La noche de la Luna Azul

Louis salió a caminar en una noche oscura con la luna llena brillando en el cielo. Caminó hasta un lugar alto, una colina en las afueras de la ciudad, donde tenía una vista panorámica del paisaje urbano. Se sentó en una roca y contempló la luna por un rato, tratando de despejar su mente.

Fue entonces cuando un extraño se acercó a él, un hombre de mediana edad con un sombrero oscuro y un abrigo largo. Sin decir nada, le entregó un pequeño papel a Louis, en el que estaba escrito "Luna Azul" en letras mayúsculas.

Louis se sintió desconcertado y confundido por la extraña nota. ¿Qué significaba? ¿Era algún tipo de código o una pista sobre algo? Miró al hombre, pero éste se alejó sin decir nada más.

Louis se quedó allí, en la colina, mirando fijamente la nota. Pensó en Noelia y en su antiguo apodo, "Luna Azul". ¿Podría estar relacionado con ella de alguna manera?

Decidió investigar. Empezó a buscar en internet, tratando de encontrar cualquier pista o referencia a "Luna Azul". Revisó las redes sociales, los blogs y los foros de discusión, pero no encontró nada significativo.

Frustrado, decidió dejarlo por un tiempo y se fue a casa. Pero la nota seguía en su mente, como una mosca zumbando alrededor de su cabeza. Decidió que seguiría investigando al día siguiente. ¿Qué secreto se escondía detrás de "Luna Azul"?

Louis quedó impactado por la nota que recibió en la colina aquella noche. Decía "Luna Azul" en letras grandes y nada más. No sabía qué significaba ni quién había sido el misterioso remitente. Decidió que la única persona en la que podía confiar para contarle todo esto era Antoine, su mejor amigo desde la infancia.

Así que llamó a Antoine y le pidió que se reuniera con él en un café cercano. Cuando Antoine llegó, Louis le contó todo lo que había pasado en la colina aquella noche y le enseñó la nota. Antoine frunció el ceño y la leyó varias veces, tratando de encontrarle algún sentido.

Después de un rato de silencio, Antoine levantó la vista y le preguntó a Louis si tenía alguna idea de quién podría haberle enviado esa nota. Louis negó con la cabeza y suspiró, sintiéndose frustrado por no tener ninguna pista sobre el remitente.

Antoine le propuso que intentara buscar en línea o preguntar en la zona si alguien conocía algo sobre la Luna Azul, pero Louis no estaba muy seguro de que eso fuera a ayudar. De todas formas, agradeció a su amigo por estar allí para él y por intentar ayudarlo en todo lo posible.

La verdad era que Louis estaba empezando a sentirse obsesionado con la nota y la Luna Azul. No podía sacárselo de la cabeza y estaba convencido de que era algo importante. Pero ¿qué podía ser? Se prometió a sí mismo que iba a averiguarlo, aunque tuviera que pasar varias noches más en la colina mirando la Luna llena.

Louis se encontraba en la misma colina donde recibió la nota con el nombre "Luna Azul". Era una noche fría y la luna brillaba intensamente en el cielo. Mientras Louis admiraba la belleza del paisaje, escuchó unos pasos acercándose hacia él. Era la misma persona que le había entregado la nota. Louis estaba asombrado por el encuentro, no sabía si se trataba de una casualidad o de algo más. La persona le entregó otro papel, esta vez con una dirección escrita en él. "Sígueme" dijo la persona.

Louis no sabía qué hacer, pero Antoine estaba allí con él y lo animó a seguir a la persona. Juntos, siguieron a la persona hasta un túnel oscuro debajo de las calles de París. La persona los llevó a través de una serie de pasajes y escaleras, hasta llegar a una habitación subterránea.

En la habitación, había una mesa y dos sillas. La persona invitó a Louis y Antoine a sentarse y les preguntó si habían oído hablar de la leyenda de la Luna Azul. Los dos amigos se miraron sorprendidos, ¿cómo sabía esa persona sobre la nota y la Luna Azul?

La persona les explicó que la Luna Azul era un objeto muy valioso y que muchas personas habían estado buscándolo durante años. Les contó una historia sobre una antigua secta que había escondido la Luna Azul en algún lugar de París, y que esta secta había mantenido su existencia en secreto durante siglos.

Louis y Antoine estaban atónitos, ¿podía ser verdad? La persona les mostró un mapa y les dijo que la Luna Azul estaba escondida en algún lugar dentro de ese territorio. Los dos amigos se emocionaron y comenzaron a planificar su búsqueda.

El extraño les advirtió que debían tener cuidado, ya que la búsqueda podría ser peligrosa. Pero Louis y Antoine estaban decididos a encontrar la Luna Azul y no permitirían que nada los detuviera. Con una sensación de emoción y anticipación, los dos amigos abandonaron la habitación y se adentraron en las calles oscuras de París, en busca de la legendaria Luna Azul.