El que alguna vez vivió conmigo

Cap 17: No quiero irme.

Cap 17: No quiero irme.

 

Liam.

 

Sábado estaba en la casa luego de que Emma se fuera a ver a sus amigas, apenas ví que Emma se iba me derrumbé en el suelo y empecé a llorar.

 

—!¿Por qué?¡ —No quiero irme.

 

—Liam.

 

De nuevo su voz.

 

—Déjame quedarme, esto duele.

 

—Liam.

 

—Esté era mi castigo enamorarme  para luego decirle adiós. —No podía, no quería.

 

—Liam es hora de descansar.

 

—!Y SI NO QUIERO¡

 

Vi su figura acercarse a mi, el hombre que me castigó por mi forma de actuar.

 

—Lo hiciste mejor de lo que pensé. Ella te ama.

 

—No… si ella me necesita déjame aquí. —Las lágrimas no paraban de brotar.

 

—Ella ya lo encontró.

 

—Y ¿por qué no era yo?

 

—Tu le recordaste el amor, ya cumpliste tu función en su vida y ella en la tuya, es hora.

 

—Por favor no.

 

—Te están esperando Liam.

 

—¿Quién es tan importante para dejar a Emma?

 

Me mostró una imagen de mi hermana con Puma.

 

Oh no.

 

Por favor, ellos no.

 

—Dejame un día más para despedirme.

 

—Bueno.

 

—¿Estás seguro de que ella estará bien sin mi?

 

—Si, tal vez no todo sea felicidad, pero encontró a quien será su compañero toda la vida. —Él estaba tan tranquilo mientras yo apenas podía hablar.

 

—La amo, no es fácil decirle… adiós.

 

—Pero lo harás.

 

—El castigo era para mi no para ella.

 

—Exacto ese era tu castigo, no era solo hacer que te llevaras bien con alguien. Era ver como te encariñas con alguien como tantas personas en vida se encariñaron contigo y luego verlos sufrir por tu castigo como tu hiciste sufrir a tantos.

 

—¿Quienes?

 

—Tu familia.

 

—Ya viene Emma.

 

Cuando él me dijo eso de inmediato sequé mis lágrimas y me pare.

 

—Hola Emma.

 

DOMINGO.

 

—Te ves hermosa.

 

—Gracias Liam.

 

La abrace y la bese aprovechando que sería la última… Maldición no quería que fuera la última.

 

—Adiós.

 

—Adiós Liam, cualquier cosa me llamas.

 

Cuando ella salió de casa una lágrima se escurre por mi mejilla mientras recuerdo todo:

 

Cuando la moleste con las ollas.

 

Cuando nos peleamos y estuve todo el día sin dejar de mirarla.

 

Cuando Abigail la trato mal y mi sangre hirvió.

 

Cuántas veces la había consolado de todo.

 

Pero hoy tenía que decirle adiós no sería capaz de mirarla a sus hermosos ojos rosas y decirle adiós, pero hoy me desprendo de una parte crucial en todo.

 

Gracias por todo Emma por aguantarme, por quererme, por no hacerme el feo y por recordarme que la bondad de las personas existe y tu eres una persona que cualquiera que conociera nunca querría alejarse de tí.

 

Emma perdóname por hacer esto quiero que sepas que lo fuiste  todo y aunque tal vez yo no fui todo para ti me encargare de que si lo fui dejar de serlo de la forma menos dolorosa.

 

Listo había terminado de alistar todo para ella así que.

 

—¿Estás listo?

 

—Si, pero ¿puedo pedirte un último favor?

 




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