Capitulo 1.

Eran la seis y media de la mañana y el primer gallo canta al despertar, el sol que empieza a correr por la ventana de Emma y junto a él suena el despertador. 

Para la niña era mas que suficiente saber que era su cumpleaños para levantarse de la cama, su tío German y su prima Keira quiza hayan estado recordandoselo desde el mes pasado y como si no fuera suficiente tomar un canasto e ir a cosechar se habia vuelto su dia a dia desde que habia cumplido quince pues cada mañana la enviaban a buscar fresas y moras al pequeño huerto que habia al otro lado de la cabaña, y para no aburrirse haciendo un trabajo tan monotono como levantar fruta del suelo le pedia a su tía Irma que la acompañara y daba la excusa de miedo al bosque.

Emma agarro el abrigo de tela delgada que habia colgado al lado de su cama la noche anterior para cubrirse de la niebla de la mañana, se puso sus pantuflas un tanto viejas que le dieron en su treceavo cumpleaños, agarro su cabello con una pequeña orquilla y se levanto para abrir la ventana y deja que el sol entrara por completo a su habitacion. 

La mañana se veia mas intensa que las otras veces, los pajaros cantaban un poco mas y las flores habian florecido completamente. 

Volteo para entrar a la ducha y tocan la puerta una vez, dos veces y...

-No puede ser- dice la niña en voz baja.

Nunca habia tenido problemas con cumplir años, de hecho saber que era mas grande cada vez que le cantaban frente a un pastel y que podia ir al pueblo del que tanto hablaba su familia era curioso para ella y cada año que pasaba tenia la esperanza de poder ir, pero hoy cumplia los preciados dieciseis años y sus tíos como su prima habian estado emocionados mas que ella pero en sus gustos no estaba festejar en grande y presentia que el pastel que iba a entrar por esa puerta lo era asi que sono otro golpe, Emma se sento en la cama y dijo:

-Siga

A su vez entra el tio German con la tia Irma cantando la cancion que cantaban los años anteriores ese mismo dia y con ellos cargando un...

-No era necesario, esta precioso, gracias- Dice Emma mirando el pastel de 3 pisos con blanco y rosa a su alrededor.

-¡claro que si lo era! - dice Irma- Era muy necesario, hoy cumples dieciseis, ¿sabes lo que significa?

La tía Irma era de piel mestiza y labios gruesos, su cabello era negro y ondulado pero lo tenia esa mañana recogido y caian 3 mechones alrededor de su frente, tenia una figura delgada y era alta de estatura. Cuando Emma cumplio los 6 años le enseño a leer su primer libro.

Habia estado en varias etapas del crecimiento de Emma, como en su primera menstruacion y su primer maquillaje, aunque muy pocas veces la niña lo hacia.

-¿Me dejaran ir al pueblo?

-Cazaras a un lobo, ¡Por fin! ¿no te emociona?-dice German

German era su tio y uno de sus mejores aliados para la caza, aunque no es que tuviera muchos, era de estatura alta y gruesa, tenia barba y cabello negro, su piel era un poco mas morena que la de Irma, sus ojos eran grises y tenia una cicatriz al lado del ojo derecho y una en el antebrazo izquierdo, Emma en muchas ocasiones habia preguntado las razones de porque las tenia y su respuesta era:

- cuando seas grande te contare. 

Aunque su tio siempre habia sido un completo misterio para ella, era su compañero de tardes, caza y deporte y eso era suficiente.

Emma los mira con escepticismo y agrega:

-Pero ya he cazado a muchos ciervos...

-Hoy cazaras a un lobo, mas emocionante no?- La interrumpe Irma

-Si, creo que si.

-Entonces cambiate y te esperamos abajo para el desayuno, creo que Keira se esta esforzando-dice German oliendo fuera de la habitacion dos huevos quemados y oyendo a Keira gritarle a una gallina que ponga otro huevo ¡por favor!

Emma sonrie un tanto y asiente. 

Cuando sus dos tíos salieron del cuarto y cerraron la puerta solo miro al espejo, dio un largo suspiro y se aventuro a la ducha para tener otro emocionante dia buscando fresas y moras o algo diferente a las fresas y moras, quiza mangos y limones, que emocionante.