Capitulo 8. Un sueño real

   —Miriam…Miriam…—una voz se escuchaba a lo lejos e hizo que abriese los ojos.

   —¿Qué? ¿Quién eres? —estaba en un bosque, observaba todo a su alrededor sin saltarse ni un solo detalle, pero no había nada ni nadie.

   —Miriam…

   —¿Quién eres? ¿Dónde estás? —preguntaba mientras andaba por el bosque, de noche.

   —Miriam…

   —¡Ya está bien! ¿Dónde estás? ¿Quién eres? ¡Contesta! —De repente apareció una persona con el rostro oculto por las sombras de la noche, era una chica y llevaba un colgante en su cuello.

   —¡Ahora tu poder será mío! —La chica apareció más cerca de ella en un abrir y cerrar de ojos, y le clavo una jeringa en el brazo, Miriam se despertó gritando y con una respiración elevada.

   —Miriam ¿Qué ha pasado? —preguntó Yolanda, quien se asustó del grito.

   —Acabo de tener una pesadilla súper extraña—se miró el brazo donde le pincho y su cara reflejaba confusión al ver su sangre —No me lo puedo creer.

   —¿Qué te ha pasado? Estas sangrando—dijo Paula R al verla. Yolanda cogió unas vendas que había en un botiquín de emergencia, en cada una de las cabañas, por si pasaba alguna cosa.

   —Exactamente ¿Qué ha pasado en tu sueño? —preguntó Yolanda mientras la vendaba.

   —Fue muy rápido, había una chica, o eso creo, no le vi la cara, estaba totalmente tapada y llevaba un collar de oro encima. Me dijo “ahora tu poder será mío” y me pincho.

   —¿Que son esos gritos? —preguntó Adrià P.

   —Miriam, que tiene sueños bastante reales y raros. El caso es que hay alguien que nos está atormentando, sobre todo a ella—dijo Yolanda.

   —Con eso de “tu poder” ¿no se referirá a tu poder de la escritura? —preguntó Paula R.

   —Tiene sentido, en realidad, solo tengo ese poder.

   —Tenemos que estar alerta, enviare un mensaje al grupo.