaría ir con ustedes—Jake mencionó a sus amigas en el pasillo—pero recordé que debo pagarle algo a alguien…en alguna parte…algo así ¡Ciao!

Jake partió rápidamente, dejando a Allyson y a Sarah con ciertas dudas en sus cabezas por el nerviosismo con el que su amigo salió corriendo.

—No lo había visto salir tan rápido desde que la policía organizó esa redada en el club…—Allyson dijo

—Sí ¿Qué loco verdad? —Sarah respondió riéndose nerviosamente

—¿Pasa algo Sarah?

—¡No! Para nada, pero es que acabo de recordar que… ¡Olvidé alimentar a mis celacantos!

— ¿Cornelius y Constance? Nunca olvidas alimentarlos…

—Sí, bueno, debo hacer un par de llamadas y quizás me tarde en volver así que, como dicen por ahí: "Adios, farewell, Auf Wiedensehen, good bye"

Y Sarah también salió corriendo de ahí con una desesperación sorprendente inclusive en un ser como ella; y citar a "La Novicia Rebelde" levantaría más de una sospecha (o lo haría si no estuviera alguien acostumbrado al peculiar patrón de acción de la amiga de Allyson)

Sabiendo que algo estaba mal, Allyson siguió a sus dos amigos hasta la zona del segundo grado; tanto Jake como Sarah checaban discretamente cada aula buscando a aquel informante.

—¡¿Qué carajos están haciendo ustedes dos? —Allyson les gritó

—Oh…hola Allye—Jake contestó

—¿No me digan que están buscando a ese sujeto? ¿Qué paso con eso de "locura sin sentido"?

—La historia podrá ser una locura Allye, pero esto sin dudas es muy real—Jake respondió mostrando una moneda de oro.

—¿Espera, esa no es la moneda que el tipo nos mos..? ¿Te la robaste?

—¡Sí, sí, ya sé! ¡Oh por "Dios Jake, algún día te meterás en problemas"! —Jake respondió improvisando una muy mala imitación de la voz de Allyson

—¿La probaste con tus ácidos no?

—Sí, y sin importar si lo que haya dicho es mentira, cuento, imaginación o demás: esta cosa es autentica, y si ese greñudo mugroso tiene una, puede tener más…

Jake sabía verificar a través de ácidos la autenticidad de una pieza de oro; años de ver a su ahora ausente abuelo recibir pagos en este medio le dio cierta habilidad en las artes de los barrios bajos.

— ¿Y qué hay de ti Sarah? ¿También saliste a buscar el dinero de un traficante…sin decírmelo?

—No, yo solo quería saber si mis celacantos están bien, y este estúpido móvil no tiene señal en los edificios de primer grado…—Sarah contestó mientras agitaba y golpeaba su celular

—El punto es—Jake tomó la palabra—ahora que todos estamos en esto, "rubia"…

—¿Rubia? —Allyson dijo

— ¡O pelirroja, castaña, china o neptuniana! ¡Este autor flojo no nos dio descripciones físicas! ¡El punto es que ahora estas con nosotros! ¿Verdad?

—Si, ¿por qué no? Si no los entregue cuando me ofrecieron menos condena en el reformatorio, no los entregare ahora

—Es un hecho, pero primero debemos hallar a "Shaggy" en cuestión…

—Lo han estado haciendo mal señores —Allyson les mencionó—, vengan conmigo, yo creo saber donde debe estar…

Allyson guió a Jake y Sarah a través de los pasillos hasta el baño de hombres más alejado del edificio.



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En el texto hay: comedia, juvenil, comedia drama y romance

Editado: 29.08.2018

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