El Delirio de los Reynolds

13. una visita

Llego el dia acordado. Charles junto con Mary desde madrugada partieron, el lugar al que se dirigian era a afueras de Pradales en una pequeña casa en la ciudad vecina.

El tiempo se hacía cada vez más corto, sus latidos más potentes y los nervios más presentes, lo único que les consolaba era su compañía y sentimientos mutuos. Miedo y curiosidad imperfectamente combinados para esta ocasión tan irregular y relevante.

De hermosos arboles las calles fueron remplazándolos con casas y estructuras comunes a un lugar tan movido como la ciudad que estaba lejos del pueblo de Pradales. Las personas caminando de un lado a otro como hormigas trabajadoras empeñadas en la simple e importante acción de vivir…

Mas adelante, como si el cielo hubiese oído sus plegarias para que terminase el sufrimiento constante y mutuo de Charles y Mary llegaron, a lo que ahora parecía un hostal muy agradable.

Artur por medio de una de sus cartas hace 5 años había explicado que había expandido la casa y como el lugar era muy transcurrido por personas, decidió convertirlo en un hostal para beneficiar no solo a los demás si no a sí mismo con tener compañía en su soledad.

Entraron y fueron recibidos por una sonrisa radiante de una señora y un señor humildes. Después de unos cálidos saludos a cada uno de los presentes se dirigieron a arriba en donde estaba Artur postrado en cama desde hace una semana atrás que enfermo gravemente de repente sin ninguna explicación alguna.

Tocando levemente y con delicadeza la madera de la puerta de su habitación. Una voz casi inaudible se escuchó, estaban a punto de entrar, pero Charles se detuvo ahí.

-Ve con los señores Fernsby- le ordeno a Mary- acabo de recordar algo y no quiero que el abuelo se altere al verte-

-No entiendo muy bien, pero está bien- afirmo ella un poco confundida, tomando su mano le dijo- no quisiera dejarte solo ahora, pero es tu decisión y no puedo hacer mas que aceptar lo que mi prometido dice- con una sonrisa radiante se alejó de él.

Charles sonriendo como todo un enamorado, volvió a su ahora, entrando a la habitación con una expresión mas seria. El aroma a tierra mojada que emanaba de la ventana, un par de cuadros de Amina, todo limpio y ordenado, varias cartas en un cofre abierto y aquel viejo hombre cansado de tantos años que lleva viviendo, acostado en su lecho, sufriendo lo que tal parecía sus últimos días.

-Querido nieto, Charles, cuanto tiempo a pasado desde la ultima vez que te vi-

-Abuelo, han pasado muchos años si no mal recuerdo- respondió

Artur con su la poca fuerza que le quedaba se acomodo de llegada forma poder hablar mejor con Charles.

-Como has estado, he leído por las cartas de tu padre que ya has terminado tus estudios-

-Así es mi padre te tiene muy bien informado, y por ello pienso que ya sabrás de mi compromiso y que mi padre desea que empiece como patriarca de la familia-

-Ciertamente lo has dicho, pero no veo el inconveniente que te impide hacer lo que tu padre ha pedido-

-Entonces- pronuncio mientras se acomodaba en una de las sillas junto a la cama- primero, tu sigues con vida al igual que mi padre, a mi parecer no creo correcto que me nombren patriarca siendo tan joven e ingenuo en muchos ámbitos. Aparte esta el punto mas grande de esta visita… es que no se nada sobre mi propia familia, ni como obtuvimos esa inmensa estructura que está abandonada, desde el famoso día el cual todos llaman “El día de la gran tragedia de los Reynolds”-

Artur lo miro sin mediar palabra en silencio pensativo, Charles dejo salir aire un poco mas tranquilo

-Además… dime que paso con mi hermano hace 18 años, por favor dime toda la verdad… todo lo que ocultan a los ojos y oídos de los demás-

-Bien empezare por partes… si, tu padre y yo seguimos con vida milagrosamente, pero tu padre dijo que serias patriarca por que yo a tu edad perdí a mi padre de una forma totalmente extraña la cual a mi conciencia nunca podre resolver… tu padre dijo que serás el líder, la cabeza de la familia, pero en realidad es un lapso de tiempo en el cual te entrenara para que lo seas, así fue como yo lo hice con tu padre, Cristopher a tu edad empezó con el entrenamiento…. En fin, entendiendo esto estamos claros en esta parte, tu padre no siempre se explica muy bien-

-si esta mas claro ahora, papá es malo explicando las cosas-

-perfecto ahora la segunda parte, antes de proseguir trae a tu prometida, ya que ella también será parte de la familia dentro de un tiempo ¿no? -

- iré por ella entonces- afirmo mientras salía de la habitación, pero se detuvo en la puerta- no te vayas a paralizar-

Esto causo una total intriga en Artur, que podría será aquello que podría dejarlo sin aliento, su belleza, no es poco creíble, entonces que…




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