Capítulo 16: Un Trato, Un Gran Error

País: México

Ubicación: Nuevo León, Monterrey.

Horario: 21:00 pm

En un lugar bastante desarrollado en cuestión de la tecnología e industria, lleno de edificios y vehículos motorizados que avanzan continuamente en todo momento, aunque esta ciudad no es bastante desarrollada como otros países. Se puede apreciar que la noche ha llegado a todo el lugar. Observándose que un pequeño portal se abre de repente en medio de una carretera, segundos más tarde.

Saliendo por medio del portal Christine, para darse cuenta que muchos vehículos se acercan contra ella a gran velocidad, decidiendo ella invocar un hechizo silenciosamente para crear una gran muralla de piedra enfrente de ella. Siendo así Christine protegida en segundos de forma asombrosa.

Impactando segundos después todos los vehículos motorizados contra dicha barrera sin causarle ningún daño a la barrera de forma extraña.

Christine se da cuenta que acaba de violar la realidad con respecto a la fantasía, decide alejarse del lugar rápidamente para no llamar más la atención, aunque sabe que ya la ha llamado por su aterrador poder.

Logrando ella ver que más adelante, existen muchos árboles aunque estos están siendo protegidos por una gran valla de fierro. No siendo esto ningún problema para Christine, ya que decide dar un gran salto para avanzar a gran velocidad dentro del bosque.

Perdiéndose ella de la vista de todos los posibles testigos, aunque sabe que acaba de crear un gran accidente, ya que las llamas del incendio se extienden hacia arriba fuertemente.

Christine decide avanzar rápidamente por el bosque, aunque finalmente momentos después; se detiene  cerca de un gran edificio extraño bastante antiguo, voltea hacia su alrededor, pero solamente puede apreciar que está completamente sola.

—Necesito un… —dice en voz baja Christine, callándose segundos después, ya que puede sentir una presencia maligna cerca de ella; bastante poderosa.

Christine sabe que alguien la está observando, la presencia se hace cada vez más fuerte conforme avanzan los segundos; decide avanzar hacia un nuevo destino con el fin de encontrar alguna información para saber en dónde se encuentra, pero se detiene en ese momento.

Observa el suelo seriamente por unos momentos, la presencia maldita se siente cada vez más fuerte.

Christine comienza a cerrar su puño derecho mientras que voltea hacia su lado derecho seriamente, pudiendo apreciar ella la silueta de una extraña persona que la observa.

Sin pensarla dos veces, Christine decide acercarse rápidamente contra esa persona, dirigiendo su puño derecho contra ella, pero se da cuenta que; su nuevo oponente esquiva su ataque sorprendentemente.

—¡Vaya, vaya, realmente esto es irreal y prohibido! —suena el grito de un extraño hombre, añadiendo—. Un humano capaz de ver a un fantasma o pudiésemos decir a un demonio.

Mientras que Christine voltea a verlo enojada.

—¡¿Quién eres?!

Comenzando Christine a prepararse para el combate, ya que la extraña persona; se acerca lentamente hacia ella.

—Existen personas que pueden vernos por medio de rituales o posibles dones, pero esa fuerza sobrenatural que tienes; está prohibido en este planeta —responde el extraño, comenzando a darse a conocer delante de Christine con su verdadera forma.

Pudiendo apreciar Christine que el extraño sujeto es un demonio horripilante, sin nariz, cuernos y una capa que en realidad es su piel. Identificándola ella rápidamente con alguien bastante poderoso.

—Veo que acabo de llamar la atención del Dios malévolo más poderoso de todos los universos —informa Christine mientras que el demonio le sonríe.

—Así es, es normal que personas como tú, puedan vernos a nosotros. Posiblemente hiciste un trato con uno de mis siervos, pero para que te des cuenta y sepas con quien hablas… Me voy a presentar. Mi nombre es Satanás (*) y soy el dios malévolo más poderoso de todos los universos —anuncia Satanás no causando su presentación alguna reacción por parte de Christine, ya que ella lo observa seriamente.

—Mi nombre no es importante, ya que no pertenezco a este universo —dice Christine, comenzando Satanás a reírse.

—Jajajaja, exactamente. Veo que eres una criatura que nació con un poder sobrenatural en este planeta, quizá seas la criatura que ha nacido para vencer y seguir venciendo —comenta el demonio mayor mientras que se acerca un poco hacia Christine con una sonrisa malévola, añadiendo—. Nunca pensé que ese ser iba a ser una simple mujer, ya que tu cuerpo…

Callándose el demonio para contemplar por unos segundos, el cuerpo de Christine con una mirada perversa, pero se da cuenta que; un aura bastante extraña y poderosa se siente dentro de Christine. Decidiendo Satanás alejarse un poco de Christine, ya que esa aura lo molesta bastante.

—Será mejor que me dejes en paz y desaparezcas de mi vista —anuncia Christine mientras que Satanás se le queda viendo; silenciosamente.

Logrando ver el demonio que Christine, está observando el cielo sin ninguna preocupación, sabe que por esos rumbos en el espacio, existen miles de seres de otros planetas, observa las manos de Christine y se da cuenta que; estas desprenden un aura rojiza de poca intensidad. Le sorprende que una simple niña de aproximadamente cinco años, pueda verlo con normalidad; además de su comportamiento como una adulta y que no le tenga miedo como cualquier humano o niño en este caso.

—¿Qué quieres? —inquiere el demonio, llamando la atención de la pequeña.

—Poder, quiero ser la más poderosa Diosa Suprema de la Conquista —responde Christine, decidiendo voltear a verlo con una sonrisa para añadir—. ¡Quiero más poder, ya que él es bastante poderoso!

Comenzando el demonio mayor a sonreírle, ya que se le ocurre un plan, aunque no sabe de quién realmente está hablando.