El principe y la Hechicera

7. LA DOLOROSA VERDAD

La mañana del dia siguiente de la bofetada, Edgar desperto nervioso y con nauseas, tenia miedo de ir a trabajar por si la posadera le echaba o si volveria a pegarle, pero hizo acopio de todo su valor y bajo las escaleras, la posada ya estaba repleta de gente, pero en esta ocasion estaba llena de soldados, muchos parecian heridos y otros cansados sucios, Edgar asombrado y soprendido se acerco a la posadera para hablar con ella, la encontro tras la barra mirando de mala gana a los soldados.

-que ha pasado, por que estan todos estos soldados aqui.

ella se giro y en voz baja le contesto.

-no tengo ni idea, esta mañana temprano cuando fui abrir me los encontre en la entrada, mira donde van todos nuestros impuestos, a esto hemos llegado, a luchar unos contra otros, que desperdicio.

Edgar noto en su voz ira contenida y rabia por lo que estaba sucediendo, de repente en la posada entro alguien que Edgar conocia muy bien, su entrenador, quien le instruyo en el arte de la guerra y la lucha, con una armadura lujosa y poderosa, se hizo paso entre sus hombres, apoyo el hombro sobre la barra con condescendia y sin mirar a la posadera y a Edgar, le pido una jarra de cerveza, la posadera se la sirvio y se la dejo con bursquedad encima de la barra, pero el ni se inmuto y Edgar vio como bebia de un trago todo el contenido, cuando acabo dejo la jarra bruscamente y con violencia en la barra y se dirigio a sus hombres.

-Mis guerreros, hoy hemos perdido una batalla pero no la guerra, volveremos a intentarlo en una semana, asi que prepararos bien, por que no quiero volver aqui derrotado de nuevo, fortaleceros y dentro de una semana volveremos a Astarot y la conquitaremos.

Todos y cada uno de los hombres vitoreo gritando a su capitan y alzando las jarras chocandolas unos contra otros vertiendo parte del contenido sobre el suelo Edgar vio que su entrenador alzaba la mano para pedir silencio y los soldados inmediatamente se callaron y añadio por ulrimo algo que queria dejar claro.

-Esta noche podreis beber y divertiros, pero mañana quiero a ver a todos temprano para los entrenamientos y alguno iran a reclutar a mas soldados, necesitamos hombres fuertes y valientes a nuestras filas.

y despues de esas ultimas palabras se marcho, dejando a todos sus hombres alli, pero en cuanto la noche callo, la posada quedo vacia, Edgar tuvo que limpiar toda la noche aquel estropicio que los soldados habian provocado, cuando por fin acabo, se dejo caer en una silla agotado, y se dispuso a cerrar la posada cuando de repente tres hombres entraron llevando an brazos a Eleodora estaba mal herida e inconsciente, Edgar se aparto asustado y nervioso, se acerco a los hombres para hablar con ellos y averiguar que habia pasado, uno de ellos estaba mirando y Edgar se acerco.

-oye que ha pasado, por que esta asi.

El hombre al mirarlo, vio en su mirada desprecio y odio, porsupuesto no obtuvo respuesta, solo aquella mirada y su silencio, se alejo y la posadera que fue encontrada durmiendo, bajo a toda prisa y se acerco hacia Eleodora, dio instrucciones a los hombres de todo lo que debian traerle para poder curarla, los hombres corrieron por toda la posada tayendole mantas, agua caliente, agujas y muchas otras cosas que Edgar no sabia que eran, durante horas Edgar escucho gritos y lamentos de Eleodora, el se mantenia a distancia ya que los hombres no dejaban de mirarle para que no se acercara, y cuando ya estaba amaneciendo, la posadera se fue hacia la barra y como si hubiera estado corriendo durante horas, se derrumbo tras la barra, ella agotada por la tension y el esfuerzo que habia hecho Edgar fue hacia ella para ver si le contaba algo de lo sucedido.

-Que ha ocurrido, por que esta herida.

La posadera lo miro y solo se encongio de hombros, Edgar empezaba a estar harto de esta situacion y se fue hacia Eleodora.

-Quiero saber que narices ha pasado, quien te ha hecho esto, por que estas asi.

Eleodora que a duras penas se mantenia despierta, lo agarro con fuerza de la camisa y tiro para atraelo hacia ella y entonces les escupio en la cara, Edgar se aparto con furia de un tiron y se marcho cabreado, ese dia estuvo paseando nerviosamente por la habitacion, hablando y maldiciendo, pero harto de todo aquello salio a la calle, ya era de noche y las calles estaban vacias, solo algunos soldados que paseaban haciendo sus rondas, eran las unicas personas que caminaban por las calles, cuando llego al final de la ciudad a la entrada y vio ante sus ojos la llanura que se extendia ante el, en aquel momento penso en desaparecer de verdad en irse y no volver jamas, pero penso que si se iba nunca volveria a ser el mismo de antes y que dejaria de existir, asi que dio media vuelta y regreso a la posada, al entrar vio a todos cuchicheando, Edgar en esta ocasion los ignoro y se fue tras la barra pero la posadera no estaba asi que fue a las habitaciones y al entrar en donde estaba ella la enconto derrumbada con las manos en la cara y llorando al escuchar la puerta se limpio las lagrimas y se recompuso.

- Por que has entrado sin llamar, que quieres.

-Lo siento, no era mi intencion importunarte, pero he visto que no estabas abajo y quise ver si estabas bien, que ha pasado, por que nadie me cuenta nada.

 La posadera se puso de pie y estuvo mirando por la ventana y de repente sin dirigirle la mirada Ella le hablo a Edgar.

-Eleodora lucha por sus gentes, a veces con tanto esfuerzo, que si no fuera por la lealtad de sus hombres, ahora mismo ella habria muerto ya en varias ocasiones, no entiendes lo que significa Erundil para ella, quiere restaurar el antiguo reinado y derrocar al rey Edgar, pero ella lucha y lucha y cada dia pierde mas que gana, pero yo se la verdadera razon por la que ella lucha, he ocultado ese secreto desde el dia en que ella entro en mi posada en busca de ayuda y verla cada dia luchar y perder, me destroza el alma, su cuerpo antes puro y perfecto, ahora esta lleno de cicatrices no solo en el exterior si no en su interior, yo la conoci como una chiquilla asustada y llorona, pero con el paso del tiempo a crecido y madurado y se ha convertido en toda una mujer, pero a que precio, su vida ahora esta marcada por la supervivencia, la guerra continua y la venganza...



#18990 en Fantasía
#4016 en Magia

En el texto hay: fantasia, amor, magia

Editado: 10.03.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.