El Corazón De La Manada

Capítulo 4

ANYA

31 de agosto de 2016

Ultimo día clases ultimo día de exámenes recuperatorios, y me fue mal en esta materia la cuestión es que yo y mi memoria es que nos llevamos pésimo aunque para otras cosas nos llevamos muy bien como por ejemplo cosas innecesarias, un asco la verdad, guarde mis cosas rápidamente, quería salir de ahí lo más antes posible tenia sueño y hambre mucha la verdad.

Me dirigí hacia mi edificio, el orfanato al ser también un internado era extenso consta de cuatro edificios donde dormimos chicas de distintas edades y cada cuarto tiene dos camas te ponen con chicas de tu misma edad, la cantidad de cuartos no los se nunca me puse a contarlos solo sé que en cada edificio tiene seis pisos, todas las chicas llegan aquí son muy afortunadas nunca pasamos hambre o sufrimos de alguna carencia.

Otros dos edificios donde se imparten las clases donde existen dos clases de cada grado y un edificio donde viven nuestras cuidadoras, aquí dentro existe una forma de obtener beneficios extras, por cada materia aprobada sin ningún recuperatorio obtienes una cantidad de puntos, por un puntaje muy buenos en las materias otra cantidad de puntos y por otras actividades también.

Todo estos puntos te sirven para canjearlos por comida, esto las ninfas lo hacen para que aprendamos responsabilidad puedes comprar comida y alguna que otra cosa claro que los puntos yo solo lo uso para comprar comida extra o comida chatarra, algo muy bueno de aquí es que en la parte de abajo de cada edificio es un como un comedor donde puedes comprar comida por así decirlo o canjear los puntos que tengas acumulados, cuando las vacaciones llegaban no te quedaba otra de haber ahorrado o hacer trabajos extras para conseguir puntos.

Los puntos no solo los usas para la comida sino también para la ropa la cual puedes comprar aquí varias chicas de los últimos años hacen cursos aparte de los cuales puedes tomar como máximo dos de los tantos que existen, uno de ellos es costura y les pagas con puntos para ellas es como trabajar, los puntos son como nuestra moneda, aunque no está impresa y se lleva la cuenta hasta el final de mes donde se suman los puntos ganados los que tienes acumulados y se restan los que gastaste en el patio de comida y si compraste ropa todo un sistema de eso se encargan las administradoras de cada edificio.

Ni bien llegue Amelia una señora muy amable a la cual ayudaba algunos fines de semana cuando necesitaba puntos me atendió, le pedí una ensalada con pollo picado, papas fritas, budín de chocolate, jugo de frutilla con leche y por último pastel de chocolate, lo sé mucho chocolate pero como resistirse a él es tan dulce y delicioso, Amelia me entrego mi comida empacada ella ya me conocía y sabía que prefería comer en mi cuarto y no en el comedor, gracias a quien sea que este ahí arriba porque la puso en mi camino.

Creo que no les explique algo aquí todas las niñas que llegan tienen un tiempo hasta que las adopten si no lo hacen una cuidadora nos da el suyo en mi caso nadie quiso adoptarme cuando aún tenía la edad para ello y para mi hoy se cumplía el plazo para ello mañana la directora me daría un apellido.

Llegue a mi cuarto compartía con una chica que fue adoptada a inicio de año y por ahora no me habían asignado otra compañera de cuarto, lo prefería así la verdad tener mi espacio era bueno, me sente en la cama vacia desempaque mi comida y al empezar a comer vi todo el cuarto, no era pequeño pero el espacio era suficiente para que entren dos camas con sus mesitas de noche un escritorio grande y un librero mediano.

Lo único malo era que por estar estudiando había dejado todo más desordenado de lo normal mi mesita de noche era un desastre entre envases de comida, algunas peinetas, creo que veo una media por ahí, estoy segura que encima y debajo de mi cama hay más ropa que en mi ropero y posiblemente algunos zapatos igual.

En mi mesa de estudio estaban revueltos todos los libros y cuadernos que había estado revisando en esta semana, en el librero encontré todo desorganizado y papeles revueltos, al ver todo eso no me dieron ganas de hacer un poco de limpieza así que dándole el ultimo bocado a mi ensalada metí todos los envases en una bolsa lo único que no toque fue el jugo, pastel y mi amado budín que comería al terminar de ordenar este desastre.

Deje la bolsa en el pequeño basurero a lado de mi cama, empecé ordenando mi mesita de noche botando todas las envoltura de dulces, helado y como había sospechado si encontré una media en todo el desastre, metí la basura en una bolsa con la promesa de sacarla mañana, tendí mi cama y barrí un poco debajo de mi cama donde sorpresa encontré más envolturas, ropa, zapatos y vi medias que había dado por perdidas realmente tenía que empezar a ser más ordenada, así que me metí un poco para poder alcanzar lo poco que quedaba.

Mientras me recriminaba a mí misma sobre ser más ordenada siento como jalan mi pie y un par de risas se escucharon suerte y claro, eran mis amigas que tenían una copia de mi llave.

— Wow creo que va a llover Anya está ordenando— se ríe Maya.

— Jaja que graciosa ¿no tienes algo que hacer? cómo ¿empacar?— dije parándome y sacudiendo un poco mi polera.

— Nop ya empaqué todo— dijo riendo y sacando una envoltura de mi cabello— tienes que dejar un poco los dulces si sigues así terminaras...

— Ya llego por quien lloraban chiquitas— dijo Vale haciendo una entrada algo teatral— Anya esta ordenando creo que me golpee la cabeza o estoy soñando— dijo viendo hacia Maya y volvieron a reír.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.