El viaje de un nigromante reencarnado

Regresando al reinó humano(2)

Llego una nueva mañana dándoles la bienvenida a dos pequeñas siluetas de niños avanzando a paso veloz y con ansias por llegar a casa.

Lósif sabe que no es momento de detenerse y después de un almuerzo rápido con todo lo que se necesita están listo para comenzar el viaje al reino.

Lósif tenía muchos pensamientos desde ayer en la noche, sabe muy bien que Kayla es un peligro no solo para el.

Lósif avanzando por el espeso páramo decide hacer preguntas a la chica semihumana.

Lósif— Erika... ¿Qué le pasó a tu cola?—

Erika avanza prestando atención a todo lo que puede, después de todo es su primera vez saliendo del reino y se sorprende un poco al escuchar la pregunta de Lósif.

Erika— Fue cortada cuando tenía dos años por un extraño sacerdote calvo y no volvió a crecer, mi mamá tenía una cola grande y muy bonita—

Lósif presto atención y aún más al escuchar al sacerdote calvo extrañó qué solo le decía un nombre Alcanto.

Lósif— Ya veo... ¿Qué edad tienes?—

Erika— Tengo 19 años y soy mayor que tu señor Lósif, pero no debe de preguntar la edad a las damas—

Lósif casi se cae de espaldas al escuchar la respuesta de Erika, ella tiene 19 malditos años, la misma edad qué él tenía cuando murió.

Lósif — ¡Es en serio! ¿Tienes 19 años? ¡Pero! Oye 19 años de edad animal o algo así—

Erika— No, tengo 19 años de la edad humana y solo a los elfos se les cuenta la edad a años elficos como viven mucho tiempo—

Lósif— ¡Eres una enana!—

Erika dese la noche anterior al estar dormida en los brazos de Lósif, perdió la vergüenza y miedo a hablar con su salvador.

Erika— ¡No soy enana!—

Lósif— Tienes 19 benditos años! Y no mides más alta que mi pecho—

Lósif Enfatizó sus palabras al señalar la cabeza orejuda de la muchacha a su pecho.

Lósif — además no estas desarrollada y pareces una niña—

Erika infló las mejillas al escuchar como se burlan de su inexistente pecho.

Erika— ¡Si tengo!—

Lósif estaba por responder con una burla, pero al saber que esta chica es mayor que el en esta vida decide jugar un poco.

Lósif con una sonrisa fantasmal habla.

Lósif — Eso dices, pero puedes enseñarme para creer, como dicen los sabios "ver para creer"—

Erika— Tú, te digo que es verdad, pero como digas solo cuando veas que digo la verdad no te enojes sabio mago—

Erika rápidamente se bajó la parte superior del vestido y reveló el pecho y en efecto tal y como dijo Lósif, apenas y había algo de volumen.

Erika— Mira, soy grandes—

Levanta el pecho del tamaño de pequeños limones y puntos rosas para dar a entender sus acciones.

Lósif observa con horror como la chica tenía una cicatriz gigante en el pecho y parece de hace años, el presto un poco de atención en el pecho, pero realmente ya sabía los resultados.

Lósif– Si te creo y lo veo. Erika es hermosa y tiene pecho grande como una gallina—

Lósif se estaba riendo un poco al decir esto último, pero parece que la muchacha no escuche la risa.

Erika estaba avergonzada al tener que revelar el pecho y dejar que un hombre lo vea, pero como ella estaba agradecida y además le gusta Lósif. Eso estaba bien para ella, después de todo ella se quedará con el.

Erika puso los ojos en blanco al escuchar la sutil burla de Lósif sobre las gallinas y decide regresarle al ver que se está riendo feliz.

Erika— Lósif tiene el amigo(señala el área de los genitales) más grande que un gallo—

La sonrisa de Lósif se detuvo en seco y se puso frío, todo el cuerpo se congeló y observo a la enana gato sonreír con una sonrisa amable y linda.

Lósif— Oye—

Hablo serio y vio directamente a los ojos ámbares de la muchacha con su único ojo y observo qué la chica estaba sería y deja de reír.

Erika pensó que había cometido un error al burlarse de su salvador y ella misma estaba avergonzada por decir este tipo de cosas.

Erika— Sí, señor Lósif—

Lósif— ¿Cómo supiste que soy más grande que un gallo?—

Preguntó con una sonrisa come mierda al ver la mirada triste de la muchacha enana.

Erika estaba pensando en lo que Lósif preguntaría y estaba preparada para pedirle perdón, pero al escuchar lo que dijo olvido todo y se cayó al suelo por la repentina pregunta.

Erika— Ja, ja, ja, ja. —

Lósif observa a la chica en el suelo llorando de la risa y estaba pensando seriamente en volverse comediante o aquí un bufón, pero no le agradaba la idea de tirarse pedos en frente de toda la gente para hacerlos reír.

Lósif se imaginó así mismo vestido como un bufón al lado del rey con muchos nobles donde le pedían un chiste, entonces aparece un Lósif bufón donde cuenta una chiste muy malo y se agachó para sacar el alma.

Lósif volvió a la realidad al escuchar la voz de la niña que preguntaba.

Erika— Lósif pareces perdido, ja, ja,ja—

Lósif — Qué me confundí—

Erika — qué raro, yo quería hablar primero, pero por alguna razón no pude—

Lósif se sonrojó al escuchar eso de la niña y no corregía, el no podía decirle los pensamientos extraños qué tenía, talvez lo llame un pervertido.

Lósif — Erika, ¿los semihumanos como se hicieron?—

Esta es la pregunta del millón qué Lósif al conocer la existencia de los semihumanos quería hacer y lo peor al matar por error a los esclavos semihumanos no sentía un remordimiento como al matar humanos, su mente lo registraba como matar animales y eso es lo peor porque no sentía nada al matar estos dos. Talvez estaba perdiendo cordura o ya lo perdió desde que vio la masacre de su familia.

Erika— Los semihumanos se hacen cuando una hembra y un macho se quieren mucho, entonces el machó le dice cosas bonitas y hace cosas bonitas para tratar de obtener el amor de la hembra y casarse, después ambos se casan y tienen un hijo por el amor de ambos. Eso me dijo mi mamá—

Lósif— ●◇○—

Erika se sintió avergonzada al ver la mirada sorprendida y algo tonta de Lósif, ella misma no sabe mucho de este tema, pero sabe que el amor es lo más importante.



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En el texto hay: reencarnacion transmigracion, reencarnar, nigromante

Editado: 13.02.2024

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