Un viento mágico se hizo presente agitando las ramas de los viejos árboles, este viento también despertó a Mei, quien debido al sonido del viento en su ventana abierta, lo que vio a continuación pareció un sueño, allí estaba Joshua peleando con los tres árboles, a pesar de estar plantados sus movimientos eran fuertes y coordinados, como si hubieran entrenado solo para esta lucha, las ramas golpeaban el cuerpo de Joshua, a su vez el los golpeaba con gran fuerza, era tal la fuerza de sus manos y pies que los grandes arboles se tambaleaban, los ojos de Joshua estaban llenos de poder y felicidad, de poder luchar con grandes rivales, su poder aumentaba con cada golpe, sin darse cuenta ya había pasado el reino oscuro y estaba entrando al reino de la luz , golpe a golpe pulía su arte de pelea aunque no eran tan refinado como la de Mei pero servía, sin embargo cada golpe que recibía de estos árboles eran un dolor intenso en su mente, sentía su cabeza explotar, los árboles le estaban pasando de la forma más dura los conocimientos que poseían, el cuerpo de Joshua seguía resistiendo pero, su ropa no, allí estaba desnudo solo luchando en zapatillas.
Mei miraba sin vergüenza notaba como el cuerpo de Joshua tenía cicatrices antiguas que se unían junto a las heridas nuevas, su mente explotaba cuando pensaba que le había dicho que era un debilucho, sin embargo en un instante las ramas logaron capturar a Joshua lo tenían de cada extremidad tirando de él, Mei quiso salir pero sintió que algo la sostenía , haciendo que mirara la espantosa escena, un voz masculina le susurro al oído “Quédate quieta, solo mira como este hombre elegido te protege, ¡¡¡¡ Mira ¡!!! Como tu hombre se sacrifica por ti”.
Un grito desgarrador sale de la garganta de Joshua, una voz sale desde los árboles, “ Resiste , no bloquees tu mente, no bloquees tu Qi, deja que nuestra energía recorra tu cuerpo”, aunque no se resistía, le costó encontrar la paz que necesitaba, en el momento pick su mente se volvió una con los tres árboles, el conocimiento de miles de año lleno su mente y como un rompecabeza que se completa, este nuevo conocimiento de acoplo a las enseñanza de su abuelo, cada árbol le dio un regalo, uno le dio la única espada AD (asesina de dioses), otro le dio el látigo del Castigo Eterno y el otro de entrego las dagas Inmisericordes del Destino, todas estas estaban dentro de él, solo las dagas podría heredarlo a un discípulo.