Capítulo 6:
Rememorando viejos tiempos.
Aria.
—¿De dónde se conocen?
Por más que traté de hacerme la desinteresada con el tema. Mi cabeza es un torbellino de ideas por la situación.
¿Qué? Para mí es demasiado extraño ver al rarito socializar, y ¡con mi novio! Algo tiene que haber.
Chase me observa por el rabillo del ojo mientras enciende el auto. No dice nada, y yo me quedo en la expectativa.
—Fue hace mucho tiempo, ya ni recuerdo cómo. —dice un rato después, sé que está mintiendo.
—Está bien. Pero después no me preguntes nada si me encuentro a alguien en la calle, y me saluda con toda la confianza mientras que yo hago lo mismo con él y...
—A ver, señorita. —me señala y vuelve su vista a la carretera—. Eso es algo que le incumbe a él.
—¿Qué? ¿Por qué? —bien, eso es ridículo.
—Porque sí. —responde nada más.
Resoplo con fastidio y me tumbo dramáticamente en el espaldar del asiento.
—¿Él era el chico raro del que hablabas? —pregunta de pronto.
—¿Cómo lo supiste?
Me da una pequeña mirada y niega lentamente.
—Adiviné. —miente. Sé que es mentira, y también sé que él sabe que noté su farsa.
Pero no digo nada más, sé que él tampoco lo hará así que me dedico a observar mi celular.
Hasta que recuerdo un detalle.
—¿Cómo está Gael? —parece que vuelve a respirar ante el cambio de tema, ¿Qué rayos...?
—Cuando lo dejé seguía con el abogado de su padre. Se veía bien, es decir, normal. Aunque lo más probable es que estuviera fingiendo, lo conozco.
Suelto un pequeño suspiro y observo las calles a través de la ventana del auto.
Tengo que agradecer que todo el trayecto del estudio a mi casa es una vía privada donde los paparazzis no están permitidos porque si no, no sé qué sería de mí.
Estoy a punto de guardar el celular, pero escucho el llamado de este, el nombre de Sirly aparece en pantalla.
¿Qué quiere ahora?
Contesto, porque puede que sea algo importante.
O puede que no.
—¡Aria! ¿A que no adivinas? —se escucha demasiado feliz para ser ella, debe de pasar algo en serio importante.
—¿Qué ocurre?
—Me llamaron hace poco los directores de una película... dijeron que vieron el video tuyo cantando ¡Les fascinó!
Me quedo en la parte del video ¿qué video? Y es lo que le pregunto a Sirly por lo que me contesta.
—Uh... sí, ¿recuerdas el día del cumpleaños de tu amiguito Gael?
—¿Hace una semana? Claro que sí.
—¿Y recuerdas tambien que cantaste en la fiesta... como regalo?
—Mmjm... —ya veo el rumbo que está tomando la conversación, y no me gusta nada.
—Puede que te haya grabado... y se lo haya enviado a esos productores para tomarlo como una audición. —con el paso de las palabras, su voz se va volviendo más aguda.
Juro que de esta no sale.
—¡¿Por qué hiciste eso?!
—¡Porque tienes una voz angelical, niña! ¡Perfecta para ser la cantante principal del soundtrack de la película!
—¡No haré eso! ¡te volviste loca!
—¡Escucha! esto será perfecto para lanzar tu carrera como cantante...
—¡Yo no quiero ser cantante! —la interrumpo, y me doy cuenta que Chase me observa por el rabillo del ojo—. ¡Te he dicho miles de veces que no me gusta esa mierda de ser cantante!
—¡Mañana irás a esa reunión! ¡Punto!
—¡No eres mi jodida madre!
—¡No, soy tu jefa! —y cuelga.
No puedo creer que haya hecho eso ¿qué demonios le pasa? Ella sabe muy bien que odio con toda mi alma todo lo que tenga que ver con música y canciones, pero aun así se esfuerza en querer que lo haga.
Maldición.
—¿Nada va bien? —pregunta Chase luego de unos minutos.
—Sirly quiere que mañana vaya a una reunión con unos directores que me quieren para el soundtrack de una película o algo así.
—Y no quieres hacerlo —termina por mí—. ¿Podrías recordarme por qué no te gusta cantar? Si tu voz es hermosa.
—Lo sabes muy bien.
—Quiero que lo digas.
Bufo, pero aun así le contesto.
—Sabes que es por Sheila, que odio las comparaciones que hacen entre nosotras. Sabes que es porque si también entro al mundo del canto, la gente no parará de compararnos, y es lo que he tratado de evitar desde siempre.
Sheila es mi hermana. "Sheila Stuart" es la cantante reconocida a nivel mundial por sus "increíbles" -palabras de otros- canciones pop. Basura pop querrán decir.
Y no, no odio su música por ser de ella, si no por que el único género que usa es el pop.
¿Es que ahora nadie innova más que para el pop? Tantos géneros musicales en el mundo, y la gente solo se enfoca en lo mismo. Qué tontería.
Y sí, odio la música pop. Pero ese no es el punto de todo esto.
—Deja de pensar en los demás, cielo.
—Es muy fácil decirlo.
—Y hacerlo también lo es. Sabes que tienes una voz hermosa, tienes que aprovecharla.
Agradezco enormemente que lleguemos al edificio en el que vivo, porque lo menos que quiero es seguir con esta conversación.
Abro la puerta del vehículo y salgo de él, sin ni siquiera dirigirle palabra a Chase. Cosa por la cual me arrepiento de inmediato, él no tiene la culpa de nada.
Entonces me devuelvo al puesto vacío y me abalanzo a mi novio, quien tiene una sonrisa en su rostro por mi dramática salida. La cual se le borra al unir sus labios con los mios en un dulce beso.
—Hasta mañana. Y disculpa por ser tan amargada.
—Buenas noches, hermosa, y sabes perfectamente que estás disculpada —me da un caspo beso en los labios—. Solo dime que por lo menos vas a pensarlo.
—Buenas noches. —es lo único que le digo, un poco seca.
Y así, me encamino al edificio, agotada por completo.
Llego a mi departamento y saco mi celular del pequeño bolso para marcarle a Gael. Quien responde a los pocos segundos.
—¿Cómo estás? —le pregunto mientras dejo mis cosas en el sillón y me tiro en el otro, con dramatismo.