El rey que convertira a la prostituta en emperatriz

CAPITULO 1

Los gemidos de la habitación continua me indicaban que la jornada de trabajo no se había acabado, pero el anterior cliente me había dejado cansada, voy a la ducha para lavar mi cuerpo que se sentía pegajoso, hoy tenía 20 monedas extras, serviría para pagar la comisión por dejarme venderme, y el alquiler donde vivía.

—¿Lottie? — Habla una chica desde el otro lado de la habitación, por la voz tenue suponía que era una de mis colegas.

Salgo con una toalla cubriendo mi cuerpo para encontrarme con ella, solo vestía con su ropa interior y se miraba que otra vez la habían lastimado, los clientes a veces no entendían que no éramos de su propiedad y al mezclar el alcohol con las drogas se alteraban como vacas, que durante el sexo no dudaban en golpearnos.

—¿Quién fue? — Le digo sacando de un cajón un paño para mojarlo con los hielos de donde poníamos la champaña barata, para ponerla en su labio, Alice era su identidad dentro del burdel, ella era una chica bastante pequeña 1.50 aproximadamente, cabello miel y ojos color café oscuros, no tenía más de 22 años, pero sus manos daban otra edad.

—El Vizconde de Wright, su esposa se dio cuenta de que me paga, aunque no tengamos nada que hacer — Solo le había dado una bofetada —. Me pidió una última noche, y como de costumbre lo comencé a seducir y me abofeteo tan duro que no me dieron ganas de seguir...

—¿Qué hizo Lady Ericka al respecto? — Pregunto terminando de limpiar el área.

—Que eran gajes del oficio, como cubrí la comisión puedo irme a casa — Saco del vestidor mi disfraz de la siguiente hora —. Tengo un examen de derecho romano en 2 días...

—Te ira bien, solo no dejes de estudiar — Yo no había podido entrar a estudiar por el hecho de que no contaba con el dinero y tenía una hermana menor que cuidar, pero siempre había querido ser contadora, y me daba gusto que Alice estudiará para ser abogada, aunque como mujer ella será rechazada.

—Ya me iré a casa, gracias por el cuidado — Me deja 2 monedas de oro —. Eso es por la atención.

Al principio me ofendía, pero ahora común pues todo tenía un precio.

Al salir de la habitación, me pongo el corsé habitual con su respectiva ropa interior, trenzo mi cabello de lado, mientras me maquillo la música indica que ya era la salida, todas las de 25 estábamos esperando nuestra salida.

—¿Y Morgana? — Pregunto al no verla encabezando la fila.

—¿No te enteraste? En su vientre carga al primer duque de la familia Williams — Eso era habitual entre las damas de compañía, pero era un escándalo, a que ella siempre será recordada al cargar un bastardo.

—Eso la convierte a ella, en la amante oficial — Pregunta otra chica del fondo, por su ropa bastante conservadora suponía que era una de las nuevas, su ropa contrastaba muy bien con el fondo, cuadros de las antiguas meretrices y paredes rojas con líneas negras.

—Para nada, ella será la primera esposa, eso la convierte a ella en duquesa — Eso era aún peor, pues al entrar en el circulo social de clase alta, se descubriría su pasado.

—¿Si descubren que ella fue una...? — Insinúa.

—Nosotras no la conocemos y ella jamás trabajo aquí — Nos indica Lady Ericka, jalándome del brazo poniéndome al final de todas, estaba nerviosa —. Debido a lo que paso Alice, los hombres tendrán mascara, ustedes tendrán que seducirlos ¿Lottie puedes cantar?

Asiento con la cabeza, ella me acaricia la cabeza, mientras las luces se apagan y una ilumina a las chicas.

"No creo que hayan conocido a chicas más hermosas que mis niñas" Se vanagloria así misma, Lady Ericka era una mujer no tan vieja, pero era hermosa y amaba esto "Les presento a las bellezas del reino"

Mis compañeras caminan riéndose, entre los hombres, besándolos y manchándoles de pintalabios rojo carmín, y eso no es todo.

"Un momento de silencio, por lo que viene la esperada flor de loto de la nación, Lottie"

Sonrió al entrar con los chiflidos de los hombres, mis compañeras sentadas en las piernas de sus presas.

"Fly me to the moon"

Canto esa parte mientras bajo las escaleras, era mi canción favorita y no dude en aprendérmela para ganar unas monedas extras, en la multitud veo a un hombre que me llama la atención, así que ese el que escojo para mí.

"Let me play among the stars"

Me acerco para sentarme en sus piernas, sentía un aura amenazadora de su acompañante, supongo que no venía por las mujeres, pero al ver cómo me toma de la pierna, más exactamente del muslo, con mi mano libre toco su cabello negro oscuro rizado mientras lo acaricio.

Al tratar de levantarme me agarra fuerte, solo basto una mirada, para que Lady Ericka, se diera cuenta.

—Caballeros, comenzamos la subasta de la dulce y delicada flor de loto, iniciamos la subasta ¿En 100 monedas? — Pregunta mientras los hombres interesados victorean y los demás se van con mis compañeras.

Me levanto besándole la mejilla, pero al tocar su pecho me doy cuenta de su emblema, no me atrevía a levantar la mirada, pues él era un caballero del rey, tenía el emblema de la familia real, sin duda iría a la cárcel por prostitución.




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