PARTE III
La suave brisa de un invierno que se hacia presente movia las hojas de los arboles que caen en el suelo humedo, sin señal de que alguien las quitara. Las habitaciones vacias con capas de polvo y telarañas. El silencio se hace presente en todo el lugar, nadie desde hace 24 años ha estado viviendo en la magnifica infraestructura
-Padre, aun no entiendo el porque no quieren volver al castillo- pregunto Charles mientras observaba desde el balcon a lo lejos la gran contruccion
- Hay cosas que preferimos olvidar con tu madre y tu abuelo- respondio Cristhopher sentado en el gran sillon de la biblioteca.
-Tu crees que algun dia, podamos volver a vivir en el como tu, en el pasado- volvio a opinar.
-Eso no lo se pero lo unico que te puedo asegurar es que yo no volvere a poner un pie ahi- manifesto levantandose y colocando el libro que tenia en la mano otra vez en el estante
-si, bueno vamonos, o llegaremos tarde a la opera de Zania- articulo mientras salia con su padre del lugar.
Bajaron al primer piso donde Aanisa estaba caminando desesperadamente de un lado a otro.
-Que pasa querida, que te angustia- pregunto Cristhopher
Ella se detuvo en frente de el tomando sus manos y le expreso- Amina no quiere ir se encerro en su estudio desde la mañana, por favor convensela Cris. Es la primera presentacion importante de Zania, tu lo sabes mejor que nadie-
-Yo lo hago mamá, no te angusties mas- manifesto Charles dirigiendose al estudio de Amina. Ellos solo asintieron mientras veian como es se hiba.
-Así eras tu y no me lo puedes negar- Menciono Cristhopher.
-No, yo era peor, huia de casa, por lo menos ella no lo hace y ademas esta conciente que sus padres la aman y que no la abandonaran, como lo hicieron en mi caso- dijo con la voz quebrada intentando aguantar las lagrimas...
Colocando sus nudillos en la puerta, toco suavemente la madera
-Ami- preguntó
-no- respondio instantaneamente desde el fondo de la habitacion
-Bien, pero luego no te quejes cuando no te presente ante el hijo del conde o... -advirtio Charles entrando a la habitacion- Duncan???...- susurro ante un cuadro con de una persona de tamaño real que estaba en frente de el.
-si, es el- respondio su voz dulce y queda. Charles se acerco al lienzo examinandolo de piez a cabeza era identico, dando la sensacion de tenerlo cerca, presente ahi mismo.
-Pero acaso no es el hijo del humilde carpintero que murio el año pasado-articulo despues de unos segundos- es un muchacho amigable, honrado, leal, servicial, alegre; a pesar de todas sus desgracias, un gran trabajador, hasta podria llegar a ser un gran artista con sus diversos tallados en madera. Son tan impresionantes como tus pinturas -
-si, bueno...- hablo Amina mientras terminaba de retocar una de las esquinas del lienzo
-Creo que ya entendi- menciono Charles antes de que ella dijera algo- No quieres ir porque invite a Duncan y el conde estara ahi. Tu estas....- Amina lo miro amenazadoramente- de Duncan y el conde quiere comprometer a su hijo contigo- sonrio ante sus palabras y suspiro ante el pequeño plan que se le habia ocurrido en un instante- muy bien si no sales del estudio ahora mismo, le dire a papá que no vuelva a traerte las pinturas o lienzos del extranjero y cerrare tu estudio...-
-No lo harias- hablo levantandose de su silla para pararse en frente de el- eres incapaz, te conosco....
-Y por eso sabras que siempre cumplo lo que digo, ¿no?- asevero mientras salia de la habitacion, y Amina lo seguia con la cabeza agachada, habia perdido la discusion.
(...)
Llegada la hora, todos salieron junto con Duncan, quien no puedo despegar la mirada de la bella dama de ojos verde azulados. Hablaron de arte durante todo el camino, despues de todo ellos se dedicaban a eso...
Entraron al teatro y como era de costumbre todos los voltearon a ver, eran una de las familias mas importantes, queridas y famosas de todo Pradales; mas que toda la familia del gobernador. Caminaron de tal forma que el orgullo no era evidente y la humildad se hacia presente. Saludando calidamente a cada uno de los que estaban a su vista con una sorisa dulce. Eso los identificaba entre todas las familias, no era solo su fisico como era comun entre los demas, tambien era su actitud.
(...)
Despues de la opera, esperaron a Zania para retirarse, cuando al fin llego, el Conde los detuvo en la entrada para poder hablar, ya que durante todo ese tiempo no se habien encontrado ni una sola vez.
-Señor Reynolds-
-Conde- Respondio Cristhopher con una reverencia
-como han estado su familia y usted-
-Muy alegres, por el triunfo en la profesion de Zania-
-La señorita Zania es muy talentosa como soprano en la opera, al igual que la señorita Amina con la pintura- expreso el mientras tomaba la mano de Amina y le daba un beso en esta.
-Esta usted en lo cierto- opino Aanisa
-Por cierto, Conde esta usted invitado a la gala que se realizara en dos meses, donde se demostraran varios cuadros de Amina- Propuso Charles
-Si le interesa, claro- mensiono Zania
-Ya veremos- declaro el mientras se dirigia a Cristhopher- Señor Reynolds ya penso mi propuesta-
-Tiempo, conde, el tiempo respondera por mi- fue lo unico que respondio- ahora si me disculpa, se hace tarde y nuestro hogar esta muy lejos para perder el tiempo y nuestro invitado no puedo permitirle eso- fueron sus ultimas palabras antes de retirarse
-Saludos a el Señor Artur Reynolds- expreso- Señor Duncan- articulo deteniendolo mientras lo miraba de pies a cabeza con desprecio y amenazadoramente- Tenga usted una buena noche- respondio el con una reverencia antes de retirarse.
(...)
Al dia siguiente por la tarde Cristhopher llamo a Charles a su Estudio.