Capítulo 8: Street Arts Boys

Como dije al inicio de la historia, Remington es una ciudad industrial, cuyos problemas en general son las pandillas y el crimen organizado. Una buena parte de la ciudad, específicamente en los suburbios, estaba tomada por el crimen. Cualquier joven de 17 años podía tener una navaja en su bolsillo. Naturalmente, los jóvenes aun sanos vivimos con el miedo de ser asaltados en cada esquina. La inseguridad es tal que muchos se han mudado a otras ciudades. Pero la cantidad de personas que aquí habitan es debida a la cantidad de trabajadores con familia que trabajan en una de las decenas de empresas y fábricas que aquí funcionan. Al norte de la ciudad hay como 10 fábricas y al menos 15 urbanizaciones. Entre la zona norte y la zona centro hay un puente que pasa sobre el canal de desagüe. Huele muy mal cuando se pasa por ahí, ya sea en auto o a pie. La zona centro es famosa por los centros comerciales, tiendas y por algunas empresas que ahí se encuentran. Además, cerca de la zona centro se encuentra un sector llamado "Kyoto". Kyoto es una ciudad en Japón, lo sé, pero Kyoto también es el nombre del sector en donde familias japonesas viven. Mi Sensei no vive allá debido a la inseguridad, pues afirma que la policía no hace redadas por ahí. Aparte, la policía está siempre ocupada enfrentando al crimen alto que no se preocupa por el hampa juvenil. Cada dos días puedes ver que dos o tres jóvenes fueron arrestados por poseer droga. Nunca por robar. O por matar. En realidad, vivir aquí es como vivir en un bosque. Si no te cuidas y si no sobrevives, los lobos de comerán. Ya sé, esto no tiene mucho que ver con lo que dije al principio, pero todo se conecta. Verán, en Remington existe actualmente una pandilla juvenil que prácticamente gobierna toda la ciudad. Aparte del crimen organizado, esta pandilla es la más grande que existe en toda la ciudad y cuenta con alrededor de 5,000 miembros. Entre ellos, jóvenes no mayores de 28 años. Esta pandilla fue fundada en 1987 por un tal Arthur McCloskey. Arthur tenía 25 años en ese entonces y sus inicios como pandillero consistían en robar tiendas y enfrentar a las pandillas que meses después surgieron para enfrentarlo a él y a sus compañeros. Arthur McCloskey era el líder de los Street Arts Boys. Este nombre fue debido a que según rumores, Arthur era un peleador increíble que peleaba con la mano desnuda y nunca perdía. Aparte, se dice que amaba la batallas de rap y el hip-hop, por lo tanto su pandilla fomento las artes callejeras entre jóvenes durante lo que quedaba de los 80's y los primeros 5 años de los 90's. Digo que solo los primeros 5 años porque Arthur McCloskey fue asesinado por unos administradores de una pandilla enemiga en 1995 y los Street Arts Boys se vinieron abajo. Tiempo después, en el 97, resurgieron con otro liderazgo, el cual era el hermano menor de Arthur y su nombre era Trevor McCloskey. El, como nuevo líder de los SAB (abreviado) acabo con las pandillas enemigas hasta reducirlas a su mínima expresión, convirtiéndose en la pandilla más poderosa de todo Remington y fomentando la unión de más jóvenes debido a su fuerza. En 2008, Trevor fue asesinado por el crimen organizado y desde ese tiempo no se conoce sobre líderes de los SAB, pero aún se encuentra en funcionamiento hoy en el 2018. La policía ha hecho todo por lidiar con los SAB pero no han podido. Hay muchos refugios y clubes en donde los administradores y su líder se reúnen y organizan grandes fiestas en donde se celebran competencias de baile y batallas de rap. Lo peor del caso es se sabe en donde se encuentra, pero es imposible encontrarla. ¿Recuerdan que dije que hay una red de alcantarillado averiada que nunca fue reparada? Pues en toda esa red, que es como un laberinto, están distribuidos los lugares en donde los SAB se ocultan. La red principal de alcantarillado averiada ha sido investigada pero nunca se ha hayado la base principal en donde se dice se oculta el líder de los SAB junto a su sequito. Pero si se sabe el nombre de esa base y su nombre es "La Cueva del Cocodrilo". Toda esta información que les he facilitado la conozco por cultura general. Pero los detalles me los conto Ronnie. El sí que sabe conseguir información de donde sea. Y por si no lo saben, los pandilleros con los que peleé hace unas semanas fueron de los Street Arts Boys, que habían sido contratados por aquel hombre para darme una paliza. Con suerte no lo lograron, y con suerte, pelearé contra más de ellos y ganaré.

Mientras tanto, en mi casa, me ponía unas banditas en la cara por las pequeñas heridas que tuve en las peleas de la noche en La Jaula. Ahora me convertí en lo que no quería convertirme, un gallo de pelea de un hombre rico y afortunado. Ahora solo debo cumplir mi contrato y ganar más peleas. En lo que llevaba de contrato había ganado 17 peleas. Y hasta ahora no he podido pelear con alguien que represente un desafío.