Maraton 3/5
Abigail.
Dia numero seis. Asi es. Lo estamos logrando amigos.
Es decir aún faltan algunos días y tenemos que seguir alertas por cualquier cosa, mas que nada por la histeria de Cindy por querer descubrirme pero no lo logrará. Como todas las mañanas Cameron llega directamente a abrir su casillero, la misma bulla de siempre y al final guarda todo en su mochila, solo que esta vez mi carta la llevaba en la mano, finalmente se va con una sonrisa, esa es la sonrisa que me gusta ver siempre, pero no duro mucho...
Cindy agarro la carta y la rompió enfrente de todos para luego tirarla a la basura, sentí como si el piso se moviera, abrí un poco los ojos para no ser obvia pero por dentro sentía ganas de agarrar su sedoso cabello y estrellarla contra la pared, salí de inmediato de ahí hacia mi salón, me senté en el último lugar junto a la ventana y comencé a pensar.
Maldita perra, rompió mi carta y lo peor de todo es que no podía hacer nada, ni mostrar la mas minima muestra de enojo, ahora mas que nunca tenía que tener cuidado, Cindy tenía vigilados a todos y a todas, junto con sus secuaces. Aunque si buscamos el lado bueno de todo esto en realidad sí lo tenía, es decir, Cindy estaba mas neurótica y toxica que nunca eso solo queria decir una cosa, mis cartas estaban teniendo algún tipo de reacción en Cameron, el era de ese tipo de chicos amable y fiel, asi que sin importar que, las cartas de sus admiradoras nunca le interesaban, ¿con las mias sera diferente?
Si no es así entonces, ¿qué es lo que hace que Cindy se ponga tan celosa?
Todo un misterio.
Tenía que encontrar la manera en compensar lo de la carta de hoy, Cindy me las pagaria, pero ¿como?
De repente hoy com Joe se sentaba frente a mi y Owen a su lado.-¿Que haremos para que esa perra pague?-Se oía enojada.
-No tengo idea.-Dije mirándola.-Pero tarde o temprano va a tener su merecido.-Dije mirando el suelo, estaba tan enojada que ni siquiera podía expresarlo. Maldita perra.
Cindy.
Después de romper la carta me fui de ahí, sabia que Cameron iba a reclamarme, así que fui a los sanitarios para poder calmarme. Tenía tantas ganas de llorar y explotar, pero no podia. No ahora.
Limpie la lagrima que había salido y volví a tocarme rimel y un poco de maquillaje para despues ponerme mi uniforme de porrista.-No te puedo perder Cameron.-Dije viendo mi reflejo en el espejo. Y justo cuando pensé que este día no podía ser peor ella o mejor dicho Abigail Bradley entro al baño.
-Lo siento, pense que no habia nadie.-Entra rapidamente a uno de los cubículos del baño. En ese momento mi mente hizo click, si no quiere perder a Cameron, debía esperar atacar a las mínima amenaza.
-Mi querida Abi, ¿Quien crees que sea la mosca muerta que quiere robarme a mi novio?-Ella salió del baño con su uniforme de porrista y con su misma expresión de siempre osea seria, creo que esta niña no sabe que es sonreir.-De mujer a mujer, ¿que te dice tu intuición?-Era obvio que me valía su opinión, lo unico que queria hacer era descartarla de mi lista, ¿por que la pequeña Abi sería un problema? Por eso mismo, para Cameron es recuerdo de su infancia y esta misma es igual a su padre. Osea que todo lo que tenga que ver con infancia le importa y eso no esta mal, solo no quiero que me deje...sola.
-¿Intuición?-Pregunta mirandome incredula, solo responde Bradley, dije con la mirada.-Mi intuición me dice que lo único que quieres es humillarme de alguna forma con tus preguntas estupidas, así que en vez de estar aquí por qué no vas y encuentras a la persona que lo está haciendo.-Dijo seria, mientras acomodaba su cabello.-Se ve que te esta afectando que Cameron le sonría a una hoja de papel.-Me miro y luego sonrió.-Buen dia.
-Buen dia Bradley y no te preocupes, dare con esa zorra, ya sabes, lo que me propongo lo cumplo.-Esta vez lo dije insinuando que era ella, Bradley bajó la guardia mirando por un microsegundo al suelo.-Bueno dia.-Dije sonriendo y caminando a la salida.
Te atrape pequeña Abi.
Por si tenian duda, yo no la odio, en realidad odio que Cameron nunca a podido dejarla en paz, incluso para mi es normal que el trate de protegerla, estoy acostumbrada, es decir desde que somos novios ya no la sigue a todos lados pero aun así, a ella siempre le ha prestado atención y ella ¿ella que? Siempre tan serena, aveces quisiera no ser popular quitar toda la presión y ser como ella pero eso no se puede.
Como diria mi madre, enfrenta las consecuencias que tiene ser tu misma. Gracias mamá por tus frases sin sentido.
Si Cameron estuviera enamorado de Abigail mi mundo se caería en pedazos.
Camine hacia el campo de fútbol necesitaba encontrar a Kath. Afortunadamente aún no comenzaba el entrenamiento, la tome del brazo y la llevo a donde no puedan escucharnos.-Tengo una sospecha.
-¿Sospecha de que?-Pregunto confundida, Kath desde pequeña había querido ser capitana de porristas ya que lo suyo siempre fue el suyo por lo que suele ser estricta con lo que de verdad le importa, ya que si algo no salía bien ella se ponía muy mal.
-De quién quiere robarse a mi novio.-Ella suspiro, no estaba de acuerdo con lo que quería hacer de hecho ella nunca estaba de acuerdo pero aun asi siempre me soportaba, ella es mi mejor amiga, no le queda de otra. Yo era necia e impulsiva, ella era paciente y seria.
-¿De quién estamos hablando?
Fui directa.-Ella, la pequeña Abi.-Decirlo aún era una locura pero mi instinto nunca fallaba.
-Debes estar bromeando.-Dijo Kath con una sonrisa, puse la cara mas seria que pude para que entendiera que no estaba bromeando.-¿En que te basas? Es decir, es imposible que ella...
-Mi instinto nunca falla, lo sabes de sobra.