Ella es como el mar y él es como la luna
Él es ese cuervo que bate sus alas
Esperando un día poder volar.
Ella es como un suspiro, es como la brisa,
Llevada de un punto a otro sin ser vista
En un eclipse fugaz
Rodeados por la eternidad
y lo que hay más allá,
consumieron sus almas
Se encendieron uno al otro
Él es como todo lo que ella siempre soñó,
como un cuento que ella misma se contó.
Él la espera todas las madrugadas,
Trepado a un árbol en la rama más alta.
Ella viajaba cada noche
Como tres horas en tren
Solo para verlo a él
Y en cada amanecer
Se funden en un nuevo ser.