El Reino de los Mercenarios: La princesa Violeta

Capítulo 13

La prueba final se estaba llevando a cabo en el último día de la semana.

Violeta estaba parada dentro de la habitación donde aprendió a hacer barreras, y el instructor que le enseñó estaba al otro extremo, junto al alto mando Theobald.

De un momento a otro Theobald creó una esfera de luz azul y la princesa se puso en posición defensiva, estiró ambas manos al frente y una barrera circular color violeta apareció, tan grande como su cuerpo.

El alto mando disparó la esfera, la cual se dirigió a gran velocidad gracias a la onda expansiva y chocó de lleno con la barrera de Violeta. El choque hizo un pequeño estruendo y la luz se dispersó, mientras que Violeta continuó con la barrera ilesa.

En ese momento Violeta pensó que la prueba de la barrera había terminado, pero se sorprendió al notar que Theobald creó otra esfera de luz. Así que se concentró nuevamente para no perder su barrera.

En el siguiente disparo, la barrera de Violeta se agrietó, y en el tercero, esta se rompió en trocitos y la energía se dispersó, pero la muchacha no recibió daño alguno.

—Has recibido tres de mis disparos —señaló Theobald—, felicidades.

—¡Gracias! —Violeta se animó mucho al oír esas palabras.

Al ella salir de la habitación, llamaron a Ángel, pues ella había sido la primera en entrar.

Todas las pruebas se realizarían en el mismo día y probarían a cada uno de los integrantes por separado. Ya se había acabado la libertad de pelear entre participantes y por lo tanto el ambiente se había calmado un poco, pero igual no se hablaban entre sí y los grupos que se habían formado continuaban igual.

Violeta se puso al lado de Alan y este la saludó animado.

—¿Cómo te fue?

—Muy bien, ellos dicen que con aguantar un disparo es suficiente, pero lanzarán disparos hasta que se rompa tu barrera, así que no te puedes relajar. Yo solo pude aguantar tres disparos, pero me felicitaron —dijo sonriendo.

—Genial, espero yo aguantar al menos el primero.

—Lo lograrás, confío en ti.

—Espero no defraudarte —las palabras de Violeta animaban a Alan siempre que él se encontraba nervioso, así que se sentía agradecido de tenerla como amiga.

El tiempo pasó y todos los participantes hicieron la prueba de las barreras, Ángel aguantó 3 disparos al igual que Violeta. Ezio y Clara aguantaron dos. Néstor llegó a aguantar 5 disparos y entre los demás participantes, 3 no pudieron aguantar el disparo, 1 no pudo crear la barrera y los últimos 3 lograron aguantar solo 1 disparo, Alan entre estos últimos.

El espadachín salió con una cara de felicidad y abrazó a Violeta, pero luego se le despegó y se disculpó.

—Está bien —Violeta lo abrazó nuevamente—. Te lo mereces.

La felicidad entre ellos duró solo unos momentos, pues pronto empezaron las demás pruebas.

La del maestro Kúgel, que había enseñado a crear expansiones, consistía en realizar un disparo que choque contra un objetivo al otro extremo de la habitación, dicho objetivo era un muñeco de paja.

Violeta juntó ambas manos, creó una esfera lumínica y apuntó hacia el objetivo. A ambos lados del muñeco estaban Kúgel y Theobald, así que la princesa sabía que no podía fallar. Se concentró, su esfera de luz se volvió más grande, reunió más energía en la palma de sus manos y seguidamente la expulsó toda al mismo tiempo. Eso hizo que se creara una onda circular entre sus manos que empujó la bola de energía con mucha potencia hacia el muñeco. Esto era un disparo.

La esfera siguió hacia adelante dejando una estela lumínica y chocó fuertemente contra el área del estómago del muñeco de paja.

—¡Sii! —Violeta saltó de alegría, pero luego se calmó al ver a los dos hombres mirándola con caras serias—. ¿Pasé la prueba? —preguntó dudosa.

Luego de la pregunta Kúgel hizo una de sus poses raras y asintió.

—Puedes salir, dile a Ángel que pase —mandó.

La muchacha salió con una sonrisa de oreja a oreja, fue hacia donde estaba Ángel y le dijo el mandado. Este último se extrañó de la amabilidad de Violeta, pues él la veía como una enemiga, pero reaccionó a su dulzura y le sonrió.

—Gracias por decírmelo, ahora voy.

La princesa se percató de que estaba sonriendo, se puso seria y se dirigió hacia su amigo Alan.

Ella, en vez de estar tensa, como estaban la mayoría, se encontraba cada vez más alegre. Pero Alan emitía cierto miedo a su alrededor y la princesa no pudo contenerse a ayudarlo.

En esta ocasión le agarró de las manos y liberó un poco de su aura para que se calmara. Pero él se sonrojó, se despegó de ella y se tapó la cara.

—No hagas eso tan de repente —dijo entre dientes—. Entiendo que me quieras animar, pero...

Alan dejó de hablar al sentir como la mano de Violeta tocó su mejilla, la vio y ella estaba sonriéndole. No era una sonrisa lujuriosa como la que ponía Rubí, sino más bien, se trataba de una cara de preocupación, como la que pone una madre cuando su hijo va al campo de batalla.

—Recuerda, crear la esfera, apuntar, concentrar más energía en tus manos y disparar. Debes lograrlo, ambos debemos ser mercenarios.

Tras eso pasaron un buen rato sin hablarse el uno al otro mientras los demás participantes hacían la prueba uno por uno. Violeta se había sentado en el suelo y Alan estaba dando vueltas por el escenario, aún más nervioso que antes. Fue así, hasta que lo llamaron.

Al llegar a la habitación vio al muñeco de paja intacto, este no se había destruído a pesar de que todos los participantes anteriores le habían golpeado, y eso le dio curiosidad.

—¿Cómo es que el muñeco está en buena condición? —se le salió la pregunta.

Kúgel alzó la ceja y lo vio con algo de extrañeza, pues esa era una pregunta que no esperaba que le hicieran.

—Es gracias a esto —el instructor alzó la mano posando y del muñeco salió una fina capa de energía mágica color blanca, que lo estaba envolviendo. La energía entonces se reunió en su mano y se transformó en una esfera de luz—. Esta técnica se llama envoltura mágica, se logra manipulando nuestra energía para que un objeto o una persona que esté cerca de nosotros sea resistente a la magia —volvió a crear la envoltura que cubrió al muñeco—. En tu caso, podrías usarlo para envolver tu espada de magia, así esta no sería destrozada fácilmente por la magia de tu rival.



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En el texto hay: accion, amor, fantasia aventura reinos

Editado: 31.01.2023

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