Capítulo 25

En la mañana siguiente

Jake: me acaban de avisar que tus padres ya llegaron. Ahora debemos de salir de tu recámara para escuchar lo que te tiene que decir tu madre.

Victoria: estoy lista para escucharla. Necesito pedirte que no me dejes sola, porque no se que esperar de ella y sobre todo nadie cambia de la noche a la mañana.

Jake: estaré a tu lado igual que siempre. Solamente que si dice algo desagradable se tendrá que ir de nuestra casa, nada más que esta será la única oportunidad que tendrá tu madre de estar cerca de ti.

Victoria: necesitare escucharla para saber si esta arrepentida realmente. Recuerda que no me puede engañar y que también puedo percibir sus sentimientos.

Jake: la obscuridad de tus ojos hizo que desarrollaras ese sentido. Además, tenias que saber lo que pasaba a tu alrededor a través de esta manera.

Él toma la mano de Victoria para salir de su recámara, ellos bajan las escaleras con mucho cuidado. Ella podía escuchar las voces de sus padres en la sala y cuando llegan los saludan para después tomar asiento.

Amaya: he venido aquí a pedirle perdón a mi hija. Porque la única que fue una mala madre fui yo y lamento no haber sido la madre que necesitabas.

Victoria: es que no sabias como tratarme y se que fue difícil de aceptar que tuviste una hija ciega. Nada más que nadie esperaba que naciera con esta discapacidad.

Amaya: sentías mi rechazo desde que eras una niña y eso nunca me lo voy a perdonar. Siempre me necesitaste y yo me negaba a cuidarte.

Victoria: siempre estuvo mi nana a mi lado. Ella tuvo la paciencia de cuidarte, aunque necesitaba tu cariño y que me quisieras tan siquiera un poco.

Amaya: por supuesto que te quiero. Necesito que me dejes estar a tu lado para poder demostrarle, pero antes de eso quiero que me perdones.

Victoria: siento que no tengo nada que perdonarte. Porque de todos modos eres mi madre y sobre todo los necesitare a ustedes a mi lado.

Amaya: entonces organizar tu boda debe de ser lo más importante y de eso se encargará tu madre. Además, no quiero que te preocupes por nada, ya que quiero que estés tranquila.

Victoria: muchas gracias, madre. Debes de saber que me casare por amor con mi prometido y que mi discapacidad no fue un impedimento para que el me amara.

Amaya: espero que eso sea así. No quiero que mi niña vuelva a llorar por la culpa de nadie y si no está seguro de casarse será mejor que hable con nosotros antes de que sea demasiado tarde.

Jake: estoy seguro de casarme con su hija. Siempre he sido una persona demasiado centrada y se que tome la decisión correcta de casarme con Victoria, pero seré también el esposo que ella merece y la amare, así que lo que menos debe de tener dudas de mi amor su hija. El amor para mi es algo que quise tener y solo cuando la conocí lo pude sentir y ahora espero que este más tranquila con lo que le acabo de decir.