EPÍLOGO

Nunca planeamos aquel día en el que te perdería

SARAH

Y aquí estaba, de pie frente a él, nuevamente. Como cada mes en esta fecha. Como cada mes, hace dos años, en esta fecha, su fecha. Aunque hoy era más especial, hoy se cumplían dos años desde que murió Alex.

Aún recuerdo aquel día en el hospital, dónde nos informaron sobre su enfermedad

FLASHBACK

—El señor Skrein tiene lupus, y uno muy avanzado— dijo el señor

De repente sentí como el mundo se detenía de golpe. Todo estaba estático, quieto. De repente se me había olvidado hasta cómo se respiraba.

No estaba escuchando al doctor, no podía ni quería hacerlo. Esto no es cierto.

—¿Cuándo fue que lo supo?— solté de repente haciendo que todos me miren

—Hace mucho tiempo. El señor Skrein viene con esta enfermedad desde hace años— dijo el doctor haciendo que ahora sí dejará de respirar

—¿Qué tan grave es?— preguntó Aurora haciendo que sintiera una opresión en el pecho

—Demasiado señora— soltó un suspiro— para ser sincero, no sé cuánto tiempo le quede de vida. El lupus se apoderó de todo su riñón y gran parte de sus pulmones

—Pe-pero, ¿no hay nada qué hacer?— preguntó Patrick y noté la desesperación en su voz

—Su cuerpo rechazó todo lo que intentamos. Rechazó el tratamiento, los medicamentos, hasta el riñón nuevo. Todo— no podía hacer otra cosa más que mirar atónita al doctor— ahora si me disculpan, debo de ir a ver a otro paciente. En media hora pueden pasar a verlo

Vi como el doctor se fue, y camine de espaldas hasta que choqué contra una pared, para luego deslizarme en ella hasta llegar a sentarme en el suelo. Estaba mirando a un lugar cualquiera, pensando aún en lo que acababa de escuchar. Procesándolo todo. De repente, Patrick se sentó a mi lado con el mismo gesto que yo, o supongo eso.

—Sarah... —dijo con la voz cortada

—Patrick... —Dije de igual manera

—¿Ya no seremos los tres mosqueteros?— preguntó

—No... No lo sé— dije para luego tragar el nudo en mi garganta que no me permitía respirar

Sentí la mano de él agarrar la mía y dar un leve apretón. Me giré a verlo y vi que estaba llorando, me acerqué a él y lo abracé fuertemente, para luego escucharlo soltar un sollozo que desgarro mi alma totalmente.

No sé cuánto tiempo pasamos así, hasta que llegó Aurora a nosotros

—Perdón, pero, nos informaron que ya podemos pasar a verlo— dijo con los ojos llorosos

Patrick se separó de mi y asintió con la cabeza, mientras se levantaba del suelo para luego ayudarme a mi

Patrick abrazó a Aurora y ambos soltaron una que otra lagrima. Decidí dejarlos solos y camine hasta Fran, quien estaba abrazada de Noah

—Mami— dijo ella viniendo hasta mi y abrazarme— dime que esto no es real. Dime que Alex no morirá— dijo ella llorando

—No puedo decirte eso, porque no sé si eso puede pasar o no. No sé si creer en los milagros o no— dije mientras acariciaba su cabello

Sentí como ella me abrazaba más fuerte y lloraba desconsoladamente en mi pecho. No se me ocurría mejor cosa que acariciar su cabello, esperando a que se tranquilizara

Llegó Aria hasta nosotros y me miró triste, como disculpándose

—Perdón— soltó de repente, pero no entendí por qué se disculpaba — si quieres, puedes ser la primera en pasar

Negué con la cabeza, para luego girarme hacia Patrick

—Yo estoy bien. Prefiero verlo al último— dije segura de mi decisión— si quieren, pueden pasar ustedes Patrick— dije en su dirección

—Está bien— dijo para luego caminar junto con Aurora y entrar a la habitación de Alex

Decidí que lo mejor sería sentarme en la banca a esperar a que todos pasen. Devon camino hasta mi y se sentó a mi lado

—No tienes que hacerte la fuerte. Si deseas llorar, hazlo— soltó de repente, haciendo que lo mire extraño

Es cierto, no estaba llorando y tampoco siento deseos de hacerlo. Estaba neutra

—Estoy bien Devon, en serio— le di una sonrisa que no llegó a mis ojos

—Esta bien, te creo— dijo él para luego darme un apretón en la pierna

Asi paso un rato, hasta que pasaron todos a verlo. Ya era mi turno, así que me levanté de la banca y caminé hasta su habitación, para entrar lentamente y encontrarme con un Alex conectado a muchas máquinas y totalmente pálido. Sentí un escalofrío horrible al verlo ahí, en esa camilla y así