El modelo perfecto del amor

Ocho

Giselle

—Vamos, Giselle. Yo no dejé a una mujer débil, ¡Sé que puedes!

Mentalmente estaba en la playa o en mi cama. Pero en la realidad estoy en el GYM de Hector, con él como mi entrenador y dando de gritos.

—¡Hector, dame un respiro!

El aire se siente pesado al entrar a mis pulmones, no llevo ni tres horas estrenando pero me estoy muriendo a cada segundo que pasa.

—¡Giselle, no quiero quejas o subiré la intensidad!

El sudor me empapa, traigo un short y un top pero ambos estan húmedos.

Una hora después termino el entrenamiento y posiblemente también mis ganas de seguir.

Con mi toalla me limpio el sudor, camino hasta mi botella de agua y bebo una gran parte.

"¡No demasiada agua!

El grito me sobresalta, riego agua en mi pecho sin querer y largo un suspiro frustrado.

—¡Maldición, Hector! Tomate unas vacaciones.

—Me tomaré esas vacaciones cuando dejes de llorar, ve con Jena que te está esperando.

Lloriqueo un poco.

Voltea a verme, hace un gesto con sus dedos y los lleva hasta sus ojos y luego a mi.

—¡No dije nada!

Sostengo mis pocas cosas que tengo fuera y me muevo al salón de baile, esta repleto de  espejos en todas las paredes y barras de metal para el estiramiento o para lo que se necesitara.

—Hola, Jena. Hector anda de un humorcito, ¿eh?

Aprovecho para picarlo viendo que pasa por donde estamos, me gruñe y sigue su camino mientras escucho la risa de Jena.

—Dejalo, el pobre se entero que su hermana se casó con un tipo que no conoce.

—¿Qué no conoce él?

Ella niega mientras busca algo en su celular, música probablemente.

—Que ella no conoce.

Jadeo, y yo que me lamento con mi situación.

—Con razón.

—Si, hoy lo conocerá y todo eso, su hermana no sabe ni donde esconderse porque estaba hasta el cuello de ebria cuando pasó.

—No se por quien sentir más lástima...

—Yo diría que por tí, tienes un largo día.

Coloca música, el ritmo es bueno y alegre.

—Vamos, aun te esperan más horas.

Suspiro, espero poder salir con movilidad de aquí.

Suspiro, espero poder salir con movilidad de aquí

—¿Seguro que no quieres esperar en el coche?

—Si, además dijiste que no tardarías mucho.

—Eso espero, vamos que se hace más tarde.

Ya es entrada la noche, mi celular se había apagado ya hace horas y Sebastián seguía conmigo y no en casa.

La cosa fue que llevaba días que me quedaba en el GYM durante horas hasta que él llegara y terminara, nos íbamos a casa y listo. Por muy tarde llegaríamos a las 8:00 pm pero hoy a ambos se nos pasó la hora, papá marco para avisar que llegaría tarde y solo así nos dimos cuenta de la hora, justo cuando estábamos a medio camino llamo Crista a el celular de Sebastián diciendo que tenía una reunión de emergencia, así que eso explica el porqué estamos entrando a la sala de conferencias con una gelatina y un jugo que compre para ambos en una tienda de autoservicio.

Sebas se sienta al lado mío, mientras toma del popote de su jugo. Lo que me hacía recordar mucho a cuando tenía unos nueve años o menos.

Es inevitable no pensar en lo tierno que se ve.

Al llegar no nos tomamos tiempo de saludar ni de ver quien esta ahí, por lo que me sorprendo al ver a Nathan y Ethan.

—¿Buenas noches?

Más que un saludo las palabras suenan como pregunta.

Bostezo.

El par de amigos me regala una sonrisa mientras que Crista asiente y empieza a explicarnos porque nos hizo venir tan tarde.

—Como saben, StarYoung cumple dos décadas de estar en el mercado como medio de comunicación, una década desde que se introducio en el mercado de la moda y le va bastante. Esta juntando a las caras del momento, van a hacerlo en grande, será un evento que traerá muchas relaciones, contratos, lanzamientos y reconocimiento. Y ustedes están invitados.

—El evento es en menos de un mes, ¿Por qué ahora?

—¿No es un poco apresurado? Tu misma lo dijiste, será algo grande.

—Miren, ustedes estaban contemplados pero nada seguro —Esta vez el que habla es Nathan —Hasta que hace un par de días, se publicaron fotos de ustedes dos juntos. Gethan los pocisiono muy bien, todos hablan de ustedes y el que no vayan hablaría muy mal de ellos ¿cómo no los invitaron si son el tema del momento?

》Lo saben, por eso no solo los invitaron sino que les están ofreciendo un contrato muy beneficioso para todos, lo hacen como una "disculpa anticipada", si van tendrán que tomar un vuelo en menos de una semana. Los gastos corren por cuenta de ellos e incluye: ropa de su marca, hospedaje, vuelo, comida, etc. Pero deben de tomar una decisión y solo tiene hoy, porque ya son las 12 y mañana. Estas son una copia del contrato, leeanlo con calma y esperamos su respuesta. Vayan a casa, Ethan me mandas un mensaje cuando tengas una respuesta y Giselle, lo mismo con Crista.

Nathan termina, guarda sus cosas mientras Ethan se acerca lentamente.

—¿Quieren que los lleve a casa?

Hay algo magnético cuando dice eso porque me hace sentir bien, que le importo y a la vez que se interesa por mi hermano lo suficiente para tenerlo en cuenta pero también no me agrada la idea de que nos acompañe, es darle más confianza de la que estoy dispuesta.

Sebas voltea a verlo como diciendo "Ella manda, ella decide"

—No creo, venimos en el coche.

—Podemos dejarlo aquí, mañana paso por tí a la hora que necesites y venimos por él. ¿Qué dices?



#29470 en Novela romántica
#18566 en Otros
#2881 en Humor

En el texto hay: humor romance juvenil, romance drama

Editado: 20.01.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.