Capítulo 2.

Una noche de copas una noche loca cambió el curso de sus vidas,la velada en su elegante residencia fue agradable la atracción entre ambos afloró aún más y el licor hizo el resto.

Al despertar él tanteó la cama y sintió el cuerpo de la chica,abrió los ojos y allí estaba ella,dormida tan linda como una princesa.

—¡Me va a estallar la cabeza!—se frota las sienes,la resaca lo aturde y  se mete a bañar.

Karla despertó con el ruido de la ducha al quitar el edredón se vió que estaba desnuda por completo.

—¿Qué rayos hice?,me acosté con el magnate Joseph Lombardi.

Sus prendas de vestir estan regadas a lo largo de la  habitación se las coloca de prisa y baja sin mirar atrás.

—Debo irme antes de que salga de la ducha—Trató de hacer memoria de lo ocurrido.

—Recuerdo sus besos y caricias,mi cuerpo se estremecío entre sus brazos—Karla tiene miedo de la forma en que la pueda despreciar el millonario.

—¿Donde carajos está mi otro zapato?,ni modo no lo voy a averiguar—Masculla mientras alisa su melena con la mano.

La joven sale a tomar un taxi,le falta un Zapato y su aspecto es deplorable.

Una sonrisa se dibuja en su rostro —¡Que hombre!,nunca olvidaré esta noche,Joseph es super apasionado,luego volveré a platicar con él, no quiero que piense que soy atorrante.

Cuando Lombardi sale del baño y se percata de que ella se ha marchado.

—¿Que se hizo ésta mujer?— Aturdido por la borrachera del día anterior va la cocina y busca una bebida energética en la heladera.

—Se fue muy rápido,pensaba darle algo de dinero,me voy a asomar con el auto por acá cerca tal vez la encuentre esperando un taxi.

En su lamborghini le da varias vueltas a la manzana,ella se ha marchado.

—Esa chica era virgen,pude darme cuenta.—Por un momento siente compasión por la muchacha luego se acuerda de su ex novia y un rictus de amargura se muestra en su rostro.

—¡Bah!,todas son iguales,cuando saben que tienen al hombre comiendo en la planta de la mano le dan una patada en el trasero.

Pasa todo el día con malestar tomando jugo de tomate,y sale
a la calle con lentes oscuros,la luz de el sol lo fastia por el desvelo.

—¡No vuelvo a tomar de ese modo!

Al volver a la mansión camina por la piscina y puede ver un zapato,lo recoge y su mente recrea lo sucedido.

—Ella estaba parada aquí,yo la cargué para llevarla a la habitación.

Una sonrisa se dibuja en su rostro y exclama—¡Fue una buena noche!,pero ya pasó,no creo en las mujeres.

Por doquier habían recuerdos de Gabriela que lo atormentaban así que fue a uno de sus departamentos y lo revisó

—Este es ideal para un hombre sólo,esa mansión es muy grande para mí,mañana mismo me mudo.

En su mente quedó el recuerdo de aquella hermosa chica que conoció en la discoteca ella lo impactó desde la primera vez que la miró.

—No me puedo dejar impresionar—Toma una sopa de pollo y recuerda a la joven de la noche de copas.

—Como de costumbre huyó como mi ex,a diferencia de que esta misteriosa mujer me dejó un zapato lo conservaré como un trofeo.

—Ella se me entregó toda sin reservas ni condiciones—Pensó mirando el zapato.

—Que se me hace que tengo que contratar un detective para dar con el paradero de la cenicienta—

Su sentido común le dice que debe buscarla,más su corazón herido le ordena—No,es mejor así ya nadie más se burlará de mí.

Mientras que a las puertas de la lujosa mansión la joven se asoma a preguntar a él vigilante del lugar.

—Buenos días,¡¿se encuentra Joseph?

—Señorita el señor Lombardi ya no vive aquí.

—¿Puede decirme donde encontrarle?

—No tengo esa información.

La joven se fue algo desanimada,tenía la ilusión de ver a Joseph una vez más.

—Típico en los hombres,son como san Blas ya comiste ya te vas—Pelea con ella misma.

—Soy estúpida,una romántica soñadora,tal vez nunca vuelva a verlo—Se siente decepcionada,pero sabe que debe pasar la página.

La vida de ambos siguió su rumbo,Joseph Lombardi Retomó el control de su empresa y los empleados se presentaron los conocía muy poco a algunos de ellos,otros eran nuevos.

—Veo caras nuevas socio—Admira lo diferente que lucen las instalaciones de Bellas O'hills.

—Vamos que te presentaré a la nueva publicista está buenísima—Leandro hace un gesto exagerado y Lombardi menea la cabeza,su socio es mujeriego.

Entran a la sala de juntas,su Leandro le presenta a la publicista encargada de el departamento de mercadeo.

—Ella es Karla nuestra nueva colaboradora que va a elaborar la campaña publicitaria.

—Joseph es el director  de la compañía y socio mayoritario—Añadió Leandro.

El Ceo la reconoció de inmediato y la joven se sonrojó al verlo,ambos fingieron no conocerse.

Karla pensó—Tragame tierra,una noche de copas y me acuesto preciso con mi nuevo jefe.

Él la miró absorto — Es Karla la chica de la discoteca que amaneció en mi cama,esta bellísima.

Sus miradas chocaban de vez en cuando y las mejillas de Karla se tiñen de rojo.

—¡Ay carajo!,¿ahora que le digo a éste hombre?—Sus pensamientos la bombardean.

Por su parte Joseph no es la excepción sus orejas están calientes y coloradas ,su vista se desvia al atractivo escote de la joven.

—Está rechula,es más linda de lo que recordaba—Razona el ceo.

Joseph sacude la cabeza a los lados para recuperar la concentración en lo que decían los publicistas.

—Tengo que concentrarme en lo mío no puedo mostrar debilidad ante ella,a las mujeres les das muestras de cariño y se aprovecha de la situación—Reflexionó Joseph.

Le toca el turno a Karla,toda desconcentrada hace la presentación siente la mirada del CEO encima de ella y no puede con la vergüenza.

—Él se hizo el desentendido yo haré lo mismo tengo que aparentar que no me importa,pero su mirada seductora me ablanda—Respira profundo y evita mirar a Joseph.