-Ya llegamos -
Grita un pequeño entrando apresuradamente a la casa dirigiéndose a la sala de espera donde se encontraba su padre sentado en un pequeño mueble leyendo un libro de gran grosor, quien serró el libro rápidamente al ver que el pequeño corría hacia él. El niño salto hacia su padre sujetándose de su cuello dejándose caer en sus piernas mientras el padre le mostraba una gran sonrisa con gran beso en la mejilla.
- ¿Que lees papi? -
Le pregunto curiosamente el pequeño a su padre, el hombre bajo el niño próximamente sentándolo en el suelo la cual tenía una gran alfombra le contesto.
- Un libro que está lleno de historias fantásticas maik, un libro que te hará viajar al mundo de la imaginación -
La madre de maik la cual miraba y escuchaba desde atrás se acercó para saludar a su mirado.
- Que poético amor -
Dijo ofreciéndole un pequeño beso en los labios, dulcemente él le sonrió a su esposa mientras se reacomodaba en su asiento y la mujer se dirigía a la cocina demandó a el par de machos solos, el padre le pico un ojo a maik el cual sonrió pícaramente.
- ¿Maik quieres escuchar la historia? -
Le pregunta el padre al pequeño.
- Si, por tu descripción debe ser interesante -
- Esta bien, pero pon mucha atención -
Indicó el padre al pequeño mientras comenzaba a leer.
***
- Sonidos que escucho en mis oídos
Músicas que recuerdo sonar
Te pido que este bosque toque lo que quiero escuchar -
Pronunció tales palabras un joven el cual portaba un libro en el cual lo único que escribía únicamente eran los conjuros que utilizaba para la magia. Después de tal conjuro en el bosque se escuchaba una melodía combinada de piano, violín y guitarra era total mente hermoso y a legua se notaba que era nada más y nada menos romántica el género favorito del joven. El chico el cual se encontraba en la cima de una pequeña montaña en la cual se podía presenciar el bosque desde arriba se dio cuenta que alguien subía el presenciaba la silueta del personaje que se acercaba lentamente a su posición así que pronuncio tal conjuro.
- Detente conjuro te lo pido
A sido suficiente la magia de hoy -
- Zail, ¿que haces? -
Le preguntó una joven.
- Solo práctico mis conjuros básicos no quiero que mi padre me castigue por no saber crear mis conjuros -
Le contesto Zail a la chica que casi lo sorprende en ese acto tan vergonzoso.
- Pero ¿que haces aquí Elyara? -
Le preguntó él a la joven, para el nadie sabía de su paradero y se encontraba extraño que ella apareciera ante el de esa manera.
- Te estaba buscando y pensé que estarías aquí ya que es tu lugar preferido, aun no entiendo cómo vienes aquí es hermoso y todo, pero demasiado caminar -
Zail se burló de lo que había dicho la chica, pero luego desistió por su mirada de disgusto.
- Lo lamento -
Expresó.
- ¿Por que me buscabas? -
Preguntó rápidamente antes que ella indagara a otro tema.
- A si, es que ya es muy tarde y tu padre se estaba preocupando... -
- ¿Que mi padre que...? -
Interrumpió Zail a Elyara incrédulamente
- ¿Porque te muestras tan incrédulo Zail? -
Preguntó ella algo molesta al ver su comportamiento
- Es que es difícil creerlo de el
- No debiera ser así amor de toda forma no importa lo recto cascarrabias que sea sigue siendo tu padre y siempre se va a preocupar -
El la miro con mirada de la remordimiento, pero sus pensamientos no querían aceptar esa posibilidad, duro unos segundos detenidos hasta que por fin hablo.
- Tal vez tienes razón -
Ella quiso hablar nuevamente, pero él no la dejo poniendo su dedo índice sobre sus labios el tal vez pensó que fue suficiente hablar o tal vez se cansó, aunque en realidad no fue mucho el cruce de palabra. Zail de los labios bajo su mano a la de ella y agarrándola el halo hacia el abrazándola entre sus brazos.
- Vamos Elyara sabes que no me gusta que pongas esa cara -
Le expreso Zail pero ella no respondió, su respiración se fue tornando tensa mientras más tiempo ella duraba en sus brazos y ahora el acariciaba su pelo.
- Zail -
Pronuncio ella su nombre tiernamente mientras dejaba caer su cabeza sobre su pecho
- ¿No crees que debiéramos bajar ya? Tu padre se enojará -
Solo un minuto más contesto él. Ellos duraron unos momentos abrazados hasta que decidieron bajar, iban entretenidos hablando calmados y felices, pero al llegar a la casa de Zail su padre le grito bruscamente, pero Zail le interrumpió.
- Padre, aun practicaba -
Esa interrupción le costó un bofetón, pero al menos lo libro de algo peor. Elyara que se encontraba al ver el golpe que recibió Zail se movió rápidamente para ver el golpe, pero él la agarro indicando con la mirada que se quedara dónde está.
- Acompaña a Elyara a su casa -
Indico su padre
- eso haré -
Contesto agarrando a Elyara y saliendo de la casa
- Amor detente -
Le indicó la ella a Zail
- Vas muy deprisa y me lastimas -
Él se detuvo y se recostó de la pared que se encontraba tras de él.
- Lo lamento, no quise hacerte daño -
Elyara no presto atención a sus palabras y se dirigió a él agarrando sus labios con los suyos.
- Vamos -
Le contesto halándolo tras ella para continuar el camino.
5 AÑOS DESPUÉS
Era de mañana cuando apenas se asomaba la aurora el padre de Zail se dirigía a su aposento para despertarlo, pero al abrir la puerta Zail se encontraba sentado sobre su cama observando por la ventana.
- Buenos días Zail -
Saludo el padre a Zail sentándose junto a el sobre la cama.
- Bendiciones padre -
- Dios te bendiga hijo -
Ofreció la bendición el padre a su hijo
- ¿Te encuentras bien Zail? -
Pregunto el padre a su hijo.
- Estoy bien padre, no se preocupe -
Contesto Zail mirando a su padre y ofreciéndole una sonrisa.
Editado: 27.02.2022