Siento mis zapatos todos mojados, no se cuanto tiempo llevo corriendo, solo se que quiero llegar ya, se que ya no estoy tan lejos. No me detengo, corro lo más rápido que puedo, sigo sin poder dejar de llorar, todo se ve tan borroso.
De la nada me tropiezo con un agujero y caigo sobre la calle, todas las cosas de mi mochila salen volando. Mierda, lo que me faltaba, ni siquiera me había percatado que tenia abierta la mochila. En seguida comienzo a recoger todo, alguien se acerca a recoger las cosas, pero no lo veo, no presto atención solo tomo mis cosas lo más rápido que puedo y salgo corriendo, sin importarme que me esté saliendo sangre de la pierna.
En seguida que llego al hospital busco a mi madre, pero no la encuentro, así que me acerco a recepción.
—Henry Miller, ¿Dónde esta?
—Permíteme un momento
Siento que empieza a tardar horas, se que no ha pasado nada, pero se está tardando tanto...
—Sigue en cirugía, pero lo llevarán a terapia intensiva cuando salga.
—¿Dónde es?
—Quinto piso, pero no puedes su...
No la escucho, subo corriendo por las escaleras, necesito llegar, se que no me verá, pero necesito estar ahí, necesito estar.
Enseguida que llego veo a mi madre sentada en la sala de espera, esta llorando.
—Mamá
—Hannah— voltea a verme enseguida, tiene los ojos hinchados, creo que he de verme igual, porque no he parado de llorar desde que la llame
—¿Cómo está?— digo mientras me siento a su lado
—No me han dicho nada, solo que esta en cirugía y que necesitaban un familiar para que llenará unos papeles, yo no se, es solo que, el me hablo y yo solo escuche ruido, yo no se, no se...
No logro entender bien lo que me dice, la veo realmente mal, se que nunca hemos sido unidas, pero creo que son esos momentos donde ambas nos necesitamos.
Decido tomarle la mano para que pueda contarme bien y pueda tranquilizarse un poco para que sepa que aquí estoy.
—¿Qué pasó?
—Me hablo por teléfono, me dijo que estaba pasando por ti, me dijo que quería ir a cenar conmigo esta noche, que quería pasar tiempo conmigo como pareja, le dije que si, que saliéramos que le quería decir algo, pero de la nada escuche solo mucho ruido, lo llame, le hable muchas veces, pero no respondía, deje de escucharlo, yo no supe, solo, solo escuche un golpe y no escuche nada más, yo...
Yo le iba a decir que aceptaba, que quería intentarlo, le iba a decir que si, le iba a decir que si.
No lo esperaba, me quedo atónita, es por eso que habían estado más unidos últimamente, por eso papá la buscaba, por eso mamá reía esa vez, él quería intentarlo otra vez, él quiere recuperarla, por eso ha actuado así últimamente, la última vez vi un ramo de flores en la cocina, fue él, él se las dio, le importa, le importa...
Mi mamá a comenzado a llorar de nuevo, no se que hacer, la veo realmente mal, a ella también le importa papá, quiere intentarlo otra vez, quiere hacerlo.
Porque no está aquí para escucharla decir eso, esto lo haría tan feliz, todo estaría mejor, ambos estarían bien, seríamos una mejor familia, tiene que estar bien, tiene que poder ver que sus esfuerzos están dando resultado, tiene que ver que lo está logrando. Tiene que hacerlo...
—¿Llamaste a Jessie?
—No perdón, es que no se, ahorita lo hago, es que no se que hacer, no se donde lo deje, yo...— veo como comienza a buscar su celular en su bolso, la veo tan mal
—Yo lo haré, quédate aquí
Me levanto para que mi madre no tenga que escuchar la llamada, necesita estar tranquila, él estará bien
—Bueno
—Jessie, estamos en el hospital
—¿Qué pasó?— dice asustada
—Es papá, tuvo un accidente, esta en cirugía, aun no sabemos nada, pero si quieres puedes tomar un taxi y venir, mamá te necesita
—Voy para allá— cuelga
Enseguida le mando la dirección por mensaje qué pueda llegar
—Ya le llame, viene para acá
—Gracias ¿Qué fue lo que te paso?— dice señalando mi pierna
—Me tropecé de camino acá, no es nada
—Deberías limpiar tu herida, te ayudo
—Estoy bien, no pasa nada
No digo nada más, decido solo buscar mis audífonos y perderme un segundo, lo necesito, ahorita no puede darme una crisis, no justo ahora. Mientras los busco en mi mochila veo que no esta mi libreta, era donde escribía, cuando comienzo a ponerme mal hago dibujos ahí o a veces solo escribo, ayuda a calmarme cuando no puedo escuchar música, me distrae. Sigo buscándola, pero no está, debí haberla dejado en la calle cuando se me cayo, no me di cuenta tenía tanta prisa que no me fije si había guardado todo.
Mierda.
Eso no importa ahorita, igual ya la doy por perdida, así que solo me coloco los audífonos y cierro los ojos.
[...]
—Te amo hannah
—Yo también papá
—Hanaah
—Hannah
De la nada abro los ojos asustada, estaba dormida. No se que en que momento me quedé dormida.
—Hannah ¿estas bien? Estabas llorando
Siento mis mejillas húmedas, no me di cuenta.
—Jessie llego hace un rato
Veo a Jessie sentada a un lado de mi madre, ambas están preocupadas, pero creo que en realidad las tres lo estamos.
—¿Han dicho algo?
Mi madre solo niego con la cabeza mientras se limpia las lágrimas.
—Familia Miller
—¡Si!
Las tres nos levantamos en seguida para escuchar lo que dirá la enfermera.
—El señor Miller acaba de salir de cirugía, pero aún se encuentra muy débil, tuvimos que entubarlo por el momento, no sabremos como serán las proximas horas, queda en el paciente seguir luchando
—¿Podemos verlo?
—Por ahora no, vendré en la noche para avisar si alguien se puede quedar con él, pero tendrá que ser solo una persona, todo depende de como responda las próximas horas.
—Entiendo, gracias
—Permiso
Comenzamos a llorar enseguida se fue la enfermera, salió de cirugía, pero aún está grave, tengo mucho miedo, lo reconozco, jamás había sentido tanto miedo como hoy, no tenía que ser él, ojalá fuera yo la que estuviera en su lugar, no puedo imaginarme estando sin él. No puedo