El socio de papá / la historia comienza

Capítulo.20

Sus dedos se siguen moviendo en diferentes lugares.

Mis gadeos se escuchan cada vez más fuertes ya que la crema y la durez de sus dedos hace que el moretón duela más.

-Te duele? - pregunta Leonardo

-si, pero solo un poco! - le respondo

-quieres que siga? - me pregunta

-si - es lo único que respondo

Este incrementa sus movimientos.

(...)

Le pido a xiomara que vaje un poco más la manta que tiene sobre ella.

- ahí esta bien? - pregunta ella sosteniéndose la mata más abajo de lo normal dejando ver la línea curbilenta hacia su entrepierna

-si perfecto - le contestó mirando su piel poco bronceada

Mis dedos viajan por todo el espacio desde por debajo de sus pecho hasta su casi entrepierna

Me pierdo cuando ella jadea de forma algo placentera?

Me paro y me siento sobre la cama.

Tomó sus piernas y la obligó a abrirlas para ponerlas sobre mi regazo y tener mayor espacio.

-me he cansado - le digo cuando ella alsa su cara mirándome a los ojos

Ella solo siente y vuelve a tirar su cabeza hacia atrás.

Deslizó mi mano por debajo de la manta hasta arriba de la rodilla, la paso sobre toda su pierna izquierda hasta sus caderas.

Siento como su piel se eriza por el tacto de mi mano.

La subo por todo su abdomen hasta lo más pegado a sus pecho.

Tu cumpleaños es octubre pero yo te quiero abril....

Me incorporó de cuclillas ahora sobre la cama con sus piernas a los costados míos.

Unto crema sobre las dos palmas de mis manos y las dos las pongo sobre el abdomen de xiomara, esta solo suelta un suspiro de fantasía.

Las desliso de arriba a abajo, sobre la zona de el golpe y la cadera.

De repente siento las manos de xiomara sobre las mías.

Nuestros ojos se conectan de una manera que jamás había sentido con alguien más.

Puedo estar seguro que con solo mirar sus ojos sabía lo que quería y no mentiré, yo también lo quiero.

Deslizó mis manos por debajo de la camisa que le he prestado de Dan hasta que mis dedos se encuentran con sus pezones.

Ella suelta un jadeo de satisfacción.

Abro mejor mis manos a tal punto de llenarlas con sus pechos, los cuales los estrujo entre estas.

Abro mejor sus piernas hasta que nuestras intimidades se rozan.

Puedo sentir su humedad y apuesto que ella está sintiendo mi ereccion.

Reaccionó cuando siento como sus manos guian las mías hasta su parte íntima.

Ella levanta la manta dejando ver la pequeña ropa interior que trae puesta, una delgada braja de encaje color roja.

Sigo bajando mis manos guiadas por su pequeñas y delicadas manos hasta que quedan sobre su intimidad.

Esta desliza sus manos por su abdome hasta su pechos donde los estruja, alza la camisa y empieza a madajear sus peones.

Me inclino hacia delante, dejando mis manos a los lados de su cabeza.

Mis dientes atrapan su pezon derecho, haciendo que xiomara sulte un gemido.

Lo comienzo a chupa y morder mientras que con mi mano izquierda estrujo su pecho derecho.

Mi mano derecha se ba hasta su entrepierna donde alzo sus brajas y dezlizo mi dedo índice por su rajita que ya se encuentra demasido húmeda.

Esta solo desliza sus manos por mi cabello.

Sigo con mi boca en su pezon y mí dedo en su intimidad.

Bajo hasta su ombligo dando y dejando besos húmedos en todo su pecho y abdomen.

Con mis dientes tomó el elástico de sus bragas y las dezliso por toda su pierna.

La sacó y las escupo por algún lugar de la habitación.

Tomó su pie y lo comienzo a besar desde la punta de sus dedos hasta su pierna.

Chupo uno, dos, tres deos de sus pies hasta que subo por toda su perna dejando algunos chupetes y mucha, demasiada saliva por esta.

Abro sus piernas dejándome tener una perfecta vista de su intimidad.

Su perfecta, rosada y húmeda intimidad.

Doy un langüetazo desde arriba hasta abajo, lo más abajo que se pueda.

Lo repito una y otra vez.

Los gemidos de xiomara se empiezan a hacer cada vez más placenteros y exitantes.

Coloco sus piernas sobre mis ombros y con mis dedos abro su labios vaginales.

Con mi dedo pulgar empiezo a hacer movimientos circulares en su clitoris.

De arriba a abajo.

De parte de xiomara sólo escucho murmullos, “más, así, más rápido, ahi"  son las pocas palabras que alcanzó a escuchar

Con ayuda de mi lengua la empiezo a deslizar de un lado a otro.

Así estuve unos minutos hasta que las paredes de xiomara empezaron a contraerse.

Gotas de sudor caían por mi frente y puedo asegurar que xiomara esta así también.

Aumento el ritmo de mi lengua y mi pulgar sobre su clitoris.

Ella empuja mi cabeza más asu centro y se empieza a frotar sobre mi cara, sus jugos están sobre toda mi cara.

Sus gemidos incrementan más hasta que llega, sus jugos se adueñan de mí boca, su cabeza sigue siendo suguetada sobre su intimidad, me tomó todos sus gustos.

Pensé que esto terminaría aquí pero no.

(...)

Maldito orgasmo que me acaba de dar Leonardo.

Me coloco sobre la cama y con las fuerzas que no se de donde saque lo empujó obligándolo a quedar debajo de mi.

Me montón sobre sus piernas.

Este se correo hasta el respaldo de la cama donde apoya su gran y musculosa espalda en el

Mis manos viajan hasta detrás de su cuello, sus ojos están atentos a los movimientos no me resisto más, no puedo más.

Junto nuestros labios en un apasionado beso, coloca sus manos en mi cintura donde poco a poco las baja hasta que sujeta mi tracero, lo estruja y le hace lo que quiere, me da nalgadas, lo que me resulta exitante.

Suelto un gemidos cuando siento una gran palmada en mi culo que hace eco por toda la habitación, el lo aprovecha para meter su lengua, nuestras lenguas juegan a ver quien gana este perverso juego, muerde mis labios, sus manos siguen jugando con mis bragas, tomó con más fuerza su cuello trayendolo más hacia mi boca.




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