Capítulo 21

Al acercarse al pueblo Sebastián nota que los están invadiendo y fácilmente reconoce que es el  
ejército del rey Aros. 
-Hay un cambio de planes-dice Sebastián a su tribu-tenemos una guerra contra el ejército de  
Calcula. 
Y sorpresivamente comienzan a atacar frustrando los planes del rey Aros que ya estaba a pun- 
to de vencer.

Mientras la mayor parte de los Brigs, lucha fuera del castillo, Sebastián junto a Luna y algu- 
nos hombres logran entrar al castillo a filo de espada. 
Sebastián ve que van a matar a Dan. 
Dan había luchado contra el rey Aros, pero lamentablemente Dan nunca había sido bueno con  
la espada o no se había interesado lo suficiente en ella. Ahora Dan está en el suelo, sabe que  
llegó su tiempo, El rey Aros levanta su espada y la deja caer sobre Dan, pero la espada choca  
contra otra espada que le arrebata el momento con fuerza. Ahora la lucha es de Sebastián y  
luego de una ardua lucha vence al rey invasor. 
Dan se acerca a su hermano 
-¿Por qué me has salvado, si moría podrías haber sido el heredero al trono? 
-Nunca dije que quería ser rey, debías haber preguntado antes de mandarme a matar-dice  
Sebastián  
-¿Entonces por qué has vuelto?-dice Dan 
-Solo tienes algo que me pertenece, Leila, volvía por ella cuando vi que los invadían.- 
-Y qué pasa si no te la dejo-dice Dan 
Sebastián sonríe: 
-Tengo un ejército de salvajes allá afuera deseosos de más sangre- 
-Solo era broma hermano, solo me casaba con Leila por mi padre.-dice Dan 
-Hemos ganado-se escucha así gritando a los soldados de Carda. 
En eso el rey Octavio entra a donde Sebastián y lo abraza: 
-Pero que te sucedió? por qué desapareciste? 
Sebastián mira a Dan quien agacha la cabeza avergonzado de lo que intento hacer 
-Fui secuestrado por los Brigs -dice Sebastián mientras mira a Dan dándole otra oportunidad - 
y ya Dan sabe que somos hermanos- 
Dan entra en el salón de la boda anunciando a todos que han ganado la guerra: 
-En unos minutos continuará la boda -dice Dan-antes debo arreglar algunos términos con el  
rey Carlos.- 
El silencio permanece unos minutos en el salón, aún nadie sabe cómo vencieron. 
Dan conversa en privado con el rey Carlos: 
-Ya no me casaré con Leila-dice Dan 
-Pero tenemos un acuerdo-dice el rey Carlos

-El acuerdo continúa, Leila se casará con mi hermano Sebastián-dice Dan fríamente 
-¿Estás loco muchacho? ¿Crees que dejaré que mi única hija, una princesa de renombre se  
case con un bastardo?-dice el rey Carlos 
-Eso depende de su inteligencia majestad, ahora mi hermano es el jefe de los Brigs ,lo que le  
daré seguridad total a su ejército en caso de invasión, además... olvidaré la deuda de oro que  
ha acumulado durante 5 años con mi reino- 
-¿Pero...?-duda el rey Carlos 
-No me parece que ya tenga oro suficiente para pagarnos, sin esta deuda su reino se quitará  
un gran peso de encima-dice Dan sin mostrar ninguna sensibilidad-además creo que su hija  
siente admiración por mi hermano 
-Pues si es así...-dice el rey Carlos 
En unos minutos regresa Dan con el padre de la princesa  
-Ahora continuará la boda donde la dejamos, solo que quien se casará con Leila será mi her- 
mano: Sebastián, quien nos ha salvado hoy a todos-dice Dan dejando a la multitud en pleno  
asombro, incluso Leila queda sin palabras. 
Leila corre a su encuentro y se besan apasionadamente y Sebastián la toma en sus brazos y la  
lleva hacia el altar. 
-Por qué te fuiste?-le susurra la princesa mientras la lleva en brazos 
-¿Cofias en mí? 
-Sabes qué si-dice la princesa 
-Más tarde te contaré todo-dice Sebastián mientras llegan al altar. 
-Cómo iba, princesa Leila aceptas por esposo a Sebastián como te esposo para cuidarlo y res- 
petarlo en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza-dice quien dirige la cere- 
monia 
-Sí, acepto- 
-Y tu Sebastián aceptas a la princesa Leila como tu esposa para cuidarla y respetarla .. 
-Acepto- 
-Pues yo los declaro marido y mujer - 
Y Sebastián besa apasionadamente a su esposa y la saca en brazos del castillo y así comienza  
una larga y bella historia de amor .