Capitulo 6. Juego de noche

Ya eran las 22:00 de la noche. Todos los equipos estaban al centro.

   —Por petición de todos, haremos el juego de noche. ¿Estáis seguros de que queréis hacer-lo? Después de lo que pasó esta mañana…—Todos aceptaron sin dudas. —De acuerdo, jugaremos a “Capturar la bandera”.

   —¿Quién no juega?

   —Edith todavía no ha despertado ¿no? —preguntó Judith

   —No, está descansando—respondió Tom.

   —¿La puedo ir a ver? Yo no quiero jugar.

   —De acuerdo, te acompañare.

   —Entonces, sois 58 personas ¿verdad? 29 en cada equipo, elegid entre el 1 y el 2.

Equipo 1. Blanco                            

Ari, Adrià P. Janira, Dalila, Jaba, Malena, Núria, Madeliene, Victoria, Jordi, Paola, Iris, Nil, Liam, Guillem, Alexis, Doris, Amaia, Nick, Marc, Ángel, Andrea, George, Ivan, Enric, Acnés, Daniel, Alfredo.

Equipo 2. Negro

Ana G, Marta O, Monica, Paula B. Yolanda, Fadwa, Txell, Laura M., Marta V., Sandra, Marta F. Adrià C. Anna C. Marina, Laura B. Paula R. Gemma, Cristina, Edgar, Gerard, Ot, Miquel, Francesc, Sergi, Rick, Lluc, Raúl, Oriol.

          Una vez ya hechos los equipos, se fueron a esconder las banderas, un cono con rallas amplias y naranjadas con tonos azules. —No está muy repartido que digamos—comentó Ari.

   —Empieza el juego. Hasta que no capturéis la bandera del oponente, el juego no se acabará—Empezaron a jugar, todo el campamento era el campo de juego, a la derecha estaba el equipo de color blanco y a la izquierda, el equipo de color negro. Negro fluorescente claro.

Con poca iluminación que había, avanzaron en el campo contrario, algunos tuvieron que ir a la prisión porque los habían pillado, otros los rescataron y retomaron la búsqueda de las banderas.

   —Este es un buen escondite, seguro que por aquí está la bandera—dijo Anna C.

   —Entonces deberían estar por aquí los defensores ¿no? —dijo Laura B.

   —Llegan los del otro equipo ¿está por aquí? —preguntó Adrià C.

   —No, no la hemos encontrado todavía—La puerta del trastero de metal, estaba abierta. —Antes no estaba abierta.

   —No me digas eso Anna que no dormiré esta noche.

   —¿Que hay? Puede que la hayan escondido ahí dentro—dijo Adrià C.

   —Vamos a ver.

   —Como haya algo o me hagan algún susto, salgo pitando—advirtió Laura B. Entraron, no veían nada hasta que Adrià abrió la luz. Era un trastero mediano y rectangular, había muchas cosas viejas con polvo incluido.

   —¿No limpian nunca este lugar?

   —Hey, mirad hay un piano—dijo Laura emocionada.

   —¿Sabes tocar?

   —Olaja, pero la Malena sabe—Dijo sentándose en una silla delante del piano. Empezó a tocar una nota.

   —¡Dios! —Una voz de fuera gritó al escuchar la nota del piano. Era el Alfredo, del equipo contrario. —¿se puede saber que hacéis aquí?

   —¿Buscando la bandera? —preguntó la Laura con una sonrisa.

   —Aquí no la hemos escondido, no se puede esconder nada dentro del trastero ni de las cabañas.

   —Entonces hemos perdido el tiempo—dijo Adrià saliendo el ultimo.

   —Te has asustado ¿eh? —dijo Anna C.

   —No es una de las cosas que escuchas cuando estas en la naturaleza.

   —¿Habéis escuchado eso? Ya han encontrado una bandera— Dijo Adrià al escuchar un silbido.

   —¿Quién habrá ganado? —preguntó Anna.

   —Vamos a verlo—dijo Laura B.

   —Seguro que hemos ganado nosotros.

   —Lo dudo, nosotros somos mejores—respondió Alfredo.

   —¿Por qué llevas un megáfono? —preguntó Adrià.

   —Porque soy el líder del equipo blanco.

   —Nosotros no tenemos ningún líder.

   —Sí que lo tenemos, es Oriol—respondió Laura.

   —Ah, es verdad, que día que tengo.

   —¿Me lo dejas? —preguntó Anna.

   —Toma, pero no lo rompas.

   —Soy el fantasma de las bragas sucias—dijo por el megáfono. —Escucha Alfredo, ¿dónde puedo encontrar este chisme? Alfredoooooo—dijo con voz fantasmal.

   —Dentro de lo que cabe, nos lo hemos pasado muy bien—dijo Adrià.

   —Yo solo espero que el piano no suene solo por la noche.

   —¿Es posible?

   —En serio lo preguntas—dijo Laura yendo hacia la gente, junto con él.