El don de Flora (borrador)

Alianzas

Crystal

-No piense mal, princesa Crystal, ella es mi sobrina.

-Su sobrina... -dije incrédula.

-Si, es la duquesa Dionella.

-Pude entender lo que dijo la duquesa; significa que habla mi idioma.

-Practica el lenguaje Bellatorano con el príncipe, ama mucho su idioma.

Por alguna razón me siento un poco aliviada. Me retiro de la sala de baile a tomar aire fresco, necesito un momento a solas. Al llegar al balcón siento el viento acariciar mi rostro, cierro mis ojos disfrutando este momento pero una mano en mi hombro interrumpe mi momento y sin pensarlo ni un segundo saco mi daga que lo guarde dentro de mi escote y en movimiento lo tengo apuntando en su cuello.

-¿Otra vez? Es la segunda vez que me apuntas con eso -suena molesto. Dejo de apuntarlo y guardo mi daga en su lugar. El príncipe mira muy curioso.

-Es la segunda vez que aparece ante mí sin avisar -me defiendo -¿Que hace usted aquí? Quiero estar sola - le doy la espalda y vuelvo al balcón.

-El rey me mandó a acompañarla- ahora esta a mi costado.

-Supongo que para usted es un castigo.

-Lo es desde que supe que serías mi futura esposa.

No debo dejar que sus palabras me afecten, sus palabras no me deben hacerme sentirme mal. Debo recordarme que me caso por el bien de mi reino.

-Creo que lo dice porque usted está enamorado de otra mujer, lo entiendo, pero yo no tengo la culpa.

Este matrimonio es por alianzas, se supone que somos descendientes directos de Heracles deberíamos haber heredado su don, sin embargo no fue así y hasta ahora no se sabe el por qué, por eso desde hace generaciones mi reino siempre se dedicó a ser fuertes físicamente para compensar la falta de un don. Entrenamos desde muy niños para estar preparados si en caso vienen otros reinos a invadirnos.

En cambio el reino Lira es el reino más débil a pesar de ser descendientes del Dios Apolo. Ningún reino quiere quiso aliarse con el reino Lira porque no tiene nada que ofrecer a otros reinos, excepto a mi reino, que yo de a luz al primer descendiente con un don.

Si yo me caso con el príncipe; mi reino los protegerá si en caso hubiera un guerra. Sin embargo, descarto completamente que en el reino Lira haya guerra, ya que es un país pacífico.

-¿Princesa? ¿Me puedes oír?

-Eh ¿si?

-No me escucho, es una pen no lo volveré a repetir.

-¿Que?

-¿Bailamos?- ofrece.

-Le dije que quería estar sola.

-De acuerdo -dicho esto se retira.

Debo irme de aquí. Hoy olvide por completo que mi futuro como reina esta en riesgo por el embarazo de la reina.




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