Capítulo 1

Un año es el tiempo en el que no se nada de Lukas y tampoco quiero saberlo. Él me rompió el corazón, era el único chico que podía hacerlo y lo logró. Al comienzo pensé que no iba a poder vivir sin él, pero Joe me ayudo a superarlo.

Joe ha sido un gran apoyo en todo este año. Se ha vuelto un gran amigo. Salíamos de fiesta cada fin de semana y bebíamos hasta no poder más.

Honestamente, perdí la cuenta de la cantidad de las veces que me emborraché durante esos meses. Solo sé que solo quería ver a Joe. Era la única compañía que podía soportar.

La primera semana fue terrible porque lo único que hice fue dedicarme a beber licor. Extrañaba tanto pasar tiempo con él, extrañaba sus besos, cada vez que salíamos tomados de las manos.

Empiezo a sospechar que siempre estaré sola, por exagerado que parezca.

No quería que acabáramos así, cortando por lo sano. Quería que lo hablásemos todo, quería que me contestara a las llamadas y que pudiéramos solucionar nuestros problemas.

El primer día me quedé como estúpida viendo mi celular durante todo el día, esperando algún mensaje de Lukas diciendo lo arrepentido que estaba. Pensaba que iría al aeropuerto a interrumpir mi vuelo, diciéndome que iría conmigo a las grabaciones por un tiempo.

El primer mes fue el peor porque fue cuando asimile las cosas. Lo único que hacía era llorar y balbucear que mi vida habría sido mejor y mucho más sencilla si no lo hubiera conocido.

El segundo mes fue cuando no pude evitar llamarlo. Me dije que si me contestaba el teléfono lo solucionaríamos, llegaríamos a un acuerdo, nos pediríamos perdón y nos prometeríamos que no íbamos a romper nunca más.

El tercer mes fue cuando por fin me miré al espejo con la cara sucia y amoratada, con los ojos tan hinchados que apenas si podía abrirlos. Fue cuando me tiré al suelo y le recé a Dios para que hiciera desaparecer el dolor. Le dije que nadie podía soportar un dolor tan intenso.

—Christina, ¿estás poniendo atención? —mi manager me mira.

—Sí.

—Como venía diciendo, la productora quiere que Joe y tú salgan por un buen tiempo. Es para darle puntos a la película.

—Por mí no hay problema —Joe tiene una gran sonrisa.

—No quiero salir con nadie —lo miro —No te ofendas, es solo que no estoy lista.

—Es una relación falsa.

—Ya supera a tu exnovio —me dice Joe.

—Deja a ese idiota fuera de esto, ¿entendido?

—Qué ruda —abre sus ojos.

—Igual mi respuesta es...

—Solo por un mes —dice mi manager.

—Bien —niego con mi cabeza.

No soporto esta vida, no soporto nada de lo que está pasando.

—Iré a mi habitación.

Me levanto de la silla y camino hasta la habitación número diez que es donde me estoy quedando. Por ahora nos estamos quedando en un hotel porque mañana será la Premiere de nuestra película.

Cuando estoy en mi habitación me pongo a revisar mi teléfono y veo que tengo llamadas de Neil, así que le marco por FaceTime.

—¿Cómo está mi actriz favorita? —sonríe en la cámara.

—Agotada y con ganas de matar a alguien —ruedo mis ojos —La productora quiere que salga con Joe por un tiempo para darle más puntos a la película.

—¿Qué dijiste?

—Hablaré con ellos —digo nerviosa —¿Cómo están todos?

—Ya sabes —hace una mueca.

Neil me contó que Lukas ya no es el mismo de antes. Al parecer se ha vuelto una persona seria, antisocial y ha comenzado a beber licor.

—Neil, quiero verlos pronto —las lágrimas comienzan a salir —Me siento tan sola en este lugar.

—Pronto vas a estar acá.

—Quiero que esta semana se pase volando.

—Todos lo queremos.

—Tendré que llamar a la residencia para regresar a mi antigua habitación.

—¿Y por qué no...?

Lo interrumpo —Sería incómodo. No quiero verlo.

—Tienes razón.

—Lukas, la comida esta lista —escucho el grito de Naomi.

—Hola, Naomi —hablo alto para que me escuche.

Ella comienza a gritar y le quita el celular a Neil para aparecer en la pantalla.

—Chris, hola —dice emocionada.

Voy a saludarla y veo que Lukas camina hacia la sala. Se ve demasiado distinto, tiene una sudadera puesta y un buso en la parte de arriba.

—¿Cómo estás? —miro a mi mejor amiga.

—Contando los días para verte.

—Los extraño mucho.

—Nosotros a ti. Chris, te ves más delgada. ¿Has estado comiendo bien?

La verdad es que no.

—Si —doy un suspiro.

No he comido bien porque estoy en depresión desde hace un año. No me gusta comer, no puedo dormir algunas noches y a veces me quedo en cama todo el día.

No puedo decirle eso porque la voy a preocupar.

—Chris, ¿tienes algo que decirme?

—Que te quiero mucho —miro la hora —Tengo que acostarme a dormir.

—Te hablo mañana.

—Adiós.

Cuelgo el teléfono y las lágrimas comienzan a salir. Todavía me afecta mucho lo de Lukas, creo que será un amor imposible de olvidar.

Quisiera devolver el tiempo y haberme quedado en la fiesta del primer día. Me arrepiento de haber subido a su apartamento para ver películas. Me arrepiento de haber conocido a Lukas Jensen.

Saco una pequeña cuchilla que tengo en la mesa de noche y me hago un pequeño corte en la planta del pie. Comencé a hacer todo esto al tercer mes de haber terminado con Lukas. Siento que esto me ayuda a aliviar el dolor.

—Estoy loca, maldita sea.

Estas es enferma, Christina.

La puerta de mi habitación comienza a sonar y me maldigo por tener que abrir la puerta.

—¿Qué sucede? —miro a Joe.

—Me pregunta si quieres que salgamos a comer algo.

—Bueno —digo no muy convencida —¿Ya? Porque debo bañarme y arreglarme.

—Dime cuando estés lista. Yo también me tengo que arreglar.

Cierro la puerta y pongo algo de música para entrar a bañarme. Un poco de música pop es lo que me ayuda a distraerme. Salgo del baño y me pongo un jean y un suéter de color blanco junto con unas zapatillas blancas. Me dejo el cabello suelto y me maquillo de manera natural.