El legado: A oscuras

Capítulo 13

—¿Quieres café? 

Mi vista se despegó de la encimera de granito para posarla en Reese, que me miraba esperando a que hablara. ¿Café? Desconocía lo que era eso, pero sus ojos esperando una respuesta me obligaron a decir lo primero que pensé. 

—Sí, claro. 

Me regaló una sonrisa fugaz antes de ponerse a preparar el desayuno. Seguí sus ágiles movimientos por toda la cocina. Parecía tener experiencia, cosa que me faltaba a mí en ese ámbito. Helen apareció en la cocina alterada y agobiada buscando unos papeles. 

—¿Adónde vas? 

—Hoy empieza el instituto.

—Ah, es verdad. 

Reese me dio el café cosa que agradecí sonriéndole. Miré la taza en la que se encontraba aquel líquido marrón. Arrugué la nariz. Helen volvió del salón donde había ido justo hace unos segundo y donde al parecer había encontrado los papeles que quería. Le dio un último repaso a su bolso para verificar si tenía todo lo necesario. 

—Chicos me voy. 

Se acercó a Reese y le depositó un dulce beso en la mejilla. Cuando se acercó a mi sonriente hizo lo mismo y seguidamente se se fue, no sin antes despedirse. Eso me había hecho sentir como en casa. 

Reese cogió una silla y se sentó delante mía. Su mirada azulada me escaneó, cosa que me empezó a incomodar. Entrecerró los ojos cuando mi mirada de confusión empezó a notarse más. 

—¿Qué pasa? 

Alzó una ceja con su típica expresión seria e imponente. 

—Pareces un corderito —sonrió con una pizca de malicia mientras se colocaba bien el piercing de la nariz.

Abrí los ojos como platos con una cierta sensación rara en el estómago. Las palmas de mis manos empezaron a sudar y yo me preparé para cualquier cosa extraña. ¿Qué me estaba pasando? Estaba acostumbra y preparada para cualquier cosa, ¿por qué ahora reaccionaba así? 

La sencilleza del mundo real. 

La expresión de Reese se relajó y con aire divertido señaló mi taza de café con la cabeza. 

—Aún no has probado el café. 

Sorprendida por la causa de su extraño comportamiento miré aquel líquido marrón para, seguidamente, volver a mirarlo a él. 

—¿No te gusta? —dijo y dio un sorbo a su taza con su mirada azulada puesta en mí. 

—No, quiero decir, nunca he probado el café. 

Mi respuesta pareció confundirle y al mismo tiempo sorprenderle. Alzo ambas cejas.

—¿En serio? —asentí—. Bueno, pues siempre hay una primera vez, ¿no? 

Su sonrisa hizo que mi cuerpo se destensara. Llevé la taza a mi boca y bebí un pequeño sorbo del líquido. Nada más probarlo arrugué mi nariz ante el sabor amargo, cosa que hizo que unas suaves y graves carcajadas salieran de la garganta de Reese. En ese mismo momento, Jaden entró en la cocina con su típica expresión neutral mirándonos por el rabillo del ojo. 

—¿Sabes que puedes ponerle más azúcar si quieres, verdad? Jaden, pasale el azúcar a Nora. 

Me giré, encontrándome con el susodicho cogiendo el azúcar de una estantería. Se giró y me miró con indiferencia antes de darme el azúcar de mala gana. Salió sin decir ninguna palabra. 

—Déjalo, mi primo es un poco... Especial. 

—¿Primo? —asintió. 

—¿A que no nos parecemos en nada? 

Ladeé la cabeza mientras lo observaba e intentaba enlazar características parecidas entre ellos. 

—La verdad... Sí que os parecéis. 

Alzó una ceja divertido ante mi supuesto disparatado comentario y negó con la cabeza. Se terminó el café de un sorbo y se levantó de la mesa. 

—Échale más azúcar y me dices si así está mejor. 

 

(...)

 

Ya había pasado una semana desde que tuve aquella conversación con Helen en la que ella me decía que sabía lo que era y me explicaba cosas que desconocía por completo. Obviamente actué diciéndole que estaba bastante perdida, y que en ese momento no quería hablar de más. Ella entendió a la perfección que no quisiera contarle el momento en el que mis amigas murieron, y sinceramente no creía que se lo fuese a contar, pues intentaría irme de esa casa lo antes posible. Necesitaba irme. Necesitaba un plan B.

Apenas había dormido por la noche, ni esa, ni todas las demás. Estaba sentada en el sillón viendo la famosa serie The Vampire Diaries que Landon me había recomendado ver, y es que por primera vez en todo lo que llevaba de tiempo allí, estaba sola, sin nadie a mí al rededor. Helen y Alex estaban en el instituto, y no volverían hasta dentro de dos horas. Landon se había ido a trabajar, cosa que no solo me sorprendió a mí, sino a los demás también, pues acababan de cogerlo en una heladería. Reese y Nolan se habían ido a no sé donde y Cole estaba en la Universidad, al parecer era el único que estudiaba, que yo supiera. Los únicos que estaban en casa eran James, que al parecer estaba durmiendo aún, y Jaden, que ni siquiera sabía dónde estaba, y que sinceramente tampoco quería saber. Él había sido el único de todos ellos que me estaba tratando como si no pintara nada allí, cosa que de alguna manera u otra era verdad.

Mis ojos cansados se mantenían abiertos mirando al famoso Damon que tanto me dijo Landon que me gustaría, y tenía razón, era...¿cuál sería la palabra? En ese momento mis ojos se cerraron y mi mente se quedó completamente en blanco. Ante mí, una infinita oscuridad se alzó.

Abrí mis ojos al mismo tiempo en el que cogía una gran bocanada de aire. Mis pulmones me dolían y la garganta me dolía. Llevé mis manos a esta intentando calmar el dolor mientras tosía de manera descontrolada.

—¡Natalie!

Los gritos de unas voces femeninas que me eran conocidas lograron ponerme en pie a pesar de lo cansado que estaba mi cuerpo. Palidecí en cuanto vi a Ámbar y a Cloe luchando con unos hombres vestidos de negro. Mis piernas actuaron a tiempo y corrí hacia ellas con la respiración acelerada. Me tiré al suelo para poder coger una espada y me dejé deslizar hasta hacerle un corte profundo en las piernas a uno de los hombres que cayó inmediatamente. Llevé mi espada hacia atrás clavándosela en el estómago sin ni siquiera mirarle. Cuando me puse de pie y me di la vuelta me encontré a Cloe en el suelo y tocándose la herida que tenía en el vientre. No dejaba de salir sangre. ¿Qué? Pero si era...yo no quería...



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En el texto hay: adolescentes, hombre lobo, brujas

Editado: 15.05.2021

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