Qui c'est celle la?

Louis se encontraba en el café de siempre, su lugar de lectura favorito en el centro de París. Estaba absorto en su libro cuando, de repente, entró una joven hermosa y misteriosa. Con una sonrisa cautivadora y un aire de misterio que la hacía aún más atractiva, llamó la atención de Louis de inmediato. "¿Quién es ella?", se preguntó Louis para sí mismo, mientras la observaba marcharse sin dejar rastro. "Nunca había visto a alguien como ella en este café". Se sintió desconcertado y fascinado al mismo tiempo. No podía dejar de pensar en ella y decidió que tenía que encontrarla.

Louis se levantó de la silla del café y se acercó a la barra para dejar su taza. Fue entonces cuando vio el baso que ella había dejado. A simple vista, era solo un vaso de café vacío y desechable, pero algo en él llamó su atención. Había un apodo escrito en la parte superior del baso: "Luna Azul". Louis se preguntó quién podía ser esa persona. La curiosidad lo llevó a preguntarle al barista, pero este solo pudo decirle que la chica había pedido un café con leche y luego se había ido.

Decidido a encontrar a la chica de la luna azul, Louis salió del café y comenzó a caminar por las calles, buscando a alguien que pudiera ser ella. Miró a todas las mujeres que pasaban, buscando pistas en su apariencia o su comportamiento, pero nada parecía indicar que era ella. De repente, recordó el apodo del baso y comenzó a mirar al suelo, buscando más vasos descartables.

Después de un rato caminando, Louis comenzó a sentirse desanimado. Ya había recorrido gran parte de la ciudad y no había encontrado ni rastro de la chica de la luna azul. Se detuvo en una esquina y se recostó contra la pared, preguntándose si alguna vez la volvería a ver. Miró hacia arriba, hacia el cielo azul, y se preguntó si ella estaba viendo la misma luna que él. Finalmente, se resignó y decidió que lo mejor era volver a su apartamento. Tal vez tendría más suerte otro día.

Louis entró en su departamento y se dejó caer en el sofá. Su amigo, que estaba sentado en el otro extremo de la sala, se giró hacia él.

"¿Cómo te fue hoy?"

"No muy bien, mi amigo. Conocí a una chica en el café esta mañana, pero desapareció sin dejar rastro."

"¿Una chica? ¿Cómo era ella?"

"No lo sé, pero me hizo sentir algo especial, algo que nunca he sentido antes".

"¿Cómo te hizo sentir?"

"Fue como una mezcla de emoción, alegría y misterio. Y cuando vi su apodo escrito en el vaso, supe que tenía que encontrarla. Pero la busqué por toda la calle y no la encontré".

"Vaya, suena interesante. ¿Qué piensas hacer?"

"No lo sé, pero voy a hacer todo lo que esté en mi poder para encontrarla. Quiero saber quién es ella y por qué me hizo sentir así. Quizás pueda hablar con ella en su idioma y hacer que se sienta especial también".

Louis pasó varias noches sin dormir, obsesionado con encontrar a la misteriosa chica del café. Decidió volver al lugar todas las mañanas, esperando encontrarla de nuevo. Pero pasaron varios días y ella no apareció.

Antoine intentó convencerlo de que lo mejor sería olvidarla y seguir adelante, pero Louis no podía dejar de pensar en ella. Finalmente, decidió buscarla en las redes sociales. Pasó horas buscando en todas las plataformas posibles, hasta que finalmente encontró a alguien que parecía ser ella.

Se trataba de una chica con el mismo apodo que había visto en el café, y que tenía una foto de perfil que parecía ser tomada en el mismo lugar. Louis no podía estar seguro al cien por ciento, pero decidió tomar el riesgo y enviarle un mensaje.

"Perdona si esto es demasiado atrevido, pero me pareciste una persona muy interesante y me encantaría tener la oportunidad de hablar contigo de nuevo. ¿Te gustaría tomar un café juntos algún día?"

Pasaron varios días sin respuesta, y Louis comenzó a pensar que había cometido un error al enviar el mensaje. Pero una mañana, recibió una respuesta:

"Me sorprende mucho que hayas encontrado mi perfil, pero estoy interesada en saber más sobre ti también. ¿Por qué no nos encontramos en el mismo café de la última vez?"

Louis se emocionó al leer el mensaje y aceptó inmediatamente. Finalmente tendría la oportunidad de conocer a la misteriosa chica que lo había dejado tan impresionado.