Capítulo 7

Robert les había convocado, quería reunirse con algunos clanes del sur para firmar diferentes pactos, el viaje duraría unas cuantas semanas, esperaba poder hablar con Megan a la vuelta.

Aunque no dejaba de pensar en Megan, en si estaría bien, la salida del castillo y el poder estar con sus amigos le estaba ayudando, se sentía más relajado. Se preguntaba si Megan le echaría de menos, porque él echaba mucho de menos a esa mujer, le costaba hablar con ella, apenas la conocía y aun así se le había metido dentro de la piel.

Se habían reunido todos los amigos, hacía tiempo que no estaban todos juntos, él que les había juntado era bastante importante y se necesitaban los unos a los otros. Estaba con sus hermanos

Donovan y Alastair eran sus hermanos de sangre, Robert y Alan eran sus hermanos de armas y de honor, se habían criado juntos, eran una familia, daría lo que fuera por cada uno de ellos.

• ¿Qué tal van las cosas con tu esposa Niall? - le pregunto el rey irónicamente

• Sabes que aún no es mi esposa. Despacio, esa mujer tiene muchas cicatrices.

• Esa mujer tiene demasiadas marcas en un cuerpo tan pequeño. - dijo Al cariñosamente

• Quizás esas son las que menos me preocupan, me preocupan más las del alma. Esa mujer tiene mucho miedo, vive con terror.

• No puedo entender cómo se puede infringir tanto daño a alguien. - intervino Donovan

Al y Donovan todavía no conocían a Megan en persona, le había hablado de ellos, aunque Noah les dijo que era pronto para conocer a otros hombres, ya le estaba costando mucho adaptarse a Niall. Cuando volvieran del viaje se los presentaría.

• ¿Crees que tanto daño le han hecho? A lo mejor es una niña malcriada, de eso yo sé mucho, me mandan a palacio una tras otra esperando que las corteje. - se quejó Robert

• Robert, esa muchacha tiene la espalda llena de latigazos, cuando la vi pude contar por lo menos veinte, y no son recientes, era una niña cuando se lo hicieron. ¿Conoces a algún guerrero que aguantara tantos latigazos? Pues ella los aguantó y sobrevivió a ellos.

• ¿Que merecería un castigo tan duro?

Eso se había preguntado Niall muchas veces, nunca había visto a ningún hombre adulto recibir más de cinco o diez latigazos, y algunos no los había soportado.

• No lo sé, Pero también tiene una quemadura en el hombro y varias heridas en las piernas. Además, Noah me contó que uno de los huesos de su pierna había estado roto, notó las marcas al reconocerla. Sin contar las mordeduras de rata.

• ¿Os ha contado Niall que la encerraron con cuatro años en las mazmorras del castillo?

• ¡¡¡¿Cómo?!!! ¿Qué puto loco haría eso? - gritó Alan.

• George MacLeod. - Gruñó Niall

La conversación que había comenzado de forma animada se estaba convirtiendo en un tema escabroso que estaba minando los ánimos de todos.

• Sin contar está última paliza que estoy seguro que iba destinada a matarla, joder, ¿quién es tan macabro para clavar una daga en el pecho de una persona para dejar una nota? - se quejó Niall apretando los puños de impotencia

• Amigo, te prometo que encontraremos al culpable o a los culpables. De hecho, he pensado pasar por el clan MacLeod para investigar un poco. - le dijo Robert

Todos estuvieron de acuerdo, trazaron un plan y decidieron que no iban a revelar que ya estaba despierta y recuperándose, querían saber la reacción de la familia. decidieron que llevarían también a Rose, una de las mejores guerreras de Robert. Además de ser muy buena en el campo de batalla era ideal para infiltrarse entre las Damas, así obtendrían información de la madrastra y su hija.

Y así fue como esos cinco intrépidos guerreros escoceses y grandes amigos con un plan perfectamente trazado emprendieron la misión más importante de la vida de Niall, aunque los demás no sabían que también se convertiría en la suya.

Lo primero que hicieron fue visitar algunos clanes que estaban actuando con hostilidad y separándose de la misión de la corona que no era otra que crear una Escocia unida y fuerte. Su objetivo era apoyar a su Rey y amigo Robert Bruce.

Robert se sentía orgulloso de llevar a su lado a esos hombres y de poder llamarlos hermanos.

Fue una misión difícil en algunos momentos, algunos clanes no estaban dispuestos a confiar en el nuevo Rey, por eso Robert había decidido llevarlos a ellos. Alan era el heredero del clan MacCollins, uno de los más importantes del norte. Su padre era conocido por ser un guerrero implacable, pero de una nobleza sinigual, lo mismo que ocurría con su hijo.

Los Mackington eran conocidos por su estrategia en el campo de batalla. Su padre Mikel Mackington era uno de los mayores estrategas de las Highland, atributo que había heredado su hijo mayor Niall.

Los tres hermanos eran muy respetados, todo el mundo consideraba al clan Mackington como un clan justo, los habitantes de sus tierras eran muy fieles, cumplían con sus obligaciones, aunque sabían que si en algún momento sus familias sufrían alguna dificultad para cumplir con los señores no serían castigados.