Sólo veinte días duró con sus capacidades extraordinarias, la euforia fue demasiado efímera debido a que el chip implantado clandestinamente habría de generar secuelas irremediables en su forma de pensar. Pasó de tener razonamientos brillantes a ser un poco irracionales y bizarros hasta el punto en que su esposa tuvo que sacar de la nevera el gato embadurnado en chocolate. Cambió su vida intempestivamente por lo que él mismo había considerado el invento del siglo.
Al cabo de diez días tuvo que ser internado por haber decaído de nuevo en el abismo del desquicio, empezaba a ser inconsciente de sus pesares y miedos, de nuevo fue atendido por su médico de cabecera Tomás Fonseca, el cual habría de diagnosticar su estado como fuera de lo común, ya que las alucinaciones que presentaba hasta el momento eran presenciadas también por sus compañeros de cuarto.
Hasta el momento se creía que era un síntoma extraño muy inusual llamado sugestión perceptiva compartida, su sueño para él en aquel momento y su ilusión más realista dentro de lo que cabe era ir a la luna, había visto en la televisión del comedor unos astronautas que tenían plantaciones de todo tipo y residían ahí, tenían plantaciones de yuca, de patatas, las pocas casas eran como unos especímenes de cabinas gigantes, las cuales estaban selladas por dentro y por fuera con ventanales de grado espacial para albergar oxígeno que era emanado a gran escala por conductos centrales que evaporaban el agua convirtiéndola en gas frío, rico en oxígeno e hidrógeno; soñaba en las pocas noches en que podía pegar los ojos con que estaba tomando café con sus compañeros lunáticos. Desde que vio ese programa quedó prendado, empezó a leer un libro llamado “El camino de aquí a la luna”, narraba la historia de unos marineros que habían fracasado en su negocio porque ya no podían pescar los mismos pescados y que con la plata ahorrada durante años decidieron tomar el viaje a la luna que costaba casi cien millones por persona en pesos colombianos, el viaje habría de ser una aventura para ellos inolvidable.