Emotional Highs

1. MYSELF.

1. MYSELF. 

 

Tristan Sparks.

Un nombre perfecto para mi chico perfecto. Él es todo lo que está bien en este mundo, es amable, divertido, cariñoso, ama a su familia y es tan, tan lindo que dan ganas de abrazarlo como a un peluche y no soltarlo nunca.

LLevo soñando con él desde hace un año cuando por casualidad me apareció su perfil en mi feed y quedé hechizada con él al instante, comencé a ver sus videos, a ver sus fotos, a seguir a su grupo de amigos y seguir sus aventuras a través de las redes sociales, observaba los edit que creaban de él y los guardaba en mi galería. Pero nunca, nunca, le daba like a sus publicaciones de ninguna red social, ni decía públicamente mi obsesión con él, solamente lo sabía mi prima y nadie más. Sabía que las personas podían ver quien le daba like a una publicación en Instagram y por eso no lo hacía, me gustaba que fuera mi secreto-no tan secreto- y es que en el fondo eso me hacía sentirlo más cerca de mi-lo se eso suena muy mal-y más en tiempos como estos, donde las personas están más reacias al permitir cualquier defecto, porque si, para mi mi obsesión con el es un defecto, no me gusta depender de personas que no conocen de mi existencia, no me gusta que cuando lloro lo primero que hago es ver sus historias y de repente no recuerdo porque estaba llorando, él es eso para mi, es mi escape.

Un día la profesora de ciencias sociales nos dijo que estábamos presenciando el inicio de una nueva era, que ahora los niños y los adolescentes no juegan si no que se la pasan en un celular en las redes sociales, ya no salían, si no que preferían quedarse en sus casas viendo la vida de otras personas a través de una pantalla. Me sentí innegablemente identificada.

Imaginaba una vida que no era mía a través de una pantalla, y me obsesione tanto con ella que no se que hacer cuando todo acabe.

~~~

Me gusta el espagueti, pero lo que más me gusta es la sensación de estabilidad que siento cuando agarro el tenedor y los enrosco en el, es lo que más me gusta de ellos que puedo manejarlos como yo quiera, no es como en el arroz todo desperdigado en la cuchara, los espaguetis se alinean y enroscan en una perfecta imperfección, tal vez todo esto suene demasiado filosófico para unos simples espaguetis pero para mi tienen mucho significado, ya que mi familia vive de ellos. Veran, mi padre tiene un restaurante italiano que se lo dejó su padre-mi abuelo-que es procedente de alla, toda la familia de mi padre de parte de papá vive en italia y cuando mi padre iba a vender el restaurante para mudarse a italia, conoció a mi madre y se enamoró de ella, me tuvieron a mi y ya el resto es historia.., la cosa es que mi padre continuó con el restaurante pero no se conformó con tener uno solo y fue creciendo hasta tener una pequeña cadena de restaurantes, con tres en estados unidos y tres en italia, donde ahora vivimos.

El cambio no fue fácil, recuerdo que lloré en la primera noche esperando un mensaje de mis amigos que nunca llegó, los extrañaba mucho, pero como me dijo mi mamá ellos no eran mis verdaderos amigos, lo cual también fue una de las razones por la que nos mudamos. La comunidad en Nueva York no era la mejor, los vecinos no eran muy amigables con nosotros solo por ser descendientes de inmigrantes italianos y por parte de mi madre inmigrante colombiana, ellos creían que mi madre se casó con mi padre para obtener la visa, lo cual no es del todo mentira. Ella se había enamorado tanto de Estados Unidos que en una noche de borrachera en las vegas agarró al primer primer tipo que vio y se casó con él, cabe aclarar que ambos estaban demasiado tomados, pero después se conocieron mejor y se enamoraron, vivieron bien en nueva york pero los cotilleos de las señoras los molestaba mucho, así que hace un año tomaron la decisión de mudarse a italia para administrar los demas restaurantes. En mi caso mis "amigos" me trataban como un ser que solamente merecía su atención para pedirle favores y que les haga la tarea. Mis padres sabían lo que era mejor para mí, aun cuando yo no lo quería ver.

Ahora, me encuentro ayudando a amasar la masa para las pastas caseras con las que preparamos los espaguetis y las lasañas para el restaurante, aunque la competencia es muy alta acá en italia, no nos quedamos atrás, nuestros restaurantes son unos de los más cotizados en el país y son famosos por que la mayoría de las cosas son caseras, la salsa, la pasta, el queso y los locales son muy hermosos con un ambiente hogareño y natural con muchas flores y luces de decoración, mi madre y yo fuimos las que lo decoramos y no estoy decepcionada por el resultado.

—Kennie, pasame la azúcar porfa—me pide mi mama mientras menea la salsa de tomate casera que hierve en la olla.

—Ya voy mamá.—le digo a la vez que amasó con más fuerza la masa, para por fin terminar.

Me limpio las manos con el delantal y me vuelvo a la almacena dónde están las especias y la azúcar. Cuando voy a alzar la mano para coger la azúcar veo mi celular que está en la mesita debajo de la almacena y lo que me llama la atención es la notificación que me acaba de llegar. Lo cogo, y también el azucar y me dirigo a donde mi madre.

—Gracias, cariño—me dice y me dirige una sonrisa, que le devuelvo.

—De nada, ma—le digo a la vez que me quitó el delantal y me dirijo al baño ya terminada la masa.

Subo corriendo las escaleras para llegar al baño y cuando llego me lavo las manos y me echo agua en la cara, me miro al espejo del lavamanos y una chica morena con grandes mejillas y ojos marrones básicos me devuelven la mirada. Soy fea, mi madre intenta hacerme pensar lo contrario pero verdaderamente soy fea. No como las chicas que fingen tener un mal día y lloran grabandose con el rimel corrido y un maquillaje perfecto o las que muestran sus "imperfecciones" (como un grano) solo para no parecer tan perfecta y subirle el autoestima a sus seguidoras. Soy de verdad fea, mi nariz es enorme y mis mejillas son como las de una ardilla, mi cuerpo es grueso y aunque tengo los pechos grandes no son bonitos, mi abdomen no es plano, mis piernas son largas y gruesas pero tienen manchas por los raspones que me hice de niña, mis brazos son gruesos y feos, y mi pelo tiene frizz y anda todo el dia desordenado porque soy demasiado perezosa como para peinarlo y parecer medianamente decente. Aunque reconsiderándolo, no soy tan, tan, fea. Soy medianamente fea, con un toque de...gracia (?).




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.