Capítulo 16

Cuando estaba en quinta hora me di cuenta de los molestos y desbordantes deberes que tenía pendientes,faltar una semana en la universidad era como faltar un mes. Me distraje golpeando la lapicera sobre el libreto donde sacaba notas mientras el profesor de química hablaba sobre los compuestos y agregaba más tarea a mí mochila.Una figura familiar que se sentaba en la segunda fila del frente de la case con quien lamentablemente compratía la clase, era Virgina.Me encontraba en la cuarta fila pero aún así veía claramente cuando se tocaba y movía su alta coleta, era exasperante y muy común en ella.El resto de la clase resultaba molesta en ciertas ocasiones cuando la mencionada no dejaba hablar a los demás y hablaba sobre ellos,siempre queriendo ser el centro de atención y torturando a quellos que no esten de su lado. Era algo así con la "chica mala" que no quieres involucrarte ,no nos agradabamos pero le dolia que fuera la mejor amiga de su novio, sabía bien que esa era una carta de doble filo,pero por el momento no había hecho más que decirle a Rubén que no me agradaba,cosa que era cierto y tampoco estaba de acuerdo en que salieran pero esa era su decisión,no la mía.En fin cada uno tiene sus gustos aunque algunos den susto.
Recordé que no quería que fueramos amigas sino que intentaramos llevarnos bien,lo voy a intentar pero no puedo prometer nada,quien sabe tal vez se me escape la mano y esta golpee su rostro perfectamente cuidado.

La campana sonó y todo el mundo salió como estampida de allí,alunos pocos permaneciamos en el salón.Recogí mis cosas y cuando iba por la segunda fila Virginia tropezó y su bolso fucsia que era muy chillón para mis ojos cayó de manera que se desparramo todo frente a mí. Aleje todos los prejucios que le tenía y sin pensar mucho me agache para ayudarla a juntar sus cosas cosa que esto le sorprendió pero no rechazó mi ayuda sin embargo el rato que nos tomo recojer todo no quito su mirada extrañada. Cuando le di los últimos cuadernos en la mano los guardo y se alejo sin decir nada, en realidad ninguna dijo nada pero eso fué bastante incómodo, por que me provaba nervios las cosas que ella pudiera llegar a decir en ese momento así que también estaba sorprendida.

Cuando al fin pude salir del salón dejando atrás el estres del día me dirigí hasta la zona de los baños que se encontraba casi en el otro extremo del edificio.En el camino me parecía que alguien me seguía pero cada vez que me volteaba no había nadie allí,en ese momento todo el mundo se encontraba en clase y como la quinta hora fué la última de mi día no me resulto extraño.Una vez en el baño suspiré de alivio.Normalmente extrañaba las clases cuando faltaba no es que ame estudiar,soy una alumna promedio a buena pero cuando me quedaba en casa esos días era terrible, no hacía más que dormir y ponerme al día con los deberes por que si salía de mi habitación siempre habría algún problema.

Me metí en un cubículo mientras hacía lo mio alguien entro en el baño,se lavó las manos y no escuche que se volviera a irse o usara el retrete. Tiré la cadena y salí de ahí,la persona seguía parada allí donde se había lavado las manos lo curioso es que iba vestida de negro y llevaba un abrigo con capucha  negra así que apenas pude definir que tenía una figura femenina.Esta se giro y me miró fijamente.

Emili

La furia que creía apagada se encendió como un incendió

— ¡¿Qué haces aquí ?! ¡me seguite! —le grité

Ella sonrió

—Tuve que escabullirme hasta aquí y me dices eso, ¿que pasa ahora te crees mucho por encontrar a tu familia? — Esa era la habitual perra con quien creía compartir sangre,que ilusa.
Me acerque rápido y la tome del cuello con una mano mientras la veía sin apartar los ojos, resultaba útil lo que aprendí recientemente en combate, sin importar la altura o el peso ella se veía acorralada como un conejito.

—¿Qué quieres?

—Haz jodido a mi familia,tubimos que huir pero volví por tí. Si aún cumplimos nuestra parte todo irá bien— el odio brillaba en sus ojos, alguna vez desee que me vieran con cariño y estaba tan ciega que no noté que siempre veían con odio.

Me sentí abrumada, cuando algo me tomo por el cuello, parecía ser agua.Había olvidado que su habilidad se trataba de un elemento. No todas las habilidades eran de los elementos,com o agua, tierra,viento,fuego. La mía tenía que ver al parecer con la electricidad ,por lo tanto era una sobre habilidad. Todo esto lo sabía por que me había leido un monton de libros desde niña con la esperanza de conocer bien mi futura habilidad sin embargo como es de imaginar no todas estan en los libros,la mía tampoco.Mientras el agua que me presionaba el cuello se elevaba hasta arriba de alguna manera se metió por mi boca cuando la abrí para respirar y ahora me ahogaba con el agua que había llegado hasta los pulmones,sin saber como las chispas azules aparecieron, sentía la calidez que irradiaban y estas se hacían cada vez más fuertes hasta que ella me soltó por el dolor que impartían estas contra su cuello. Nos detuvimos mientras nos veíamos con desconfianza y respirabamos con dificultad,estaba segura que iba a matarme aquí mismo si no hacia algo.
Entonces lo inesperado sucedió,entró Virginia en el baño y nos vió con sospecha mientras iba a un cubículo.

Aprovechando la distracción agregué:

—No pienso ir a ningún lado,primero muerta— mire al rededor— No me digas,viniste sola...
Virginia sabía dos cosas, la primera que eramos hermanas, la segunda no nos llevabamos bien, y ahora agregando una tercera, ahora tenía que guardar un secreto.
Emili me miro enojada mientras se acomodaba la ropa para parecer decente
—Bien, la proximá vez no voy a ser tan amable— dicho esto se largo

—Yo tampoco— le grité mientras la puerta del baño por unos segundos permanecía abierta .
Me miré al espejo, los tenía alborotados y mis manos se movían  de manera nerviosa.Me sentía dolida ,no podía olvidar los años que viví con ellos y aunque no compartieramos los mejores momentos hubieron algunos recuerdos lindos que teníamos de niñas cuando solíamos ir al parque seguido cuando aún eramos inocentes y no habían implantado la semilla avariciosa del legado y toda esa porquería. Virginia salió del cubiculo y se paro a mi lado para lavarse las manos, la mire por el espejo.