Él

Danica

Quedamos en vernos a las siete de la noche y apenas son las seis y treinta de la tarde y yo ya estoy en el lugar. No lo hago por afanosa sino para que no nos vean salir juntos. Daré una vuelta por el lugar hasta que se haga la hora de nuestra cita y esperarlo en una mesa. 

-Hola, Danica ¿Qué haces aquí?

Volteo a ver a quién me habla y se trata de Jaime, el compañero con el que hago el trabajo final. Ultimamente nos vemos solo en clases y trabajamos por medio de correos, él es una buena persona.

-Hola, Jaime, yo estoy paseando. Sí, eso. -Sonrío

-Yo también, estaba aburrido hoy sábado y quise dar una vuelta.

-Ah- digo y supongo que se me nota lo nerviosa.

-Te veo sola pero puede que estés esperando a alguien.

-Este, sí, la verdad es que sí- porqué caramba me da vergüenza aceptar que estoy o estaré con alguien.

-Si yo fuera él no te dejaría esperando.

¿Él está coqueteando conmigo?, no lo creo, él solo es gentil.

-Nunca dije que era un hombre -Sonrio- pero en todo caso aún no es la hora de encontrarnos. 

Él parece ser el nervioso ahora, eso me genera un poco de culpa.

-Es cierto, lo siento por asumir tal cosa, entonces nos vemos el lunes- se va alejando y luego voltea y se despide sacudiendo su mano en mi dirección, yo lo imito.

-Que bonita despedida - me susurran al oído, por lo que doy un pequeño salto.

-Me asustaste, hace cu... ¿Qué le pasó a tu cara?

Joaquín tiene su labio inferior partido y un moretón en su mentón. Toco su cara detallándola más pero este le resta importancia. Atrapa mis manos y con delicadeza las aparta de su rostro.

-No es nada serio, discutí con alguien, es todo.

Ayer él estaba bien y hoy está así. Esto pasó ayer despues de clase u hoy temprano. 

-Joaquín por favor, discutir no causa moretones, dime que pasó, ¿sí?

-En serio, todo esta bien, mira pronto te cuento todo. Lo prometo. 

Algo pasa y me preocupa no poder ayudar a Joaquín. Primero el ataque aquella noche, luego el ataque en la azotea y ahora Joaquín golpeado. Esto tiene que estar relacionado y por eso él no quiere contarme.