empezando desde Cero

15 parte

Jenna

Jasón se toma su tiempo. Aún sigue dentro de mí y yo no quiero que salga.

Tengo ganas de llorar, siento en mi corazón que esto llegó a su fin.

Mi esposo sale y se acuesta en la cama pasando una de sus manos para tapar sus ojos. No dice nada y solo veo su respiración aun agitada.

Mi miedo aumenta y las ganas de llorar. Tomo la sabana y tapó mi cuerpo y un sollozo sale de mis labios Sin poder detenerlo.

Quiero salir corriendo, no quiero que mi esposo me vea así. Me levanto de prisa y salgo por la puerta, lo escucho llamarme pero lo ignoro y salgo a donde era mi antigua habitación.

Antes de cerrar la puerta, Jasón la empuja entrando a la habitación y me examina. No soy capaz de verlo así que le doy la espalda y toma una de mis manos volteándome haciendo que lo mire.

Mis ojos se empañan y veo dolor en su mirada. Me abraza y es cuando me siento derrumbar y ambos terminamos en el piso llorando.

-Perdóname mi amor... Perdóname...- Lo escucho sollozar.

-¿Me... Me vas a dejar? - Me aferro a su cuerpo y él acaricia mi espalda. Me toma en sus brazos y me mecee como niña pequeña.

-Mereces algo mejor mi amor, te amo tanto que no puedo permitir que te arrastres conmigo- Me invade el enojo y empujó su cuerpo. Trato de salir pero mi esposo me estrecha contra él – ¡Detente! – Me dice mientras sigo forcejando -¡¡¡Para!!! – Grita y dejo de luchar y me quedo quieta – Mi amor es por el bien tuyo- Susurro y hace que mi llanto aumente.

-¿Cómo puedes decir que es por el bien mío?... Yooo... Es mejor que te vayas ahora mismo, si esto va a terminar que sea de una vez...-Digo entre llanto.

-Noooo...Nooo ¡¡¡No!!!- Grita –No puedo... No puedo mi amor-

-¿Entonces porque lo vas a hacer?- No responde –Si no me hablas Jasón te juro que salgo por esa puerta y no me vuelves a ver- Manifiesto.

-Si te dijera que puedes recuperar todo lo que perdiste, que puedes recuperar tu vida hasta mejorarla; que jamás tendrás que preocuparte por dinero y podrás vivir en un castillo y ser atendida como una reina ¿Qué harías?-

-Depende-

-¿Depende? ¿De qué depende?-

-Que si tú no estás a mi lado nada de eso valdría la pena. De que me sirve vivir en un castillo como una reina, si no tengo a mi rey a mi lado. Ya viví en un palacio donde lo tenía todo pero mi vida era vacía, prefiero mil veces vivir bajo un puente, mientras tu estés a mi lado- Con esas palabras mi esposo rompe mas en llanto.

Ambos lloramos mientras nos abrazamos y cuando siento que él se ha calmado le pregunto porque esta así. Nos sentamos en la cama y me narra la visita del señor Duncan y su propuesta, mi cuerpo hierve de rabia.

Le pregunte si la decisión era porque él le había propuesto devolverle su fortuna y hasta más que si deseaba terminar conmigo para recuperar todo. Tenía miedo en escuchar su repuesta pero debía saberla.

-Te lo juro por lo que más quiero que jamás, jamás lo haría por eso. Es más le iba a decir que mientras a ti no te faltara nada, yo renunciaba a todo ese dinero- Se arrodilla ante mi pegando su frente contra la mía– No quiero el dinero, solo quiero que tú seas feliz-

-Entonces no debemos aceptar nada, si no te importa que empecemos desde cero mientras estemos juntos, quiero vivir y envejecer a tu lado-

-Tener una familia- Me interrumpe-

-¿Quieres... Una familia?- Tartamudeo. Jasón me sonríe mientras limpia mis lagrimas.

-Quiero muchos hijos. No me importa recuperar el dinero si tu tampoco estas a mi lado, quiero llegar a casa y ver a mi hermosa esposa embarazada y descalza pasear por la casa, quiero que cuando llegue mis hijos corran a mi encuentro- Besa mis labios –Quiero estar a tu lado- Nuestros besos saben ha lagrimas pero no nos importa y seguimos besándonos hasta que se me viene a mi mente al señor Duncan.

-¿Ese hombre que se ha creído en venir y hacer ese tipo de propuestas?- Empujo a Jasón con rabia y este cae de nalgas mientras empiezo a pasear por la habitación completamente desnuda –Es un hijo de puta, cuando lo tenga de frente...- Me detengo cuando veo a mi esposo tomar su pene y masajearlo de arriba abajo -¿Qué crees que haces?- Digo enojada tratando de reprimir mi risa.

-Es que te vez tan hermosa desnuda y enojada- Dice, sonrió y me acerco ayudarlo a levantarse del suelo, Jasón me toma de mis nalgas haciendo que enrolle mis piernas en su cintura. Empezamos a dar vueltas en la habitación completamente desnudos mientras reímos entre besos.

Vuelvo a hacer el amor con mi esposo, pero esta vez prometiéndonos que nada ni nadie nos va a separar. Le comente sobre mi trabajo que aunque no le gustaba la idea que trabaje se alegro porque sabe que es lo que más me gusta.

Ambos yacíamos abrazados hablando y planeando sobre nuestro futuro. Mi esposo iba a buscar trabajo, sabía que con su carrera no le iba a ser difícil en encontrar uno, aunque no fuera el dueño de su propia empresa, por algo iba a empezar.

Jasón no quería que esperáramos mucho tiempo en empezar a formar una familia, pero debió a la situación en que estábamos vamos a esperar 1 año en buscar un hijo. Porque ambos nos prometimos en salir adelante y empezar desde cero...




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.